Texto y Foto: Carmen de Carlos
Corresponsal ABC, España
Mendoza: En teoría deberían ser como el agua y el aceite. Él es radical y ella peronista, pero Julio César Cleto Cobos, de 52 años, y Cristina Fernández de Kirchner, de momento, parecen haber encontrado la fórmula para ligar bien en una ensalada electoral de sabor agridulce. La audacia del gobernador de Mendoza, ingeniero y ex decano de la Facultad Regional de la provincia, le ha costado la expulsión de la UCR (Unión Cívica Radical). La venganza, un plato que se sirve frío, la tiene a pedir de boca. Según todos los sondeos, las urnas le darán la victoria junto a la mujer del presidente Néstor Kirchner el 28 de este mes.
-¿Cómo explica que usted, un radical, sea el candidato a la Vicepresidencia de una peronista?
-Cinco de los seis gobernadores radicales actuales coincidimos con este plan de gobierno. Eso no significa que estemos de acuerdo con todo lo que hace Kirchner. Yo diría que tengo un 70 por ciento de convergencia con él.
-Pero el partido le ha expulsado a usted y no a los otros...
-El presidente del partido (Gerardo Morales) se presenta como vicepresidente con el ex ministro de Economía de Kirchner (Roberto Lavagna), que es peronista, y en la provincia de Buenos Aires, Margarita Stolbitzer (UCR) va en las listas de la Coalición Cívica de Elisa Carrió. Todos han hecho acuerdos, pero sólo me expulsan a mí. Lo único que me falta es que me echen del país.
-Dice que coincide con Kirchner en un 70 por ciento. ¿Cuál es el 30 por ciento de divergencia?
-La metodología, utiliza mucho el poder. En una etapa de postcrisis compartí que había que recuperar la autoridad pública, la figura presidencial. Kirchner eso lo hizo bien, pero ahora es momento de volver a trabajar con mayor tranquilidad y comenzar a buscar mayor institucionalidad.
-¿En qué más disiente?
-Falta internacionalizar y planificar la economía. Hay que sentarse en una mesa con todos y alcanzar acuerdos. El Gobierno no ha tenido visión de futuro, pero ha sido por las circunstancias en que asumió. -Entre las diferencias no ha mencionado la corrupción que se ha destapado en esta última etapa.
-Vivo con cinco mil pesos, mi sueldo como gobernador. Mi forma de vida no ha cambiado. Si tuviera algo oscuro ya me lo habrían sacado. Mi declaración jurada está en internet...
-El problema no es usted o su gestión en Mendoza sino que el Gobierno está bajo sospecha en materia de corrupción: Obras públicas con sobreprecios millonarios, una ministra de Economía que guardaba miles de dólares en el cuarto de baño...
-Algunos funcionarios están bajo sospecha, pero de ahí a decir que el Gobierno entero está bajo sospecha, no coincido. Lamentablemente esos casos han impactado en el Gobierno. De todas formas, conociendo al presidente, sé que estas cosas le molestan. Yo confío en él.
-¿Está de acuerdo, como exige la oposición, en que haya presencia de observadores internacionales en las elecciones?
-No creo que haya fraude ni intención de fraude, pero si se considera conveniente poner supervisores de otros países, no tengo inconveniente.
-De momento, está el caso de Córdoba (sin resultado firme a un mes de las elecciones y con denuncias de fraude) que, con perdón por la expresión, huele fatal...
-Sí, obviamente pero eso es responsabilidad del Gobierno local. Todo lo que ocurre le echan la culpa al Gobierno nacional, pero hay un mecanismo institucional a respetar. Si se tienen que abrir todas las urnas que se abran.
-En España hay un debate abierto sobre la liberación de los violadores. Algo similar se dio en su provincia.
-Nosotros aprobamos una ley donde quedó establecido un registro de los violadores que cumplen condenas y los que quedan en libertad. Es público, la gente puede tener acceso a él, la gente puede saber quiénes son. También tenemos un banco de ADN de violadores.
-El hermetismo y su ausencia en los actos de ella, lleva a pensar que la estrategia de campaña la diseñan en la Casa Rosada y a usted le dejan al margen...
- Es que ellos son herméticos, pero conozco la campaña, he dado sugerencias... Yo no tengo que pregonar que me reuní con Cristina.
-¿Cuáles son sus referentes en política internacional?
-Bill Clinton me impactó mucho. También Rodríguez Zapatero, me gusta porque está haciendo un Gobierno socialista. Es una persona franca. Me encantan los debates en el Congreso. Eso me llama la atención (se ríe), porque acá no hay y en España son bravos, los sigo de cerca...
-¿Es consciente de que, si ganan las elecciones, cuando Cristina Fernández esté ausente o en caso de vacante del cargo usted será el presidente de Argentina?
-Así es, tendrán un hombre que sabe administrar. Esa es la responsabilidad del vicepresidente. Estoy preparado para gobernar.
-Dicen que Néstor Kirchner y Cristina son dos caras de la misma moneda, que él va a ser el presidente en las sombras...
-Sí, sí, dicen esas cosas, pero Cristina le va a dar una impronta propia. Conociéndola, ella no se va a dejar... No quiere ser vista como la mujer del presidente. Ella tiene una visión más global. Va a apuntar más a un proyecto de país a largo plazo. Espero que nos complementemos bien.
-Convendrá conmigo en que eso de plantear la Presidencia como bien ganancial del matrimonio...
-Sí, entiendo que no suena bien, pero conociendo la historia es como si dijeran que Hillary Clinton llega por su marido.
-Ella no presentó su candidatura cuando Bill Clinton estaba en la Presidencia. Ha dejado pasar dos legislaturas...
-La situación en Argentina es diferente, hay procesos internos propios. Aquí los partidos políticos están destrozados... La culpa la tienen todos, pero principalmente los políticos...
-¿Entiende que en el exterior no se entienda que la candidata a la Presidencia es la mujer del presidente porque la ha elegido él?
-Entiendo, pero hay que entender la realidad argentina y los antecedentes. Es la que está mejor preparada. No tendría sentido tirar por la borda una figura como Cristina Kirchner si no hay otra.
-La inseguridad se ha convertido en un tema de debate nacional. ¿Cómo combatirla?
-Hay que seguir una política a largo plazo, como estamos haciendo en Mendoza, aunque de momento no se vean resultados. La educación es la solución para los chicos y jóvenes, hay que incorporar planes de capacitación para darles un oficio, centrarse en la Justicia y en la Policía.
-Ahora que menciona la Policía, el agente Oscar Luis Carralde ha solicitado asilo político en España tras denunciar una red de corrupción que incluye abusos del Cuerpo, escuchas ilegales y connivencia de las fuerzas de seguridad con bandas delictivas.
-Le hemos ofrecido toda la ayuda a él y a la familia para que vuelvan. Le hemos garantizado su seguridad pero no quiere volver. No sé si es tan real lo que dice, lo estamos investigando.