Mañana te van a mentir. Vos decidís en quién confiar
La derecha política y mediática de la ciudad prepara para mañana martes una tremenda operación de prensa contra #CiudadFutura, con las infamias y las mentiras a las que nos tienen acostumbrados. Es luego de presentar nuestro programa #BarrioCiudad, un plan urbanístico y social para abordar los dos principales problemas que tiene hoy Rosario: la desigualdad y la violencia. Ese plan es, a su vez, la contrapropuesta que hicimos pública para el debate del endeudamiento, para empezar a materializarla ahora.
Como la propuesta avanzaba con el oficialismo, la derecha comenzó otra vez a boicotear como hizo en diciembre y, como mafiosos que son, están ahora mismo planificando una operación de prensa para salir mañana por sus medios a decir que “Ciudad Futura negoció la permanencia del Tambo a cambio de la deuda” “que la justicia ya dictaminó” “que no vamos a ser cómplices de un acuerdo espurio entre Ciudad Futura y el gobierno". La misma mentira miserable que nos encargamos de denunciar en el programa de Radio Dos la semana pasada (minuto 14:20 del audio que podés escuchar acá) y que NO está en debate hoy en la deuda.
Para su infamia y su mentira te van a mostrar una resolución, de la que hablé en el programa de radio, del Ministerio de Producción de la Provincia donde, por fin y después de años de lucha, el Ministerio (que es la autoridad de aplicación de la Ley 13334 de freno a los desalojos a unidades productivas) incluye al Tambo La Resistencia en el amparo de la ley. Que es lo mismo que la Corte Suprema de Justicia provincial admitió para estudiar en septiembre pasado y que ya la Jueza de Primera Instancia había dictaminado en 2013.
¿Por qué salió ahora la resolución del Ministerio? Porque, una vez que la corte admitiera nuestro planteo, el Procurador de la Corte, Jorge Barraguirre, realizó un dictamen ejemplar (ver abajo) donde, palabras más palabras menos, da la razón a todos los planteos que venimos haciendo desde Ciudad Futura. Ese dictamen del Procurador que, para los que no sepan de cuestiones jurídicas, es ley para la Administración Pública, hizo que el Ministerio pueda sortear todas las chicanas jurídicas de los abogados de los especuladores y dictamine la inclusión del Tambo en el registro de poseedores, con todos los requisitos que pide la ley impone. Como ven, son dos caminos separados: el de la deuda y el de la lucha de 10 años por las tierras. Las mentiras de la derecha descansan en un presupuesto inverosímil: que Ciudad Futura tiene tanto poder como para influir en todos los jueces de la Corte que, por unanimidad, resolvieron frenar el desalojo (cuando el debate de la deuda ni existía) y sobre el Procurador General de la Provincia, que avala nuestros argumentos.
La derecha es así. Cuando la justicia falla a favor de los que menos tienen, siempre hay algo detrás; cuando fallan favor de ellos, siempre es la justicia.
Prepárense para escuchar cualquier cosa, porque eso hace el poder cuando #ElPoderDeLaGenteComún se le pone enfrente. Como decimos siempre: nos tienen miedo porque no tenemos miedo.
Acá toda nuestra Transparencia. Que muestren ellos sus declaraciones juradas, sus sueldos y sus negocios. Periodistas, concejales, empresarios, etc. Nosotros mostramos todo. Y estamos dispuestos a dar todas las batallas por los más humildes, por los que nadie reclama, por los excluidos de siempre. Y eso tiene sus costos. Que vengan. Acá hay convicciones. Acá hay una alternativa para gobernar la ciudad. Y eso es lo que los preocupa.
PD: si llegan a decir algo sobre la lucha por la oficialización de la escuela que le da la posibilidad a cientos de pibes de los barrios a terminar sus estudios para que tengan una oportunidad en la vida (una entre tantas miles que les saca este sistema) será porque, como dijo Saramago (y estaba en nuestro primer manifiesto): “Desgraciadamente, cuando se avanza a tientas por los pantanosos terrenos de la realpolitik, cuando el pragmatismo toma la batuta, lo más seguro es que la lógica imperativa de la villanería acabe demostrando, a la postre, que todavía quedaban unos cuantos escalones que bajar”.
