“En el Ecuador habían 13000 juicios por injurias y CIDH no había dicho nada” hasta el momento en el que se enjuició al editor de Opinión de diario El Universo, destacó el Mandatario.
Asimismo, hizo conocer que en su país media docena de familias (empresas informativas) deciden qué deben saber los ecuatorianos en una muestra de la defensa de la libertad de mentir.
El Presidente afirmó sin reparos que en el Ecuador “no somos intolerantes con la prensa pero sí somos y debemos ser intolerantes con la mentira” luego de frenar esa intención que tienen los emporios mediáticos de que los gobiernos se sometan a sus caprichos. “Un estado no puede ser agitado por lo que diga la prensa”.
Aprovechó, el tratamiento del tema para recordar que Wikileaks mostró “los arreglos mafiosos entre dos grupos comunicacionales del Ecuador”.
Mencionó, también, que “en América Latina la única dictadura que existe es la de los medios de comunicación”.
Esto ha sido considerado como un “verdadero peligro” para el Gobierno Nacional. “El peligro para la democracia no somos los gobiernos sino el mal periodismo que defienden los privilegios del gran capital” aseveró.
Ese conjunto de argumentos fueron los que apoyaron la ponencia del mandatario que visibilizó que “la agenda de la CIDH y su relatoría de libertad de expresión han sido marcadas por los grandes intereses”.
Foto: EFE
Fuente: ElCiudadano.ec y teleSUR
Fuente: ElCiudadano.ec y teleSUR