Por: Pablo Hecker
Está ocurriendo. Lo que en algún momento parecía impensado finalmente está ocurriendo, y ya parece una tendencia afirmada: la gente está mirando menos televisión abierta.
¿Las razones? Son variadas.
Por ejemplo, está confirmado que el rating de la TV paga en general, o lo que se conoce popularmente como el cable, está subiendo. Esto quiere decir que mucho público que antes protestaba por los contenidos de la TV de aire descubrió que tenía más canales para ver además de los cinco locales si no le gustaba la programación. Y también descubrió que lo que se emite por fuera de los canales que estaba acostumbrado a ver puede llegar a ser entretenido, interesante, educativo, etc. O sea, la gente está cambiando de canal. Es que por otra parte el cable cada vez se parece más a la televisión abierta. Además de la cantidad de propaganda, las que antes en muchos casos eran señales de temática cerrada, ahora se han convertido en señales multitemáticas, en las se pueden ver musicales, documentales, realitys, films o series.
A esto, deberíamos sumarle sin duda la influencia de las nuevas tecnologías que le roban bastantes minutos a la televisión. Obviamente la madre de esto es internet y los diferentes soportes en que se utiliza, ya sea una computadora de cualquier tipo, un teléfono inteligente, una tablet, un iPod, etc.
Y no debemos dejar afuera el éxito de la venta de dvd´s truchos que en cientos de miles día a día compran los argentinos con películas aún no estrenadas. Quizás no se trata de que la TV abierta es mala, sino simplemente que ahora hay muchas más ofertas alternativas accesibles y entretenidas, como pavear en las redes sociales, por ejemplo.
Fuente: Diario El Cronista
