El presidente de la Asociación de Usuarios de Comunicación (AUC), Alejandro Perales, criticó el “acoso y la presión” de los medios de comunicación a los familiares de las víctimas del accidente aéreo del pasado miércoles y reprochó el “sensacionalismo y la falta de respeto” que han mostrado algunas de las informaciones.
En este sentido, Perales citó varios ejemplos de comportamientos negativos registrados en los medios tras el accidente, como la “búsqueda incesante de testimonios”, justificada, a su juicio, por el envío masivo de periodistas a los lugares de la tragedia y la falta de información generada durante el verano. “Los medios sienten tal necesidad de ofrecer datos constantemente, que, a veces, no distinguen entre información real e información basura”, explicó.
Asimismo, destacó los conflictos vividos en los hospitales, donde “algunos periodistas se quejaban por no poder tomar imágenes en el interior del centro hospitalario o presionaban para que los partes fueran leídos por el médico responsable”. A su juicio, el tratamiento de interés humano “está bien”, porque permite empatizar con los familiares de las víctimas, “pero muchas veces cae en el amarillismo y la falta de respeto”. Además, reprobó el hecho de que “varios periodistas realizaran ayer, un día después del accidente, el mismo vuelo que el avión siniestrado para escribir un reportaje basado en las declaraciones de los pasajeros”.
Por todo ello, el responsable de AUC subrayó la importancia de distinguir entre los “programas de carácter informativo” y los “puramente sensacionalistas”. Para Perales, en los primeros, el tratamiento de los datos “suele ser correcto, aunque a veces caen en el amarillismo”, mientras que los segundos “no deberían tratar este tipo de acontecimientos”.
Aun así, Perales valoró de manera positiva la labor realizada por los medios tras la catástrofe del pasado miércoles, aunque recalcó que “en estos momentos se ve lo mejor y lo peor del periodismo al mismo tiempo”. “Lo mejor de esta cobertura ha sido que todos los medios se han volcado con la información del accidente y esto contribuirá a dinamizar el proceso”, apuntó.
"Existe un dispositivo mediático muy potente que permite seguir los acontecimientos en tiempo real, por lo que podemos decir que el derecho a la información de los ciudadanos se está cubriendo muy bien”, afirmó el presidente de AUC. Sin embargo, apuntó que, muchas veces, “la necesidad de suministrar datos constantemente genera información sensacionalista e irrespetuosa”. Por último, Perales sugirió la creación de un “código interno”, por parte de los medios de comunicación, para regular la información sobre catástrofes. “Así, lograríamos compatibilizar la información constante con el respeto a los familiares y las víctimas", declaró.
En la misma línea se ha pronunciado el Consell de l'Audiovisual de Catalunya (CAC), que ha recomendado a los medios de comunicación seguir un código de protección de la intimidad de los afectados por el accidente del miércoles en Barajas. En un comunicado expone, por ejemplo, que para preservar la intimidad y el dolor de las víctimas y sus familias “no debe fomentarse el culto a la emoción ni la espectacularización de la información”. Para ello, los medios deben prescindir de la información “rutinaria o superflua que no añada valor informativo o que pueda resultar dañina para los afectados”, y sustituirla por “intervenciones especializadas de personas o instituciones”.
Fuente: Europa Press