Azanza comenzó señalando que "tanto la justicia como la prensa libre son guardianes importantes de la República", y que ambos poderes suelen incomodar "a los que gobiernan, a los que abusan del poder" porque "les destapan los negociados" y permiten que "la verdad salga a la luz". En esa línea, afirmó que "el gobierno actual definitivamente es un enemigo de la libertad de prensa y de la justicia independiente como ha quedado a lo largo de este proceso de reforma constitucional".
La diputada sostuvo que en Santa Fe "los medios de prensa se han convertido en instrumentos de propaganda que están al servicio del poder". Según su mirada, "los periodistas no investigan, no comunican" porque "tienen que hacer lo que les diga el gobierno", un gobierno que "les va a decir que no a lo que le incomoda". En esa misma crítica insistió en que los medios "están obligados a cumplir con la cuota de publicidad y de pauta oficial", y que ello condiciona completamente su línea editorial.
En una de las acusaciones más directas, Azanza señaló: "No tienen más que buscar las primeras planas, diarios, pasquines, lo que les guste. No nos falta la publinota del día… nunca hay una crítica, nunca hay una voz opositora y muchas de las veces que la hay, ¿saben qué? Mienten. Porque la pauta hizo del periodismo una herramienta de control sobre la opinión pública y esto además muestra la gran connivencia que hay entre el poder político y los dueños de los medios de comunicación".
Para la legisladora, esto revela que "para este gobierno es muchísimo más importante controlar la narrativa que garantizar la justicia y la verdad". Y lo sintetizó con una frase contundente:
"El dinero de la pauta le compra las lealtades, le da premios, castiga. ¿Es prensa? No, es propaganda y es una ofensa a los valores democráticos y sobre todo a la noble profesión del periodismo".
Azanza afirmó que periodistas de trayectoria comparten en privado este diagnóstico, aunque —según ella— no pueden expresarlo públicamente: "Tienen bronca, sienten vergüenza, quieren trabajar con libertad otra vez y quieren informar sin tener miedo a una represalia. Pero no lo pueden decir abiertamente pues están sometidos al gobierno, están asfixiados por un sistema de pauta que los obliga a tener obediencia, un sistema de pauta que castiga la independencia".
Luego interpeló directamente al Ejecutivo: "Si quiere publicidad, ¿por qué no contrata una agencia de marketing o que se la compre y que cuente todo lo que quiera contar, pero que deje trabajar al periodismo?"
La diputada también aportó cifras: "Yo sí tengo los números de la pauta porque estoy en la Comisión de Presupuestos. Hay 10.500 millones de pesos para políticas de comunicación. Hay 5.000 millones de pesos para Radio y Televisión Santafecina y ¿saben qué? Esos 5.000 es el mismo monto que recibe el Ministerio Público de la Acusación. ¿A ustedes les parece? Yo también con esa plata, la verdad que haría que todos digan que soy joven".
Finalmente, cerró su intervención con un llamado a frenar el uso de recursos públicos como herramienta de disciplinamiento mediático: "Nos llenamos la boca hablando de democracia y libertades. Necesitamos una prensa libre… No podemos permitir que la plata y los fondos públicos sigan siendo usados para silenciar la verdad. Basta de propaganda. Digámosle sí a la prensa libre y al futuro de los santafesinos".
