Netflix dice que no transmitirá los canales de televisión estatales rusos, que la plataforma de streaming está obligado a albergar a partir de la vigencia de la nueva regulación rusa.
"Dada la situación actual, no tenemos planes de agregar estos canales a nuestro servicio", dijo un portavoz de Netflix en un comunicado a The Hollywood Reporter.
En diciembre, el regulador de comunicaciones del país agregó a Netflix a su sector de "servicios audiovisuales", exigiendo que el servicio ruso de Netflix cumpla con las regulaciones que se aplican a las emisoras y canales con más de 100.000 televidentes diarios. Estos incluyen los principales canales gratuitos de Rusia, entre ellos el Canal Uno de propiedad estatal, y las redes de cable, incluido Spas, un canal administrado por la Iglesia Ortodoxa de Rusia. Según la nueva ley, que entra en vigor desde este 1 de marzo, todos estos "servicios audiovisuales" deberán transmitir 20 importantes canales de televisión federales rusos, muchos de los cuales transmiten propaganda a favor de Putin.
No está claro cómo planea Netflix desafiar la ley y qué impacto tendrá en su servicio ruso. Netflix tiene grandes planes para Rusia, ya que ha dado luz verde a su primera serie original rusa, Anna K., una versión moderna de la novela clásica de León Tolstoi, Anna Karenina, y con varias series y películas en idioma local en preparación. Netflix se negó a comentar cuando The Hollywood Reporter le preguntó si la guerra en Ucrania afectaría sus planes de expansión en Rusia.
El desafío de Netflix a Moscú se produce cuando otros gigantes tecnológicos como YouTube, Twitter y Facebook (y la empresa matriz Meta) están sopesando qué hacer con sus operaciones en Rusia para mitigar la desinformación y la propaganda. Meta detuvo la monetización de anuncios para los medios estatales rusos y anunció el domingo por la noche que había eliminado docenas de cuentas falsas que difundían información errónea sobre Ucrania en sus plataformas. Twitter está etiquetando todo el contenido de los sitios de medios propiedad del gobierno ruso y ha prohibido previamente los anuncios de los medios de comunicación estatales.
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Fuente: The Hollywood Reporter
