Por: Xose Martín
“Los periodistas nunca deben ser amigos de sus fuentes porque esto les condiciona”, recomendó, Victoria Prego, presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), en la primera sesión del I Congreso de Periodismo y Comunicación Global, celebrada el 6 de febrero en la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid.
La presidenta de la APM defendió que entre los periodistas y los responsables políticos o económicos “tiene que haber siempre una pared de metacrilato, que mantenga al periodista a un lado y a la fuente al otro”. “No se puede traspasar ese muro” -aconsejó-, porque “en cuanto lo traspasas, te has equivocado”.
Victoria Prego participó en la mesa redonda “Periodismo y debate político”, que estuvo moderada por Manuel Tapia. Al respecto, Pregó señaló que el debate político “está en la calle, pero muy contaminado”. “Me parece muy saludable que la calle tome posiciones”, pero antes debe estar bien informada y “esto es lo que no está garantizado”. Por este motivo, apuntó que los ciudadanos necesitan de instrumentos de autodefensa para cribar las informaciones ciertas de las que no lo son, e hizo un llamamiento para que “se enfrenten con espíritu crítico y actitud autodefensiva hacia los mensajes que reciben” a través de los teléfonos móviles y de las redes sociales, puesto que los “hay acreditados, pero también manipuladores”.
El periodismo y las redes sociales
Por su parte, Jan Martínez Ahrens, director adjunto de El País, defendió el uso de las redes sociales como una oportunidad para llegar a los lectores, conocerles mejor y poder interactuar. Sin embargo, señaló, “se trata de una interacción compleja”, donde “los bulos navegan con mucha libertad” y es cierto que hay usuarios que “hacen un uso maligno” de las mismas y “tienen existo”.
Las redes han crecido tanto que han engullido al periodismoEl director adjunto de El País señaló que está cambiando la percepción de las redes sociales. Con lo ocurrido en EE.UU. con la elección de Donald Trump, “hemos visto el uso político que se puede hacer y la gente ha aprendido a distanciarse y a no creerse todo lo que hay ahí”. “La época de eclosión de las redes sociales está llegando a un límite”, advirtió, lo que está provocando que algunos medios que surgieron al calor de estas, como BuzzFeed o HuffPost, ahora estén “en una situación crítica” y realizando “despidos masivos en EE. UU.”. En el caso de El País, apuntó, los lectores que reciben a través de las redes representan en torno al 15 o 16%. “Es una cantidad importante, pero es la misma que hace 3 o 4 años, e incluso está descendiendo”, añadió.
Mesa redonda “Periodismo y debate político
“Las redes han crecido tanto que han engullido al periodismo”, subrayó Lucía Méndez, periodista de El Mundo y directiva de la APM, añadiendo que la mayoría de los periodistas de este país viven en Twitter. La periodista censuró a aquellos compañeros que debaten con políticos en las redes sociales. Es un comportamiento que “debería estar prohibido en los códigos deontológicos de los medios”. Este tipo de comportamiento, al igual que compartir tertulias en plano de igualdad, está propiciando que la ciudadanía no encuentre la diferencia entre un periodista y un político. “Deberíamos preguntar a los políticos, no debatir” con ellos, subrayó. “Qué credibilidad va a tener un periodista al informar de un partido si se le ha visto en las redes debatir u opinar con ese líder político”, se preguntó. Para Méndez, la responsabilidad de esta problemática recae en los periodistas y no en las redes sociales.Agustín Yanel, secretario general de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP), también advirtió que, aunque las redes sociales son importantes, “también tienen peligros y hay que tener cuidado”.
Sobre los periodistas que participan en tertulias, Yanel les pidió honradez y que “cuando no saben de algo, no opinen”. Por su parte, el periodista de Libertad Digital Pablo Montesinos señaló que su tertulia idónea es la “formada por buenos periodistas, que están en los sitios y que cuentan con buenas fuentes”.
En la misma línea, el periodista de Cuatro Javier Ruiz, añadió que para realizar una buena tertulia política es necesario trabajarse el tema, no perseguir a la audiencia siendo honesto contigo mismo y tener criterio propio. “Si os equivocáis, es legítimo. Cometer errores es legítimo”, señaló dirigiéndose a los alumnos.
Colegios de periodistas
Preguntados por la conveniencia de un colegio de periodistas en Madrid, Victoria Prego, presidenta de la APM, confesó no ser partidaria de su creación porque “lo que pueda defender un colegio, ya lo defiende la APM. Por lo tanto, me parece innecesario y que no va a resolver nada”.
Victoria Prego explicó que un colegio profesional es una entidad de derecho público y una asociación es de derecho privado. Esto significa, detalló, “que un colegio tiene que elaborar unos estatutos que deben ser aprobados por el poder político y creo que los periodistas tenemos que estar al otro lado”. “No podemos estar tan cerca del poder, que nos autoricen los estatutos y cuyo consejo estatal dependa de Presidencia del Gobierno”, argumentó.
Por otro lado, también explicó que “la Unión Europea tiene una línea que es completamente contraria a los colegios de profesiones no reguladas”, como es el caso del periodismo. La Unión Europea, dijo, solo es partidaria de los colegios para las profesiones que afecten a la salud pública, a la seguridad y al medioambiente.
Un colegio de periodistas no puede mejorar las condiciones laboralesPor estos motivos, la presidenta de la APM subrayó no ser partidaria de crear un colegio de periodistas en Madrid. No obstante, tanto Prego como Agustín Yanel defendieron que todo el mundo puede organizarse como quiera. Yanel señaló que en España la profesión “no está regulada legalmente, por lo tanto no hay obligación de colegiarse”. Además, como mencionó también Prego, “la Unión Europea tiende a la desaparición de casi todos los colegios profesionales”.
Para Agustín Yanel, el problema reside en que “un colegio de periodistas no puede mejorar las condiciones laborales de los periodistas” -de las cuales se ocupan primordialemnte los sindicatos-, por lo que, si además “tiene la amenaza de que a medio plazo puede desaparecer [por la normativa europea], veo muchas incógnitas”, concluyó el secretario general de la FeSP.
Foto: Miguel Berrocal
Fuente: Asociación de Prensa de Madrid