Por: Lourdes Durán
Las piedras lanzadas contra la hambruna y el desorden mundial, primero en el sector minero de Gijón y después en Palestina, vientres hinchados por el hambre en el corazón de
las tinieblas de Ruanda, aquellos caramelos que le dio una cría herida en un hospital de Sarajevo. Tantas y tantas escenas del horror donde la cordura se pierde por menos de nada han sido registradas por la mirada de Javier Bauluz, fotoperiodista laureado con el Pulitzer que, sin embargo, minimiza para darle importancia a lo fundamental: "Devolver la dignidad al oficio".¿Hacia qué o quiénes dirige sus críticas?
Cada vez son más los ciudadanos y también los periodistas que están convencidos de que se ha perdido el norte. El periodismo hoy ya no está interesado en la información sino que se mueve por el afán de lucro. Los mct así llama a los medios de comunicación tradicionales se han convertido en empresas. Esto nos ha llevado a donde estamos y al descontrol absoluto.
¿Por eso alumbran "Periodismo Humano"? ¿Un nombre cargado de intención, imagino?
¡Precisamente por eso, porque el periodismo debería ser humano! Queremos volver a los orígenes de la profesión cuando era un servicio público para ciudadanos, no sometido a intereses políticos ni empresariales. Que regrese a los Derechos Humanos.
¿Incluirán la disidencia y la herejía en los Derechos Humanos como sugirió José Saramago recientemente?
La disidencia ya está recogida. ¡En cuanto al herejía, no sé yo! (Risas).
¿Una heroicidad necesaria abrir un nuevo medio de comunicación en los tiempos que corren?
Se trata de recuperar la dignidad del oficio y contamos con las posibilidades tecnológicas para hacerlo. No será una publicación al uso, su formato será digital, en abierto. Ya no se necesitan rotativas, muy caras, ni antenas gigantes para transmitir información a todo el mundo. Se puede hacer a través de la red. Esto no es futuro, ya es presente.
Lo digital no está al alcance de todo el mundo. ¿Estamos hablando de que sus lectores se situarán en el ámbito occidental?
No, precisamente lo que se quiere hacer es que la mirada sea más amplia, porque en los medios convencionales sólo son visibles cuando se les traduce en números. Es aquello que dijo Galeano, escribir las noticias de los "nadies". Tantos muertos en una catástrofe, en una epidemia... El acceso a internet está más extendido de lo que pensamos. Queremos que no sea un medio más. Sabemos, que sólo será posible a medio y largo plazo.
¿Cómo se va a financiar?
Con el apoyo de la sociedad civil. Igual que tantas otras organizaciones sin ánimo de lucro, a través de socios y subscripciones.
¿Cómo contempla la actual saturación informativa, mucho mayor en la red, casi un sumidero donde colar tanta basura?
Va a ser muy importante la selección y la credibilidad de las informaciones porque, sí es cierto, hay mucha basura en la red, pero también hay muy buenos periodistas que están desaprovechados. El año pasado, en el Manifiesto sobre Periodismo y Derechos Humanos se vio la urgencia de volver al origen del periodismo. La sociedad debe ser consciente de que sin una buena información, no tiene capacidad de pensar y actuar. Si nos borrasen el archivo de las imágenes, volveríamos a la Edad Media.
¿El consumo nos ha anestesiado?
Desde luego, la sociedad contemporánea está anestesiada y la profesión periodística, en coma. Si se corta el cordón umbilical entre la realidad y los ciudadanos, ganará la ignorancia.
Usted dio clases en la Universidad Pompeu en Barcelona. ¿El periodismo ya no se aprende en la calle?
Creo que en las universidades se debería dar información más actual en cuanto a tecnología, metodología y ética periodística.
Bauluz ejerce la profesión desde distintos frentes. También tiene productora, Piraván.
Trabajamos en multiformatos, vídeo, fotografía y el concepto es el que hemos estado hablando todo este tiempo. Visualizar quienes son, cómo viven aquellos que están en la cultura del subdesarrollo.
Los "invisibles".
Sí.
Foto Miguel Massuti
Fuente: El Diario de Mallorca
