La Autoridad Federal de Aplicación de Servicios Audiovisuales comenzará a funcionar en Argentina el próximo 10 de diciembre.
Esto fue dicho en el acto que presidió Cristina Fernández de Kirchner en La Plata. También que ese miso día comenzará a funcionar la empresa Radio y Televisión SA. La mandataria recibió un premio de manos de Solano López con le imagen de "El Eternauta".
La Autoridad Federal de Aplicación de Servicios Audiovisuales comenzará a funcionar en Argentina el próximo 10 de diciembre.
Esto fue confirmado durante el acto que la presidenta Cristina Fernández encabezó en la ciudad de La Plata.
En tanto, se anunció que la empresa Radio y Televisión Argentina SA, comenzará a funcionar en la misma fecha.
Además se aprobó el estatuto que regirá a Radio y Televisión Argentina SA, por lo que se efectuó la invitación a los organismos que integrarán dicho organismo.
En el acto, la primera mandataria recibió un premio de manos de Solano López, consistente en una estatua que reproduce la figura de “El Eternauta”, por haber impulsado la Ley de Servicios Audiovisuales.
Luego de recibir el premio la primera mandataria tomó la palabra y destacó la aprobación de proyectos durante su gestión como al transferencia de fondos "a favor de los trabajadores" y de la finalización de la Ley de Obediencia de Vida, logro que adjudicó a las Madres de Plaza de Mayo presentes en el acto.
“Nosotros sólo fuimos los conductores de esa ley, pero ustedes fueron las artífices”, destacó.
Sobre la Ley de Medios Audiovisuales, enfatizó un sonado agradecimiento "a todos los que incasablemente lucharon durante todos estos años para alcanzar la sanción de la ley".
En ese sentido se dirigió a los periodistas “que son y serán críticos pero que supieron separar las diferencias y apoyaron decidida y combativamente esta norma”.
En la misma línea de pensamiento agradeció a los partidos políticos de la oposición “que también mantienen diferencias con nosotros pero que entendieron que había que aprobar y aprobaron por mayoría en Diputados y en Senadores la norma”, sostuvo.
Aclaró cuando la transferencia de los fondos de la ANSES fueron aprobados “sólo por un voto nadie se quejó". Y agregó: “No se que hubiera pasado si esto mismo hubiera sucedido con la Ley de Medios”, ironizó
Asimismo, aludió a “las grandes presiones de los monopolios que trataron de evitar estos cambios. Aquí estamos, en esta batalla cultural, donde han quedado al descubierto y se han caído algunos mitos, como por ejemplo, el de la libertad de prensa independiente”, señaló.
“Este instrumento servirá para que todas las voces, las que nos gusta escuchar y las que no nos gusta también, puedan tener expresión. Es para que cada uno de los actores de esta sociedad se sientan representados. Los pueblos originarios, periodistas, directores”, remarcó.
“Nunca estuve sentada para calentar sillas, nunca, nunca”, dijo en torno a una reunión que en el pasado mantuvo con actores culturales que le reclamaron por la reforma de la ley de Medios.
“Porque no fui a calentar el sillón de Rivadavia es que voy a dar todas las batallas para atacar temas sensibles como la pobreza. Porque estoy convencida que lo importante de la función que me ha sido conferida es hacer honor a quienes depositaron su confianza y su fe para que las cosas deben ser cambiadas”, apuntó.
“Lo importante es que en todos y cada unos de los momentos difíciles, cada una de las decisiones las he tomado con la convicción de que lo hacía para cada uno de los hombres y mujeres que viven en mi patria. Porque yo no creo en esa división maniquea de buenos y malos. Fundamentalmente divisorias del campo popular y como tenemos algunos palos en el lomo y tenemos historias terribles yo quiero decir que quiero seguir construyendo consensos”, añadió refiriéndose al proyecto de reforma política que ingresará al Congreso.
“Vamos a impulsar un sistema como el que rige en Santa Fe y que permite que la sociedad elija a sus candidatos en elecciones primarias. Es necesario que todos los ciudadanos participen en la elección de quienes nos van a representar, para que todos tomemos la responsabilidad de los dirigentes y de la sociedad cuando emite su voto y elige a quienes los representan”.
“Se ha caído el mito en cuanto a que no podíamos construir consensos. No las vivimos como concesiones sino como construcciones que son dos cosas absolutamente diferentes. La construcción es la convicción profunda de que si podemos ponernos de acuerdo con esto podremos ponernos de acuerdo con muchas cosas más. Necesitamos que desde todos los partidos políticos hagan honor a su historia, con coherencia, porque es posible construir una Argentina que crea que la política es el verdadero instrumento para construir una realidad”.
Calificándola como una “feria de vanidades” y de “egoísmos” aludió a actitudes como la demostrada por el vicepresidente Julio Cobos, acusándolo de decir algo en el pasado “y otra cosa a la hora de construir consensos”.
Una ley que derrota a la dictadura genocida
El titular de la Coalición por la Radiodifusión Democrática, Néstor Busso, sostuvo hoy que con la sanción de la nueva ley de Servicio Audiovisuales "derrotamos una vez mas a la dictadura genocida y al neoliberalismo del mercado”.
En un acto llevado a cabo en el Teatro Argentino de La Plata, con la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, Busso dijo que "la democracia argentina esta de fiesta” con la sanción de la nueva ley y remarcó que con esa norma “profundizamos la democracia”.
"La política le ganó a las corporaciones, supimos y pudimos hacerlo”, indicó Busso, y agradeció a la Presidenta "por escucharnos”.
El titular de la Coalición por la Radiodifusión Democrática, entidad que presentó los 21 puntos para una nueva ley, señaló que con la sanción de la norma "se ha saldado una deuda de la democracia”.
El discurso completo:
Señora Presidenta, señores gobernadores, señoras legisladoras, señores legisladores, funcionarios nacionales y provinciales, queridas Madres Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, Compañeras y Compañeros.
Estamos de fiesta. La democracia argentina está de fiesta. Con la Ley de Servicios de Comunicación audiovisual 26522 derrotamos una vez más a la dictadura genocida y también derrotamos al neoliberalismo y su dios, el mercado.
Supimos y pudimos hacerlo.
Gracias, Presidenta, por escuchar y asumir lo que pedimos y reclamamos desde las organizaciones libres del pueblo. Tenemos que agradecerle su decisión y valentía política.
Este logro de la democracia, lejos de ser una victoria de un sector político en contra de un grupo económico y mediático, es el resultado positivo de un largo proceso de construcción social, popular y democrática, que obedece a distintos factores, de orden histórico, político y cultural.
Se ha saldado una deuda de la democracia. Trabajamos por esto muchos años.
Desde muchas de las organizaciones que hoy estamos aquí veníamos planteando desde la recuperación de la democracia la necesidad de una nueva ley en la convicción de que no hay posibilidad de afianzamiento de la democracia política sin democratización de la comunicación.
Teníamos conciencia del poder que enfrentábamos. El poder de los grandes grupos económicos que pretendían mantener vigente el decreto ley que ellos en complicidad con la dictadura habían impuesto en el año 80 y habían modificado en su beneficio en los 90.
Hace 5 años, unidos bajo el concepto de que la Ley es siempre producto de una correlación de fuerzas sociales y políticas nos propusimos buscar acuerdos y construir esa fuerza social y política.
Construimos lo que luego denominamos Coalición por una Radiodifusión democrática y que hoy tengo el honor de representar aquí.
Nosotros acordamos, redactamos, instalamos y logramos adhesiones a los 21 puntos que son la base de la Ley 26522.
Vengo de la Patagonia, desde Viedma, como parte de FARCo y de ALER, pero tengo la responsabilidad de representar en este momento a las organizaciones de defensa de Derechos Humanos, a las queridas Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, a todos los Sindicatos de trabajadores de la Comunicación, de la CGT y de la CTA, a las Universidades nacionales y sus carreras de comunicación, Ciencias de la Información o Periodismo, al Movimiento Cooperativo, a los Pueblos originarios, a Organizaciones y movimientos sociales del oficialismo y también de la oposición.
La Coalición por una radiodifusión democrática se enorgullece de haber sido partícipe necesario del proceso de elaboración del Proyecto de Ley; surgido desde las organizaciones libres del pueblo, reconocido en el mundo como modelo para la elaboración de normas.
El 27 de agosto de 2004 trescientas organizaciones de la sociedad civil, organismos de derechos humanos, trabajadores de la comunicación, centrales sindicales (CGT y CTA), universidades nacionales, pueblos originarios, organizaciones sociales, movimiento cooperativo, pymes de la comunicación presentamos los 21 Puntos básicos para una Ley de Radiodifusión de la democracia. El 10 de setiembre de 2004 los llevamos a la Casa Rosada.
Desde la elaboración de los 21 Puntos la Coalición transitó a lo largo y ancho del país miles de encuentros, debates, seminarios, mesas redondas. Logramos inclusive la adhesión de numerosos Concejos Deliberantes y varias Legislaturas provinciales. Esos 21 puntos alimentaron la propuesta presentada por usted, Presidenta, en este mismo lugar el 18 marzo. Esa propuesta a su vez fue devuelta nuevamente a la sociedad para su posterior debate y corrección.
Reivindicamos este proceso, reconocido por el relator de Libertad de Expresión de Naciones Unidos, Frank La Rue, como inédito en el mundo para la elaboración de una Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
El debate democrático con que se generó esta propuesta coincide con el propósito final de la Ley: darle más democracia a la democracia y elevar la calidad institucional de la sociedad.
Ahora que casi todos los actores intervinientes en el debate hicieron suyas las banderas de los 21 puntos elaborados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática –después de haber ignorado o, lo que es peor, ninguneado su existencia-, vale la pena insistir que los mismos fueron elaborados hace ya cinco años, desde fuera del gobierno y como demanda al gobierno, lo que quita toda validez a los flacos argumentos de que este es un armado oficialista, o un “debate express”, o de un aparente “apuro” del oficialismo por sancionar la norma.
En ese proceso de cinco años, logramos cosas importantes además de la Ley:
Logramos poner en debate el tema de la Comunicación y el rol de los medios de comunicación.
Logramos reavivar a la militancia y la participación popular. El debate ciudadano, especialmente de los jóvenes.
Logramos la unidad del campo nacional y popular.
Logramos disputar lo público en los espacios públicos. Esta vez, la batalla no estuvo solamente en las pantallas, y eso no supieron entenderlo quienes se opusieron y quedaron en minoría. La batalla se ganó en el espacio público, en el boca a boca, cara a cara, en las calles, los centros culturales, las asociaciones vecinales, las universidades, en la construcción de ese camino siempre complejo entre lo social y lo político. Las batallas de la comunicación que siguen serán de igual o mayor importancia. Y las otras batallas de la democracia pendientes, como la distribución de la riqueza, el empleo, la pobreza, el hambre de los más chicos, entre muchas otras, tendrán condiciones más favorables para ser resueltas con esta nueva y auspiciosa redistribución de la palabra, cuya puesta en práctica habrá que saber concretar y defender.
En este proceso de debate parlamentario el oficialismo supo ganar aliados, supo negociar y ceder, supo realizar modificaciones. Vale también destacar el papel de sectores de la oposición que hicieron aportes y lograron cambios que enriquecieron el proyecto. En contraste con un oposicionismo que buscó excusas para postergar el debate vale destacar el rol de los bloques del Partido Socialista, Libres del Sur, Solidaridad e Igualdad, la Concertación y Proyecto Sur.
Las significativas diferencias de votos positivos y negativos en ambas cámaras hablan a las claras de un resultado abrumador, poco previsto para muchos, quienes imaginaban un resultado ajustado que ni siquiera se dio en la votación en particular de algunos artículos en la Cámara Alta, cuando hasta el sistema electrónico dijo basta cerca de las 6 am.
Quien haya presenciado esos debates, no puede dejar de subrayar su condición democrática y su espíritu deliberativo, un ejemplo a imitar en tantísimas otras propuestas legislativas de importancia.
En este camino de construcción de la nueva Ley de Medios se escucharon las voces públicas, las cartas abiertas, los documentos, los debates, los foros en todo el país, las calles y las plazas como escenarios de la democracia. Predominaron los actores sociales que actúan día a día en lo público, aunque sus rostros, sus nombres no se conozcan, aunque no sean noticia para los grandes medios. Ganó una novedosa experiencia cultural y política de democracia participativa, esa que sitúa en cada ciudadano y su voz el valor de la política y de las decisiones que afectan a las mayorías.
Con la promulgación de la Ley 26522 se abre una nueva etapa no menos importante que la anterior. Es necesario reglamentar y aplicar la Ley. Estaremos atentos y vigilantes en esa tarea.
A las organizaciones sociales, a las universidades, al igual que a los medios públicos, se nos presenta un gran desafío. Deberemos afianzar otro modelo de comunicación. Con ética y con otras estéticas que reflejen la identidades de nuestras comunidades, de nuestro pueblo. Y que sean capaces de disputar los sentidos para narrar nuestra historia desde nosotros mismos.
Integramos la Coalición por la Radiodifusión Democrática y no solamente por una Ley de Radiodifusión. Por eso vamos a seguir trabajando, en la reglamentación y en la implementación de la Ley. Vamos a trabajar para democratizar las comunicaciones. Vamos a estar atentos a que los 21 puntos no sean solo letra de una Ley sino una realidad.
Señora Presidenta: Puede contar con nosotros para acompañarla en esta tarea. Para enfrentar al partido de los medios le ofrecemos esta trama de apoyo a la aplicación de la Ley. Dice el refrán popular que “hecha la ley, hecha la trampa”.
Nosotros decimos que hicimos la Ley y ahora estaremos atentos para impedir cualquier trampa haciendo una trama para sostenerla y hacerla cumplir.
Un grupo de gobernadores e intendentes del Gran Buenos Aires fueron los primeros en acomodarse cerca del palco, en el Teatro Argentino de La Plata, donde la presidenta Cristina Fernández de Kirchner presidió un acto por la implementación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Estuvieron ubicados en sus butacas, los gobernadores de San Juan, José Luis Gioja; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Entre Ríos, Sergio Uribarri; de La Rioja, Luis Beder Herrera; de La Pampa, Oscar Jorge; y de Tucumán, José Alperovich.
Entre los intendentes, presentes se observó a los de Florencio Varela, Julio Pereyra; de Tres de Febrero, Hugo Curto; y de Ezeiza, Alejandro Granados.
Foto1: En el centro, la presidenta Cristina Fernández. La acompañan de izquierda a derecha: Gabriel Mariotto, Aníbal Fernández, Néstor Busso, Enrique Albistur y Tristán Bauer.
Foto 2: Cristina Fernández en el Teatro Argentino de La Plata. Atrás, Gabriel Mariotto, Aníbal Fernández, Néstor Busso, Enrique Albistur y Tristán Bauer. (Gentileza Presidencia de la Nación)
El titular de la Coalición por la Radiodifusión Democrática, Néstor Busso, sostuvo hoy que con la sanción de la nueva ley de Servicio Audiovisuales "derrotamos una vez mas a la dictadura genocida y al neoliberalismo del mercado”.
En un acto llevado a cabo en el Teatro Argentino de La Plata, con la presencia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, Busso dijo que "la democracia argentina esta de fiesta” con la sanción de la nueva ley y remarcó que con esa norma “profundizamos la democracia”.
"La política le ganó a las corporaciones, supimos y pudimos hacerlo”, indicó Busso, y agradeció a la Presidenta "por escucharnos”.
El titular de la Coalición por la Radiodifusión Democrática, entidad que presentó los 21 puntos para una nueva ley, señaló que con la sanción de la norma "se ha saldado una deuda de la democracia”.
El discurso completo:
Señora Presidenta, señores gobernadores, señoras legisladoras, señores legisladores, funcionarios nacionales y provinciales, queridas Madres Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, Compañeras y Compañeros.
Estamos de fiesta. La democracia argentina está de fiesta. Con la Ley de Servicios de Comunicación audiovisual 26522 derrotamos una vez más a la dictadura genocida y también derrotamos al neoliberalismo y su dios, el mercado.
Supimos y pudimos hacerlo.
Gracias, Presidenta, por escuchar y asumir lo que pedimos y reclamamos desde las organizaciones libres del pueblo. Tenemos que agradecerle su decisión y valentía política.
Este logro de la democracia, lejos de ser una victoria de un sector político en contra de un grupo económico y mediático, es el resultado positivo de un largo proceso de construcción social, popular y democrática, que obedece a distintos factores, de orden histórico, político y cultural.
Se ha saldado una deuda de la democracia. Trabajamos por esto muchos años.
Desde muchas de las organizaciones que hoy estamos aquí veníamos planteando desde la recuperación de la democracia la necesidad de una nueva ley en la convicción de que no hay posibilidad de afianzamiento de la democracia política sin democratización de la comunicación.
Teníamos conciencia del poder que enfrentábamos. El poder de los grandes grupos económicos que pretendían mantener vigente el decreto ley que ellos en complicidad con la dictadura habían impuesto en el año 80 y habían modificado en su beneficio en los 90.
Hace 5 años, unidos bajo el concepto de que la Ley es siempre producto de una correlación de fuerzas sociales y políticas nos propusimos buscar acuerdos y construir esa fuerza social y política.
Construimos lo que luego denominamos Coalición por una Radiodifusión democrática y que hoy tengo el honor de representar aquí.
Nosotros acordamos, redactamos, instalamos y logramos adhesiones a los 21 puntos que son la base de la Ley 26522.
Vengo de la Patagonia, desde Viedma, como parte de FARCo y de ALER, pero tengo la responsabilidad de representar en este momento a las organizaciones de defensa de Derechos Humanos, a las queridas Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, a todos los Sindicatos de trabajadores de la Comunicación, de la CGT y de la CTA, a las Universidades nacionales y sus carreras de comunicación, Ciencias de la Información o Periodismo, al Movimiento Cooperativo, a los Pueblos originarios, a Organizaciones y movimientos sociales del oficialismo y también de la oposición.
La Coalición por una radiodifusión democrática se enorgullece de haber sido partícipe necesario del proceso de elaboración del Proyecto de Ley; surgido desde las organizaciones libres del pueblo, reconocido en el mundo como modelo para la elaboración de normas.
El 27 de agosto de 2004 trescientas organizaciones de la sociedad civil, organismos de derechos humanos, trabajadores de la comunicación, centrales sindicales (CGT y CTA), universidades nacionales, pueblos originarios, organizaciones sociales, movimiento cooperativo, pymes de la comunicación presentamos los 21 Puntos básicos para una Ley de Radiodifusión de la democracia. El 10 de setiembre de 2004 los llevamos a la Casa Rosada.
Desde la elaboración de los 21 Puntos la Coalición transitó a lo largo y ancho del país miles de encuentros, debates, seminarios, mesas redondas. Logramos inclusive la adhesión de numerosos Concejos Deliberantes y varias Legislaturas provinciales. Esos 21 puntos alimentaron la propuesta presentada por usted, Presidenta, en este mismo lugar el 18 marzo. Esa propuesta a su vez fue devuelta nuevamente a la sociedad para su posterior debate y corrección.
Reivindicamos este proceso, reconocido por el relator de Libertad de Expresión de Naciones Unidos, Frank La Rue, como inédito en el mundo para la elaboración de una Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
El debate democrático con que se generó esta propuesta coincide con el propósito final de la Ley: darle más democracia a la democracia y elevar la calidad institucional de la sociedad.
Ahora que casi todos los actores intervinientes en el debate hicieron suyas las banderas de los 21 puntos elaborados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática –después de haber ignorado o, lo que es peor, ninguneado su existencia-, vale la pena insistir que los mismos fueron elaborados hace ya cinco años, desde fuera del gobierno y como demanda al gobierno, lo que quita toda validez a los flacos argumentos de que este es un armado oficialista, o un “debate express”, o de un aparente “apuro” del oficialismo por sancionar la norma.
En ese proceso de cinco años, logramos cosas importantes además de la Ley:
Logramos poner en debate el tema de la Comunicación y el rol de los medios de comunicación.
Logramos reavivar a la militancia y la participación popular. El debate ciudadano, especialmente de los jóvenes.
Logramos la unidad del campo nacional y popular.
Logramos disputar lo público en los espacios públicos. Esta vez, la batalla no estuvo solamente en las pantallas, y eso no supieron entenderlo quienes se opusieron y quedaron en minoría. La batalla se ganó en el espacio público, en el boca a boca, cara a cara, en las calles, los centros culturales, las asociaciones vecinales, las universidades, en la construcción de ese camino siempre complejo entre lo social y lo político. Las batallas de la comunicación que siguen serán de igual o mayor importancia. Y las otras batallas de la democracia pendientes, como la distribución de la riqueza, el empleo, la pobreza, el hambre de los más chicos, entre muchas otras, tendrán condiciones más favorables para ser resueltas con esta nueva y auspiciosa redistribución de la palabra, cuya puesta en práctica habrá que saber concretar y defender.
En este proceso de debate parlamentario el oficialismo supo ganar aliados, supo negociar y ceder, supo realizar modificaciones. Vale también destacar el papel de sectores de la oposición que hicieron aportes y lograron cambios que enriquecieron el proyecto. En contraste con un oposicionismo que buscó excusas para postergar el debate vale destacar el rol de los bloques del Partido Socialista, Libres del Sur, Solidaridad e Igualdad, la Concertación y Proyecto Sur.
Las significativas diferencias de votos positivos y negativos en ambas cámaras hablan a las claras de un resultado abrumador, poco previsto para muchos, quienes imaginaban un resultado ajustado que ni siquiera se dio en la votación en particular de algunos artículos en la Cámara Alta, cuando hasta el sistema electrónico dijo basta cerca de las 6 am.
Quien haya presenciado esos debates, no puede dejar de subrayar su condición democrática y su espíritu deliberativo, un ejemplo a imitar en tantísimas otras propuestas legislativas de importancia.
En este camino de construcción de la nueva Ley de Medios se escucharon las voces públicas, las cartas abiertas, los documentos, los debates, los foros en todo el país, las calles y las plazas como escenarios de la democracia. Predominaron los actores sociales que actúan día a día en lo público, aunque sus rostros, sus nombres no se conozcan, aunque no sean noticia para los grandes medios. Ganó una novedosa experiencia cultural y política de democracia participativa, esa que sitúa en cada ciudadano y su voz el valor de la política y de las decisiones que afectan a las mayorías.
Con la promulgación de la Ley 26522 se abre una nueva etapa no menos importante que la anterior. Es necesario reglamentar y aplicar la Ley. Estaremos atentos y vigilantes en esa tarea.
A las organizaciones sociales, a las universidades, al igual que a los medios públicos, se nos presenta un gran desafío. Deberemos afianzar otro modelo de comunicación. Con ética y con otras estéticas que reflejen la identidades de nuestras comunidades, de nuestro pueblo. Y que sean capaces de disputar los sentidos para narrar nuestra historia desde nosotros mismos.
Integramos la Coalición por la Radiodifusión Democrática y no solamente por una Ley de Radiodifusión. Por eso vamos a seguir trabajando, en la reglamentación y en la implementación de la Ley. Vamos a trabajar para democratizar las comunicaciones. Vamos a estar atentos a que los 21 puntos no sean solo letra de una Ley sino una realidad.
Señora Presidenta: Puede contar con nosotros para acompañarla en esta tarea. Para enfrentar al partido de los medios le ofrecemos esta trama de apoyo a la aplicación de la Ley. Dice el refrán popular que “hecha la ley, hecha la trampa”.
Nosotros decimos que hicimos la Ley y ahora estaremos atentos para impedir cualquier trampa haciendo una trama para sostenerla y hacerla cumplir.
Un grupo de gobernadores e intendentes del Gran Buenos Aires fueron los primeros en acomodarse cerca del palco, en el Teatro Argentino de La Plata, donde la presidenta Cristina Fernández de Kirchner presidió un acto por la implementación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Estuvieron ubicados en sus butacas, los gobernadores de San Juan, José Luis Gioja; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Entre Ríos, Sergio Uribarri; de La Rioja, Luis Beder Herrera; de La Pampa, Oscar Jorge; y de Tucumán, José Alperovich.
Entre los intendentes, presentes se observó a los de Florencio Varela, Julio Pereyra; de Tres de Febrero, Hugo Curto; y de Ezeiza, Alejandro Granados.
Foto1: En el centro, la presidenta Cristina Fernández. La acompañan de izquierda a derecha: Gabriel Mariotto, Aníbal Fernández, Néstor Busso, Enrique Albistur y Tristán Bauer.
Foto 2: Cristina Fernández en el Teatro Argentino de La Plata. Atrás, Gabriel Mariotto, Aníbal Fernández, Néstor Busso, Enrique Albistur y Tristán Bauer. (Gentileza Presidencia de la Nación)