Diálogo con Jorge Rivero, presidente del DTV council de la Argentina, que apoya el sistema europeo
Después de una publicitada ronda de pruebas con los diversos consorcios oferentes de normas para la futura televisión digital, a fines del año pasado, el gobierno hizo un silencio de radio sobre el tema. En principio, se comunicó oficiosamente que la norma elegida había sido la europea DVB, pese a que a fines de los '90, durante el gobierno Menem, se había optado por la norteamericana ATSC. En el borrador del actual proyecto de Ley de Radiodifusión se toca muy tangencialmente el tema.
Ahora, pese a que los EE.UU. inaugurarán su televisión digital el año que viene, y Europa un año después, se comenta que América latina sólo a principios de la década del '20 estará en condiciones de hacerlo. Dialogamos sobre todos estos temas con Jorge Rivero, presidente del Consejo de la Televisión Digital (DTV Council), la primera asociación argentina dedicada a asesorar sobre este tipo de tecnología.
Periodista: ¿A qué se debe el silencio, desde diciembre del año pasado, en el tema de la televisión digital?
Jorge Rivero: El gobierno se dio cuenta de que no se podía seguir hablando de elegir una norma de TV digital terrestre (por aire), sin replantear todo el escenario de la radiodifusión. La nueva tecnología digital permite realizar demasiados cambios en los servicios de lo que aún llamamos «radiodifusión», y la vigente ley no los contenía. No es tan importante «cúal» será la norma técnica a adoptar sino saber qué queremos hacer con ella. Las tres proveen «alta definición», pero no se pueden regalar los 6 Mhz. de ancho de banda necesarios para trasmitir 1 canal de HD (en el que hoy se transmite 1 canal analógico), cuando se podrían aprovechar para transmitir 4 canales de SD (definición standard), diversificando la oferta de información y multiplicando la producción de contenidos, lo que deriva en la democratización de la cultura y la eliminación de los monopolios informativos.
P.: Si el gobierno ya eligió, entre bambalinas, la norma europea DVB, ¿a qué atribuye usted que no lo comunique?
J.R.: Bueno, era evidente la necesidad de una nueva Ley de Radiodifusión. Si usted analiza el proyecto de Ley, este se enfoca en todo lo que es posible con DVB, soslayando otras capacidades o posibilidades de las otras normas. Esto deja en claro que no hace falta comunicar la norma, sabiendo leer entre líneas está implícita.
P.: Lo que se dice en el proyecto tiene que ver con que no se asignaran los 6 Mhz de banda para Alta Definición sino su particion de 1,5 Mhz por licenciatario. Esto es bueno por un lado para evitar la concentración pero, ¿no se está privando a la Argentina de Alta Definición?
J.R.: No. Si consideramos los indicadores de ventas de monitores de HD en los países que cuentan con estos servicios, veríamos que es bastante bajo aún, y tengamos en cuenta que estos indicadores son muy mentirosos, también. Cuando hablan de ventas totales de monitores HD, no todos van a los hogares, los sectores corporativos para sus empresas, eventos y el mismísimo comercio, decoran sus ambientes con ellos. Por ejemplo, Phillips acaba de vender 200 LCD a un Sindicato (que inaugura un hotel propio), pero no por eso podemos decir que 200 familias más tienen HD en Argentina. Hay que tener cuidado con usar los totales de ventas y proyectarlos a familias, que multiplicado por 4 integrantes cada una, arrojaría (en este caso simbólico), 800 personas mas con HD. Los números se manipulan, hay que leer con cuidado.
P.: Entonces, no habrá HD de todas maneras.
J:R.: La Argentina no tiene posibilidades, con los precios actuales, de llevar monitores HD a sus 10 millones de hogares en un plazo prudencial que justifique adoptar un servicio de Alta Definición. Solo 11% de la población integra el nivel socioeconómico ABC1 (alta y media-alta), que es el que, hoy por hoy, puede realizar un gasto o inversión de tal magnitud. Los niveles socioeconómicos C2 (media-media) y C3 ( mediabaja) representan 35% de la población, están muy endeudados, en ellos impacta mas directamente la inflación, licuando salarios, y una compra en cuotas mediante tarjeta no les es posible (no les entra en los cupos) y de contado aún menos. Para los niveles socioeconómicos D1, D2 y E, que integran 54% de la población, un monitor de Alta Definición, es imposible ( inclusive, en 2 tercios de estos casos, será imposible para siempre). Esta extensa explicación redunda en graficar el concepto de que no hay posibilidades reales de atender a nuestra población con un servicio de Alta Definición, entonces, ¿para que priorizarla?
P.: ¿Y dónde se verá HD?
J.R.: Habrá servicios pagos de HD a través de las plataformas de servicios de TV por Cable y por Satélite, que las empresas pueden brindar a su criterio, y en la norma que deseen. Justamente, la gente que puede pagarse estos servicios de cable y/ o satélite, es la que también, en parte, puede pagarse monitores HD. Cómo se verá, no se priva a la Argentina para nada de la HD, por el contrario, aquellos que puedan pagarla, la tendrán de sus proveedores privados. Pero los que ganarán serán aquellos que no pueden pagar un servicio de cable o satélite, porque podrán acceder a una cierta cantidad de canales nuevos de TV Digital, no limitándose solamente a los actuales canales abiertos en analógico. La parte de la población con menos recursos, gozará mas que nadie de la nueva TV Digital Terrestre (por Aire), porque esos mismos canales y contenidos, ya están incluidos en el cable y el satélite.
P.: ¿Cómo es la ley en otros países con respecto a este punto? Quienes transmitirán en Alta Definición concentrarán poder al contar con cuádruple partición de banda?
J.R.: Sería muy largo relatar «cómo» es o será esto en otros países, pero en la Argentina el ancho de banda del espectro asignado para la radiodifusión no es propietario para el licenciatario, esto es, es una licencia de uso específica, no puede hacerse con ella lo que se quiera, y por ende, una licencia para un canal es sólo eso. En EE.UU. mayormente, se tramiste 1 canal de HD y 1 de SD en un mismo canal de 6 Mhz., pero, es exactamente el mismo contenido en sus dos versiones. En Europa, los 8 Mhz de ancho de banda de la canalización, se usan para un multiplex, y así poder transmitir varios canales distintos. En definitva, las distintas normas permiten diversas configuraciones de transmisión, el tema es siempre qué modelo de TV quiere cada país. Brasil eligió priorizar la HD, a sabiendas que más de 60% y hasta 70% de su población jamás tendrá acceso.
P.: Los EE.UU. producirán su apagón analógico el año próximo, Europa en 2010, y se dice que en América latina tardaría hasta 2020. ¿Esto es así?
J.R.: Así parece. Aunque con respecto a Latinoamérica, aún no podemos precisar ninguna fecha de apagón, cuando todavía ni despega el tema.
P.: ¿Cómo está la situación en Brasil con el sistema japonés? ¿Tambien tardarán hasta el 2020 o los japoneses agilizarán la transición?
J.R.: En Brasil la situación es muy particular porque adoptaron un sistema que, por priorizar la HD y por ser único en el mundo, tiene los set-top-box (cajas receptoras-demoduladoras) mas caras existentes. Cabe acotar que Brasil generó una norma técnica propia, aunque basada en la norma japonesa. Brasil transmite en MPEG-4, cuando Japón lo hace con MPEG-2, por ejemplo. Los japoneses impulsan la adaptación brasileña en América, por cuanto tienen royalties a su favor, aunque podríamos decir que lo que Brasil está implementando es una norma cuasi propia.
Entrevista de M.Z.
Fuente: Ámbito Financiero