El presidente del grupo editorial más importante del país insta a los gigantes de internet a cumplir con el código de conducta establecido en Australia
Por: José María Sánchez
El uso de contenidos informativos por los servicios de internet, de nuevo foco de atención. Tras años de dimes y diretes, por fin se ha establecido el impacto económico en el país por culpa del uso de las informaciones de internet en sus servicios digitales. Un grupo de comunicación australiano cifró este jueves en 600 millones AUD (386 millones de dólares o 357 millones de euros) la cantidad que los gigantes tecnológicos como Google y Facebook deberían pagar cada año a los medios en Australia por las noticias que publican.
Aferrándose al código de conducta aprobado por el Gobierno australiano en abril, el presidente del grupo Nine Entertainment (propietario de «The Sydney Morning Herald» y «The Australian Financial Review») Peter Costello ha asegurado que Facebook y Google están obligados a abonar alrededor de unos 357 millones de euros a un fondo que se distribuirá entre todos los medios del país.
Australia ordenó el mes pasado al organismo oficial encargado de la competencia y consumo la creación de unas reglas de conducta obligatorio que incluyen el pago y el intercambio de los ingresos generados por la publicación de noticias por parte de sus plataformas de internet. Google y Facebook tributan alrededor del 10% de los ingresos que obtienen en el país y ha sido durante años motivo de disputa. Una situación que se ha repetido en otros países europeos como Francia o España, donde se han estudiando la creación de «tasas» específicas a estas empresas estadounidenses que por su posición global se aprovechan de la presión fiscal más relajada de algunos países para pagar menos impuestos.
Este código de conducta obligatorio, cuya elaboración estará a cargo de la Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC, siglas en inglés), también establece que los gigantes de internet deberán cubrir asuntos como el intercambio de datos, la clasificación y visualización de las noticias, el pago y el intercambio de los ingresos generados, indicó hace un mes en un comunicado el jefe de la oficina del Tesoro, Josh Frydemberg.
Costello ha asegurado que Google y Facebook deberían pagar el 10 % de los ingresos que obtienen por la publicación de las noticias producidas por los editores sin ser los autores del material periodístico que publican. «Creemos que Google y Facebook están generando unos ingresos publicitarios de unos 3.571 millones de euros en Australia y, aproximadamente, el 10% de esa cifra es el resultado del contenido de las noticias», defendió.
El borrador de este código está previsto que se publique a finales de julio para ser sometido a consultas antes de su entrada en vigor. Se trata de una reforma impulsada por la ACCC que quedó previamente plasmada en un informe final publicado en diciembre en donde se presenta el impacto de los buscadores de internet y las redes sociales en el mercado publicitario y de los medios de comunicación.
Un sector que ha sufrido un retroceso por la irrupción de estas empresas que, junto con Amazon, se reparten el pastel publicitario a nivel mundial. Este informe destacaba que las plataformas digitales en Australia concentraban hasta el 51% de la inversión publicitaria en 2017 tras doblar su participación en los cinco años anteriores a costa de las publicaciones impresas, que en el mismo periodo pasaron del 33 al 12 por ciento del gasto.
En Australia, Facebook es la principal red social con 17 millones de usuarios registrados, según algunas métricas, mientras que Instagram, propiedad de la misma empresa, acumula unos 11 millones de usuarios. Google, en cambio, gestiona el 90% del tráfico web. Una situación de posición que ha provocado una serie de investigaciones por posible monopolio por parte de la Comisión Europea.
Fuente: Diario ABC