El mercado llegará a 2021 con 80 millones de suscriptores, equivalente a 42,4 por ciento de los hogares de la región, según prevé el último informe de la consultora Dataxis.
Entre los factores que explican la desaceleración, la consultora señaló tanto a la crisis brasileña como a los "nuevos modelos de desarrollo" que enfrente esta actividad, ante el avance de los servicios de streaming y de contenido audiovisual por internet.
En ese sentido otra consultora, Carrier y Asociados, afirmó que en Argentina "la mitad de los usuarios -de internet- consume algún servicio de video de OTT" (over the top, en referencia a los servicios de contenidos audiovisual por streaming), ya sean pagos o gratuitos como Odeón.
Según el informe "usuario online 2016", dos de cada 3 usuarios del segmento ABC1 consume estos servicios, que pueden llegar al usuario por mano propia o bien como parte de un paquete de servicios de un proveedor de acceso a internet (Claro Video, Arnet Play u Onvideo).
Como norma general, más allá del estrato socioeconómico, estos servicios "tienen una penetración más alta en los hogares donde habitan menores".
"De momento, su presencia convive armoniosamente con los abonos de TV paga, mostrando entonces una complementariedad de contenidos y formas de acceso", consideró el titular de la consultora, Enrique Carrier.
Una de las novedades que se espera en el mercado para este segundo semestre del año en la Argentina es que QubitTV incorporará transmisiones de señales de televisión en vivo a su servicio de contenido audiovisual.
Según publicó Carrier, Netflix "puede considerarse el tercer proveedor de televisión paga del país, detrás de Cablevisión y DirectTV", ya que llega a unos 2 millones de hogares, aunque por la tendencia a compartir un abono entre varios individuos la facturación se realiza sobre 850.000 cuentas.
Además de la conectividad, la masificación del video en línea, y el abaratamiento de las tecnologías, lo que verdaderamente obliga a desarrollar nuevos modelos de negocio, es la incorporación de los millenials -nacidos y criados con internet- a la población económicamente activa, con sus propios ingresos.
Este grupo es el "segmento que hoy es más propenso a no tener TV paga ni teléfono fijo, sino simplemente una conexión de banda ancha fija y un smartphone".
"Adicionalmente, esto se da en un momento de alta inflación y de reacomodamiento de precios relativos, con fuertes alzas en las tarifas y precios de algunos bienes que disminuyen el ingreso disponible para servicios que en alguna medida son sustituibles", consideró Carrier.
El especialista agregó que este es un "escenario que podría favorecer la aceleración de este proceso de migración desde plataformas de TV tradicionales hacia otras basadas en Internet, pasando de la complementariedad a la sustitución".
Fuente: TelAm
