Por: Bárbara Anderson, barbara.anderson@milenio.com, @ba_anderson
Esta semana, en la primera ronda de subastas del Instituto Federal de Telecomunicaciones por las licencias de nuevos canales de televisión digital abierta, apareció bajo los reflectores un empresario poco conocido, pero con un consorcio de medios poderoso en toda Latinoamérica: Remigio Ángel González.
Y aparecieron datos de su perfil: de Nuevo León, pero radicado en Miami desde hace décadas, dueño de 45 estaciones de tv en 16 países (cinco de ellas en México). Una de sus empresas, Telsusa, se quedó con 10 frecuencias en todo el país.
“No tiene el instituto noticia de ninguna circunstancia que le impida participar en estos procesos, y esa es la razón por la cual les otorgó la constancia de participación”, le dijo el comisionado del Ifetel, Gabriel Contreras, ayer a Ciro Gómez Leyva en una entrevista.
Dudas por la manera en la que había desembarcado en otros países, las relaciones con políticos de dudosa transparencia y hasta su presencia en los Panama Papers.
Uno de los países donde aplicó la fórmula de ‘comprar medios endeudados y luego aliarse a los gobernantes de turno’ —logrando a cambio poderosas pautas oficiales— fue en Argentina. En 2006 compró 80 por ciento de Canal 9 al empresario Daniel Hadad. “Lo hizo aún cuando la normativa prohibía —y todavía impide— que un extranjero sea dueño”, recuerda Alejandro Alfie, redactor de Clarín. Y como El fantasma (su apodo más conocido) no podía figurar como único propietario, puso en los papeles a un abogado argentino —Carlos Lorefice Lynch— como su socio local. Habría pagado por Canal 9 entre 25 y 26 mdd y lo hizo vía una de sus empresas en EU, Televideo Services Inc.
Tres años más tarde, su compañía Grupo IMC Radios compró en Buenos Aires la FM Aspen. “El puso solo 5 por ciento a su nombre, 30 por ciento a Televideo (empresa suya) y dejó 65 por ciento otra vez para Lorefice Lynch, que no aportó ningún dinero para esta operación”, explica Alfie y “arregló con el gobierno para que al año siguiente desembarquen en Canal 9 programas de la tv pública que cambiaron su línea editorial y comenzaron a replicar la misma sintonía ultrakirchnerista del canal oficial”.
Solo en 2010 recibió más de 72 mdd del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Antes de ser del empresario mexicano, ambos medios facturaron solo 4,1 mdd de pauta oficial.
En 2012 González lanzó otra radio FM, la RQP, en Capital Federal.
Ahora, en tiempos de oposición y con Mauricio Macri en la presidencia, González hizo un acuerdo con Prisa (España) para gestionar la histórica Radio Continental. Inmediatamente levantó todos los programas pro Kirchner, despidió a los periodistas oficialistas como una señal de buena voluntad al nuevo gobierno.
Pero jamás hubo una investigación sobre la irregular manera en que compró y es dueño exclusivo de esas señales.
Foto: Diario 1.com
Fuente: Diario Milenio