Ricardo Degwitz, presidente de Notitarde y Carlos Carmona, presidente de El Impulso, Venezuela ambos presentes en la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa, coincidieron en señalar que la reciente decisión de Tribunal Militar de Control de prohibir al general Raúl Isaías Baduel la salida del país, no es más que una cortina de humo lanzada para desviar la atención de los temas realmente importantes, como la decisión del juez penal argentino Daniel Petrone de interrogar a los funcionarios de PDVSA que se encontraban en el avión cuando ocurrió el decomiso del maletín con 800.000 dólares.
Carmona sostiene que la decisión contra el antiguo aliado del presidente Chávez es cuanto menos extemporánea. "Una sanción que debió producirse muchos meses atrás, ocurre en el momento en que el conviene más para desviar la atención de otro tema, que molesta más al gobierno y es el tema del maletín con 800.000 dólares y de la corrupción que hay en el país".
"El hecho de que se le prohíba incluso que declare a los medios de comunicación es curiosísimo, sorpresivo y sorprendente. Todo el mundo tiene derecho a manejar sus argumentos de defensa, pero en mi opinión es sólo sentido de oportunidad para desviar la atención. En Argentina el peso que se le ha dado a este tema es muy grande, por los nombres de los involucrados; estamos hablando de la que entonces era candidata ala presidencia de Argentina, de ministros, en fin, lo que se cuestiona es la corrupción política. En Buenos Aires a esto se le ha dado carácter de asunto de Estado", afirma Carmona. De hecho, algunos partidos de la oposición argentina han solicitado un juicio político para el ministro Julio de Vido, por el caso de la valija.
Degwitz, por su parte, señala que lo ocurrido con Baduel no es más que otra muestra de la intolerancia del Gobierno contra la disidencia. "Es lamentable que se agarre como excusa el alegato de que el ex ministro de la Defensa cometió irregularidades y que por eso se le detiene, cuando todos sabemos de la enorme corrupción que existe entre altos funcionarios del Gobierno y gente vinculada al mismo, y contra quienes no se toma ninguna medida. A Baduel, que apoyó de manera rotunda al presidente Chávez, y que ahora piensa de manera distinta, se le reprime de una manera incomprensible para la mayoría de los venezolanos".
Afirma Degwitz que lo ocurrido al general Baduel es no sólo una muestra más de la intolerancia del Gobierno con cualquiera que piense de manera distinta a la suya, sino también una lección para quienes piensan que apoyar al presidente Chávez y a su movimiento socialista les otorgará alguna clase de garantías a la hora disentir. Tienen que darse cuenta de que dentro del chavismo eso no es posible".
Fuente: Agencia EFE