Por: Miguel Wiñaski
Hay una nueva Cristina Kirchner: es hiperactiva, tiene sentido federal, habla con la prensa con mayor soltura que su esposo, busca con énfasis la redistribución del ingreso, da respuesta a cada uno de los pedidos de los ruralistas y está convencida de que la crisis financiera internacional es una oportunidad inmejorable para la Argentina.
Eso busca instalar la nueva estrategia de comunicación desplegada por la Casa Rosada, ideada por el vocero presidencial Miguel Núñez, el secretario de Medios, Enrique Albistur, y el jefe de Gabinete, Sergio Massa, que cada día gana más protagonismo.
Cada una de las apariciones públicas de la presidenta es puesta en escena cuidadosamente pensada de antemano.
El plan se reactualizó con dos nuevas acciones para difundir las ideas K: la publicación de columnas de opinión que llevan la firma de la presidenta, como la editada en "Noticias de la Costa", de Viedma, un método que -aseguran- se repetirá en otros diarios.
También la intervención de un "periodista oficial", llamado Marcial Cáceres, empleado de la presidencia, que hace reportajes a funcionarios e incluso a la propia Cristina, para después divulgar esas declaraciones a los medios, sin aclarar que esas entrevistas, en realidad, son "truchas".
Cáceres es santacruceño y conoce a los Kirchner de las épocas en que cubría la campaña presidencial del 2003 para el Canal 9, la emisora estatal de Santa Cruz. Después trabajó en Canal 7 y ahora fue convocado por el vocero Núñez para generar "noticias" y "manifestaciones".
Tanto la publicación de columnas escritas por la pluma presidencial, como el accionar del "periodista" Cáceres, buscan que el mensaje de CFK llegue a las audiencias sin intermediarios.
El plan comunicacional del gobierno incluye otros ítems que se cumplen a rajatabla:
- Cristina hace, como mínimo, un acto semanal en el interior del país y otro en el conurbano bonaerense.
- Además, en cada uno de los discursos repite conceptos similares, ya que los comunicólogos de la presidencia creen que la repetición de ideas logra instalarlas en la sociedad.
- La mayoría de los actos dejó de hacerse en la Casa Rosada y ya casi no se usa el salón blanco.
- La idea del gobierno es que la presidenta "no quede pegada" a la imagen del discurso desde el atril, el estilo que instaló su esposo Néstor y que está asociado a su figura.
- En sus discursos, Cristina Fernández intenta dar un mensaje esperanzador respecto a la crisis financiera, un consejo de Massa.
- En los actos realizados en las provincias, la presidenta siempre alude a que ella conoce las necesidades del interior, ya que proviene de la Patagonia profunda.
- Ante cada anuncio de obras, asegura que eran pedidos hace muchos años por los dirigentes locales, pero que recién se pudieron poner en marchar ahora, "con este proyecto que comenzó en el 2003".
- En el último tiempo, los actos estuvieron referidos a dos temas en particular: obras energéticas y planes de medidas y entrega de subsidios para el sector agrario, dos obsesiones de la presidenta.
Según contaron en el gobierno nacional, la idea central del plan comunicacional, que comenzó con la primera conferencia de prensa que dio la presidenta en la Quinta de Olivos, es lograr instalar la idea de que ella tiene el mando del gobierno, y no su esposo Néstor.
Es por eso que ahora el santacruceño sólo aparece al lado de la presidenta en segundo plano, y da discursos únicamente como "presidente del PJ".
Fuente: Diario Río Negro