La Naranja de Prensa repudia la censura y el ataque de los funcionarios del Ministerio de Trabajo, encabezados por su titular, Carlos Tomada, al periodista Ismael Bermúdez, del diario Clarín. La prohibición de participar en las conferencias de prensa de ese Ministerio son un ataque abierto a la libertad de trabajo y a la libertad de expresión.
Esto, una vez más, parte de funcionarios de un gobierno que se llena la boca con la “libertad de expresión” y golpea sistemáticamente contra cualquier manifestación de esa independencia. Así es que la censura en TelAm –donde no se puede escribir una sola línea crítica de la política oficial-; en radio Nacional –donde se desplaza a los periodistas que no comulgan con el gobierno- y en Canal 7 –donde hasta Víctor Hugo Morales fue despedido por abrir el micrófono a voces críticas-, son tan férreas como en los medios de las patronales más represivas del país.
Así es también que han sancionado a los compañeros de radio Nacional porque intentaron poner en pie un sindicato independiente, por defender el salario y los derechos de los compañeros contra la patronal-estado y contra la podrida burocracia del viejo sindicato.
Esta es, nuevamente, la verdadera cara de la ley de medios “nacional y popular”, cuyo eje no es ampliar la libertad de prensa y de expresión sino quitarle poder y negocios a unos monopolios para entregarlos a otros monopolios amigos del gobierno.
A una semana de producidos los hechos, el silencio de la UTPBA y FATPren les ha permitido tomar la iniciativa a organizaciones como AdEPA que agrupa a las mismas patronales que nos explotan, nos despiden y nos censuran al interior de cada monopolio periodístico.
Llamamos a los trabajadores de prensa, a sus comisiones internas y delegados, a pronunciarse y desarrollar una campaña contra la censura hacia Ismael Bermúdez y por la defensa incondicional a la libertad de trabajo y de expresión.