A horas de la media sanción en Diputados de la Ley de Servicios Audiovisuales, Eduardo Aliverti planteó su preocupación por lo que pueda pasar en el Senado: "Allí se concentra el mayor poder conservador de la Argentina y ya vimos lo que sucedió con la resolución 125; acá, en Buenos Aires, algunos ya están hablando de la "banelco" mediática en manos de "Clarín", aunque no sólo para torcer alguna voluntad, y también que el gobierno tiene alguna carta bajo la manga en ese sentido".
Destacó que luego de 26 años en democracia se haya derogado la ley de la dictadura, a la que definió como "la rémora más grande que en términos legislativos tenemos de aquella época, junto con la Ley de Entidades Financieras y la Ley de Contrato de Trabajo, que no ha sido derogadas".
"La sola posibilidad de estar ante la chance de derogar la ley de los milicos por seguramente una ley mejor, con todo lo perfectible que pueda ser, es una excelente noticia".
Aliverti resaltó el rol que pasarán a tener las cooperativas y organizaciones sin fines de lucro para operar licencias, particularmente de radios, porque la TV es un negocio más complejo. "Que se reduzca en más de un 50 por ciento el número de licencias que puede operar un mismo operario es una gran noticia".
También destacó que desaparece el Comfer, que se crean mecanismos de control parlamentario y más pluralidad de voces. Al respecto, dijo que del total de 360 licencias en el país, son 264 las que están en manos de "Clarín" y alrededor de 50 del grupo "Vila-Manzano".
No obstante, Eduardo Aliverti advirtió: "No debe perderse de vista de que la ley es sólo una herramienta, hay que ver cómo se opera, el tema de los testaferros... Pero como dicen los chinos, para dar un millón de pasos hay que dar el primero".
-¿Está complicada la situación en el Senado?
-Hay dos números que se sacan acá: un virtual empate a 34 y lo que dice el kirchnerismo, que está cerca de los 40 votos, sobre los 37 necesarios. Hay un fantasma revoloteando que es Julio Cobos, por eso se habla de que cuando la presidenta se vaya el domingo se quedará (fuera del país) un buen tramo para que sea Pampuro el que decida (en reemplazo de Cobos en la presidencia del Senado), pero no creo que esto sea así porque el debate en la Cámara alta estaría previsto para el 7 de octubre. Me parece que el hecho de que se haya borrado la posibilidad de que las telefónicas puedan acceder al control mediático, tanto del transporte de señal y de contenidos, dejó sin el 50 por ciento de los argumentos a quienes se oponían técnica o políticamente a la ley. Hubo muchas modificaciones de último momento, pero que no alteran la sustancia, y esto debería contribuir a que en el Senado, aquellos que pudieran tener alguna duda, voten a favor. Hay algo claro: si esto no sale antes del 10 de diciembre, no sale nunca más. Porque si hablamos de diciembre hablamos de marzo (por el receso veraniego) y en marzo comienza el inicio de la desembocadura en las presidenciales de 2011; quiero ver quién va a levantar la mano contra "Clarín" el año que viene.
"La madre de las batallas".
Eduardo Aliverti coincide con quienes afirman que con la Ley de Servicios Audiovisuales "es la madre de todas las batallas", porque "hablamos de un poder megacorporativo, porque ya no es técnicamente asequible hablar de multimedios, porque en el caso de "Vila-Manzano" estamos hablando de negocios petroleros o que "Clarín" tiene múltiples negocios; no estamos hablando sólo de periodismo y que no jodan más con lo de la libertad de expresión cuando tenemos que la producción de contenidos está centrada en Buenos Aires con el 83 por ciento de lo que se consume en el interior. Esta es una guerra de negocios.
-¿Qué le cambia al pueblo esta ley?
-En lo inmediato nada, en un futuro probable algunos aspectos ligados a la pluralidad de voces. Se puede decir que puede cambiar la vida de las conciencias cotidianas de la gente si eso ocurre y no sólo un conjunto de oligopolios que manejan la información y la opinión en la Argentina. También está la posibilidad de que se abran licencias para cooperativas, para ONGs, iglesias y sindicatos, lo que es una chance interesante para una mayor posibilidad de trabajo.
-¿En qué tenemos que estar atentos de ahora en más?
-En política, si la ley es sancionada, en principio no habría que esperar una merma, sí una acentuación de las acciones de los grupos mediáticos y el palo al que van a recurrir es la justicia. También creo que en definitiva va a regir aquello de que la fibra más sensible es el bolsillo, a que lo vaya a pasar dependerá del humor popular y cuánta bola le dará a esto. Si la marcha de la economía se estabiliza en los términos que conocemos, no hay posibilidades de que tengan éxito campañas periodísticas brutales contra el gobierno capaces de generar un arco que iría desde su debilitamiento hasta su fin antes de término, cosa que no veo por el momento como posible. Por el momento, el conjunto grueso social siente que esto es ajeno, nadie siente que esto le cambia la vida. Se nota que se nota como una batalla entre corporaciones de poder, pero me parece que hay algo que cambió en este debate, entre comillas, respecto de lo que fue el conflicto con el llamado campo. Por un cúmulo de factores, más la campaña mediática, quedó claro que grandes sectores de la clase media, que fijan el humor, compraron o hicieron propio el discurso de los poderosos. En este caso no hay un convencimiento esparcido que haya podido generar Clarín de que esté en juego la libertad de expresión.
Fuente: Diario La Arena