La fuente, que pidió el anonimato, dijo a la AFP que “ya son conocidos” los medios que supuestamente están incitando a insurreccionarse contra las actuales autoridades, en el poder tras el golpe de Estado del pasado 28 de junio, que depuso al presidente Manuel Zelaya.
El decreto está dirigido contra la radioemisora Globo y el canal 36 de televisión, ambos de Tegucigalpa, que son los dos medios claramente identificados con el Frente de Resistencia contra el Golpe de Estado y su principal demanda, la reinstalación de Zelaya en la presidencia.
No obstante, el gobernante depuesto, que se encuentra refugiado en la sede de Brasil, aseguró que el decreto es mucho más amplio y que restringe prácticamente todas las libertades públicas.
“Están restringiendo las libertades de movimiento, de expresión del pensamiento, de organización, de reunión, todas esas libertades que son una conquista de la humanidad a lo largo de los siglos” , señaló Zelaya, quien llamó al pueblo hondureño a no dejarse intimidar y defender sus derechos.
El decreto también autoriza al ejército y a la Policía a detener a toda persona sospechosa de realizar actividades proselitistas o que circule en la vía pública durante los horarios de toque de queda impuestos por el gobierno, según la versión del mandatario.
Estos toques de queda son declarados cada día por la Presidencia, especialmente para las horas de la noche y la madrugada.
Un supuesto texto del decreto publicado por Radio Globo en su sitio de Internet, pero cuya autenticidad no pudo ser confirmada por la AFP en fuentes oficiales, confirma los extremos del decreto denunciados por Zelaya.
Manuel Zelaya, en declaraciones a Radio Globo, indicó que ese decreto es "una barbaridad que indigna, que molesta", e hizo un llamado al Parlamento para que lo suspenda y que sus diputados "escuchen el diálogo" que él ha propuesto para resolver la crisis política que vive Honduras desde el 28 de junio pasado, día del golpe de Estado.
Al respecto, el canciller de facto, Carlos López, dijo hoy en una rueda de prensa que desconocía ese decreto y que en todo caso es un asunto que compete al Ministerio de Gobernación (Interior), cartera que no ha confirmado ni desmentido la información.
Zelaya también expresó que "hoy es el día para convocar, siempre de forma pacífica, a la resistencia" popular que exige su restitución en el poder, "para que se manifieste durante 24 horas continuas". Además, reiteró que desde su derrocamiento, del que mañana se cumplen tres meses, se han registrados más de 100 muertos, y que también se cuentan por "cientos" los torturados, presos y detenidos, aunque no precisó detalles, mientras que las autoridades del gobierno golpista solamente reconocen unos 10 muertos, dijo.
Zelaya defendió el derecho que tienen los hondureños a manifestarse, algo que señaló que es "un derecho ciudadano" al que no se puede renunciar.
"Ustedes, queridos hondureños, no pueden perder sus derechos por alguien que dé un golpe de Estado y que restringe las libertades públicas, que viola los derechos humanos, que asesina, que captura, que forma escuadrones de la muerte" , acotó Zelaya.
La crisis política hondureña se agravó a partir del lunes pasado, cuando Zelaya llegó por sorpresa a la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde permanece en calidad de huésped del país sudamericano con alrededor de unas 60 personas más, incluidos familiares y amigos.
En la foto: Dionisia Díaz "La Abuela de la Resistencia"
Relatoría de la OEA pide garantías para la libertad de expresión en Honduras
La Relatoría para la Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) ha llamado a las autoridades de facto de Honduras a garantizar que todos los medios de comunicación de ese país, no importando su línea editorial, puedan operar libremente, en referencia a la censura que sufren los medios contrarios al régimen.
Según la Relatoría, a partir del 21 de septiembre una serie de apagones han afectado de manera intermitente las transmisiones de Canal 36 y Radio Globo; la instancia recibió información de que un grupo de militares ocupó ese mismo día la central de energía eléctrica en Tegucigalpa desde donde controlan la transmisión de energía de la región donde está ubicada la capital hondureña.
Esdras Amado López, director de Canal 36, denunció que el 23 de septiembre el canal televisivo sufrió bloqueos en el satélite que retransmite su señal al resto del territorio hondureño.
Por otra parte Radio Progreso, en el departamento del Yoro, decidió no transmitir durante las horas del toque de queda decretadas por el gobierno de facto, por razones asociadas con la seguridad de sus miembros.
Un periodista de la radio señaló que el 22 y el 24 de septiembre se desplazaron contingentes militares hacia la radio, cuya línea editorial es contraria al régimen de facto, con el propósito de intimidar a los periodistas y operarios.
La Relatoría expresó en un comunicado su profunda preocupación por las restricciones a la libertad de expresión por métodos indirectos como los cortes de energía, las interferencias satelitales, las intimidaciones a partir de demostraciones desproporcionadas de fuerza pública o cualquier otra que busque impedir el funcionamiento libre de los medios de comunicación.
La instancia de la OEA exige respeto del derecho a la libertad de expresión y urge a las autoridades de facto a otorgar todas las garantías para que los medios y los periodistas puedan cumplir su labor de informar con libertad y en condiciones de seguridad.
Fuente: Cerigua