Telefónica espera el triple play
Reducirán de 24 a 12 la cantidad máxima de licencias que las empresas pueden tener en el país. De aplicarse, el grupo De Narváez-Vila- Manzano sería el más perjudicado, junto a Prisa, que es propietaria de Radio Continental. Admiten que “hay talibanes” dentro del Gobierno que quieren imponer proyectos con reglas duras para limitar a los multimedios.
Por Rodolfo Barros
El mercado de radio y televisión volvió a convulsionarse luego de que la presidenta Cristina Kirchner aseguró el domingo pasado frente al Congreso que enviará un proyecto para reformar la Ley de Radiodifusión. Seis días después del anuncio, el proyecto sigue siendo un misterio y ninguna fuente oficial se anima a mostrar los borradores, a pesar de que hace casi un año, el titular del ComFeR, Gabriel Mariotto y un grupo de asesores, entre otros, trabajan en la nueva reglamentación.
En los principales grupos de medios se teme que el oficialismo limite el número de licencias que pueden tener en el país, cierre la posibilidad de montar cadenas y le permitan a Telefónica y Telecom ofrecer servicios de radiodifusión, como televisión paga, para completar el paquete triple play, con telefonía e Internet.
Algunas versiones apuntan que la apertura a las empresas de telecomunicaciones se realizaría para compensar a Telefónica que vendería Telefé, presumiblemente, a algún empresario cercano al Gobierno.
Analistas del mercado aseguraron que para poder realizar esta operación, la nueva Ley de Radiodifusión debería avanzar sobre otras leyes y decretos.
Una de ellas es la Ley de Protección de Bienes Culturales, que prohíbe que las empresas de medios sean controladas por extranjeros, lo que golpea a las herederas de Entel, Telefónica y Telecom controladas por españoles e italianos.
Los acuerdos de inversiones recíprocas firmados a fines de los 90 con los EE.UU., Holanda y Francia, exceptúan a los accionistas de esos países de cumplir con la Ley.
También debería modificarse el marco regulatorio construido tras la privatización del monopolio estatal, que lo prohíbe expresamente.
Fuentes oficiales que participan de la redacción del proyecto aseguraron a Perfil que no avanzará sobre otros marcos regulatorios. Creen que sus fuerzas sólo podrán enfrentar los embates que los principales grupos de medios realizarán, según su óptica, sobre la nueva regulación. La negociación con Telefónica, piensan, correría por otros carriles.
Afirmaron que la principal reforma se basa en la baja de barrera de entrada a nuevos jugadores. Es por ello que aseguran que las licencias para operar radios y televisión serán distribuidas en partes iguales entre medios públicos, de organizaciones sin fines de lucro y comerciales.
“Esta decisión no afectará a las licencias ya entregadas. La distribución en partes iguales del espectro radioléctrico para poder operar, comenzará a funcionar con las licitaciones de nuevas licencias”, aclararon.
Admitieron que estudian reducir la cantidad máxima de licencias por titular de las actuales 24 a 12. De ser así, Clarín y Telefónica no serían obligadas a vender porque cuentan con 10 y 9 respectivamente.
El grupo Vila-Manzano-De Narváez tiene 19, Prisa (Radio Continental) también, y a Cadena 3 se le cuentan 13.
También admitieron que “hay talibanes” dentro del Gobierno que buscan imponer proyectos más duros.
Fuente: Diario Perfil