En sus redes, Déborah relató el episodio: "¡Después de 6 años no me renuevan en diputados TV! ¿Será porque soy 'militante' (no sé de qué) o 'tiro fruta', como dijeron las autoridades de la Cámara?
Me hubiera gustado que me avisen antes de que termine mi último programa, así me despedía de mis compañeros. Pero esperaron a que terminara y me mandaron un audio, esos que se borran, para decirme que no me renovaban.
En fin, el fin de una etapa. La pasé súper con mis compañeros. Seguiré haciendo periodismo en otros medios donde trabajo pero, sobre todo, en Tw, que es lo que más le 'molesta' a LLA". (¿Estará brindando el diputado de LLA que pidió mi renuncia después de una entrevista?)
Déborah profundizó sobre las circunstancias de su despido y el contexto de la señal:Déborah de Urieta aclaró que su desvinculación de Diputados TV no debe interpretarse como una crítica hacia sus compañeros de trabajo. "Quiero dejar en claro que los colegas que continúan en el canal son excelentes profesionales y personas. No es que les hayan renovado por obsecuentes ni nada parecido: son, por lejos, quienes más saben del Congreso", señaló. También afirmó comprender las reglas laborales del medio: "Puede no gustarles mi trabajo y pueden no renovarme el contrato. Eso lo entiendo. Lo que no entiendo son los modos".
En ese sentido, explicó que durante semanas consultó en reiteradas oportunidades si su contrato sería renovado, sin obtener respuestas. "Esperaron a que terminara mi participación en el programa y recién entonces, mediante un audio de WhatsApp de los que se borran, me dijeron que no me renovaban. Yo había preguntado una vez más antes de salir al aire porque quería saber si debía despedirme o no", relató. Pese a la situación, envió un mensaje de agradecimiento: "Un abrazo a mis colegas y al equipo de DTV. Aprendí mucho de todos".
La periodista también rechazó de plano las acusaciones que, según contó, circularon para justificar su exclusión. "No soy militante. Para ellos, criticar, cuestionar o alertar sobre presuntos casos de corrupción te convierte en militante, pero nunca me dicen de qué partido. No milito, nunca milité ni militaré en ningún partido. El insulto que usaron fue 'militante y tira fruta'", afirmó.
En una entrevista posterior, De Urieta relató un episodio ocurrido en el Congreso con el propio presidente de la Cámara de Diputados. "Me lo crucé en el Senado, lo saludé, y me dijo: ‘vos estás muy militante’. Le pregunté '¿militante de qué?', y me respondió 'como Fabián Waldman'", contó, en referencia al periodista que no fue renovado por Diputados TV el año anterior. "Yo le dije que no milito, que informo con datos. Él respondió ‘vos tirás fruta’. Para un periodista, eso es un insulto: significa que mentís, que operás o que no sabés".
Según su testimonio, tras ese cruce escribió al responsable de renovar o no los contratos del canal para contarle lo ocurrido, pero dejó de recibir respuestas. "El lunes siguiente me llegó el mensaje que se borra: después de seis años, no me renovaban", explicó. También sostuvo que uno de los motivos de incomodidad con su trabajo fue su actividad en redes sociales: "Todos los meses publico cuánto poder adquisitivo pierden los trabajadores del Congreso. La motosierra no pasa por los ñoquis, pasa por los trabajadores. En estos años se fue mucha gente muy formada, técnica, que labura muy bien. Eso, sinceramente, es lo que más me duele".
Finalmente, De Urieta aclaró que su salida de Diputados TV no implica que deje de cubrir la actividad parlamentaria. "Que no me hayan renovado en DTV no quiere decir que deje de ser periodista acreditada en el Congreso. Voy a seguir cubriendo para los otros medios en los que trabajo. Lo aclaro porque muchos pensaron que me iba del Congreso, y no es así", remarcó.
La desvinculación de la periodista se suma a una serie de tensiones entre la prensa acreditada y la actual gestión de la Cámara de Diputados, presidida por Martín Menem, en un contexto en el que el funcionamiento de los medios institucionales es objeto de denuncias por recortes, vaciamiento y presunto sesgo ideológico.
Déborah profundizó sobre las circunstancias de su despido y el contexto de la señal:Déborah de Urieta aclaró que su desvinculación de Diputados TV no debe interpretarse como una crítica hacia sus compañeros de trabajo. "Quiero dejar en claro que los colegas que continúan en el canal son excelentes profesionales y personas. No es que les hayan renovado por obsecuentes ni nada parecido: son, por lejos, quienes más saben del Congreso", señaló. También afirmó comprender las reglas laborales del medio: "Puede no gustarles mi trabajo y pueden no renovarme el contrato. Eso lo entiendo. Lo que no entiendo son los modos".
En ese sentido, explicó que durante semanas consultó en reiteradas oportunidades si su contrato sería renovado, sin obtener respuestas. "Esperaron a que terminara mi participación en el programa y recién entonces, mediante un audio de WhatsApp de los que se borran, me dijeron que no me renovaban. Yo había preguntado una vez más antes de salir al aire porque quería saber si debía despedirme o no", relató. Pese a la situación, envió un mensaje de agradecimiento: "Un abrazo a mis colegas y al equipo de DTV. Aprendí mucho de todos".
La periodista también rechazó de plano las acusaciones que, según contó, circularon para justificar su exclusión. "No soy militante. Para ellos, criticar, cuestionar o alertar sobre presuntos casos de corrupción te convierte en militante, pero nunca me dicen de qué partido. No milito, nunca milité ni militaré en ningún partido. El insulto que usaron fue 'militante y tira fruta'", afirmó.
En una entrevista posterior, De Urieta relató un episodio ocurrido en el Congreso con el propio presidente de la Cámara de Diputados. "Me lo crucé en el Senado, lo saludé, y me dijo: ‘vos estás muy militante’. Le pregunté '¿militante de qué?', y me respondió 'como Fabián Waldman'", contó, en referencia al periodista que no fue renovado por Diputados TV el año anterior. "Yo le dije que no milito, que informo con datos. Él respondió ‘vos tirás fruta’. Para un periodista, eso es un insulto: significa que mentís, que operás o que no sabés".
Según su testimonio, tras ese cruce escribió al responsable de renovar o no los contratos del canal para contarle lo ocurrido, pero dejó de recibir respuestas. "El lunes siguiente me llegó el mensaje que se borra: después de seis años, no me renovaban", explicó. También sostuvo que uno de los motivos de incomodidad con su trabajo fue su actividad en redes sociales: "Todos los meses publico cuánto poder adquisitivo pierden los trabajadores del Congreso. La motosierra no pasa por los ñoquis, pasa por los trabajadores. En estos años se fue mucha gente muy formada, técnica, que labura muy bien. Eso, sinceramente, es lo que más me duele".
Finalmente, De Urieta aclaró que su salida de Diputados TV no implica que deje de cubrir la actividad parlamentaria. "Que no me hayan renovado en DTV no quiere decir que deje de ser periodista acreditada en el Congreso. Voy a seguir cubriendo para los otros medios en los que trabajo. Lo aclaro porque muchos pensaron que me iba del Congreso, y no es así", remarcó.
La desvinculación de la periodista se suma a una serie de tensiones entre la prensa acreditada y la actual gestión de la Cámara de Diputados, presidida por Martín Menem, en un contexto en el que el funcionamiento de los medios institucionales es objeto de denuncias por recortes, vaciamiento y presunto sesgo ideológico.
Cambios y despidos en Diputados TV
El despido de Déborah de Urieta se enmarca en una serie de transformaciones y tensiones en la señal oficial de la Cámara Baja. Uno de los cambios más drásticos se produjo con la llegada de Jonatan Arioli como director de Diputados TV, bajo la conducción de Martín Menem. A fines de 2023 y principios de 2024, se decidió no renovar la mayoría de los contratos de trabajadores esenciales del canal —productores, maquilladores, camarógrafos y técnicos— cuyos vínculos habían vencido el 31 de diciembre, provocando una reducción considerable de personal y múltiples despidos.
Esa medida fue el paso previo a una reconfiguración del canal, que dejó de emitirse por televisión tradicional para transmitirse únicamente por YouTube, decisión que generó fuertes críticas por limitar el acceso ciudadano a la información parlamentaria. Según contamos en Señales, la transformación contravino la resolución de la Cámara de Diputados de 2006, que establecía que la señal debía transmitirse por aire, cable, Internet y otros medios para cubrir todo el país. El cierre de espacios tradicionales implicó una merma significativa en la disponibilidad del servicio para amplios sectores de la población.
En paralelo a los recortes de personal y al cambio en la forma de transmisión, la señal oficial se vio envuelta en episodios de censura e intervención editorial directa. Por ejemplo, durante una transmisión en vivo de una comisión clave, la periodista acreditada Laura Serra fue interrumpida y se le indicó por auricular que no continuara hablando de la Comisión de Juicio Político, interpretado por colegas y opositores como un intento de censura. Asimismo, otros periodistas, como Fabián Waldman, denunciaron presiones internas y decisiones de la dirección del canal que limitaron su continuidad laboral.
Reacciones de apoyo
El despido de Déborah generó un amplio respaldo en redes sociales y entre legisladores de distintos bloques:
Jairo Straccia, su compañero en "Buenas tardes China", escribió: "A algunos no les gustan las preguntas, las repreguntas, el periodismo profesional y menos la independencia. Aguante @ddeurieta". Y finalizó: "Cuando quieras hablamos al aire @MenemMartin".
Nicolás del Caño, legislador del Frente de Izquierda: "Toda nuestra solidaridad Déborah".
Christian Castillo, diputado de la Provincia de Buenos Aires: "Toda la solidaridad Déborah ante este despido discriminatorio".
Agustín Rossi, diputado peronista, planteó: "¿Dónde queda la libertad de expresión? En @DiputadosTV sacan del aire a una de las mejores periodistas parlamentarias que tiene el Congreso de la Nación. Solidaridad total con @ddeurieta ante esta decisión arbitraria".
Maxi Ferraro, ex diputado: "Banco a la corajuda de @ddeurieta. En tiempos en los que muchos callan, Déborah se anima a preguntar, repreguntar, publicar y pensar; y eso ya es un acto de valentía. Vaya mi reconocimiento a su calidad profesional y mi solidaridad".
Daniel Lipovetzky, ex diputado, escribió: "Toda mi solidaridad con @ddeurieta! Esto demuestra que no defienden ninguna libertad y menos la libertad de expresión. Por suerte la vamos a seguir teniendo en el Congreso como periodista parlamentaria".
Karina Banfi, diputada provincial: "Déborah, te vi crecer. Te consolidaste como periodista parlamentaria, una especialidad que te destaca. Defiendo con todo que sigas interpelando a la política del Parlamento".
Pablo Juliano, legislador radical: "La sacan con un audio que se borra, imagínate que van a hacer con la reforma laboral. Toda mi solidaridad y respeto".
Marcela Pagano, ex diputada libertaria: "Una periodista que incomoda (a todos). Otra periodista en una lista negra. Felicitaciones @ddeurieta, te echan porque no te pudieron comprar!"
El despido de Déborah refleja una tensión creciente entre la prensa acreditada y la actual gestión de Diputados TV, en un momento en que la independencia periodística y el acceso a la información se encuentran bajo presión. La profesional continuará ejerciendo el periodismo parlamentario tanto en medios tradicionales como en redes sociales, manteniendo activa su cobertura parlamentaria.

