Por: Mariano Confalonieri
José Sánchez Elía recibió la propuesta de asumir como el secretario de Comunicaciones del Gobierno de Mauricio Macri, acompañando al designado ministro del área, Oscar Aguad. Se trata del referente de telecomunicaciones de la Fundación Pensar, un empresario muy cercano al presidente electo, Mauricio Macri.
Sánchez Elía conoce a Macri desde la adolescencia. En paralelo, tejió una relación profesional y de amistad con el actual diputado nacional del PRO, Federico Pinedo. Juntos fueron interventores de la Comunicación Nacional de Comunicaciones (CNC) entre 1992 y 1993. Luego, compartieron el estudio de abogados. Sánchez Elía es un abogado especialista en telecomunicaciones. Como funcionario, tuvo a cargo la puesta en órbita del satélite Nahuelsat.
Además, este empresario es presidente y CEO de Tesacom, una firma que presta servicios de valor agregado sobre la red en América Latina. Y tiene emprendimientos personales de todo tipo. Es un empresario de bajo perfil con una familia tradicional. Es porteño. Fue del Comité Regulador de las Telecomunicaciones de la UIT en 1994. Fue gobernador de Intelsat, el organismo regulador de los satélites. Además, fue representante latinoamericano para Inmarsat.
Aunque algunas fuentes sugirieron que el empresario tenía vínculos con el Grupo Clarín tanto desde el entorno de Sánchez Elía como desde el Grupo lo negaron tajantemente. A Oscar Aguad recién lo conoció ahora a partir de la propuesta de ser su segundo.
Aguad tendrá a su cargo todo lo que tenga que ver con las comunicaciones, incluyendo las satelitales y también internet. A su vez, tendrá bajo su órbita a la Autoridad Federal de Comunicación Audiovisual (AFSCA) y a la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información (AFTIC). Por lo tanto, bajo su mando estará la aplicación de la Ley Audiovisual, y la entrega de licencias para canales de televisión y frecuencias de radio. Habrá que ver si para la asunción, el 10 de diciembre, el actual titular de la AFSCA, Martín Sabbatella, da un paso al costado o sigue.
Si el cargo no lo ocupa Sánchez Elía, seguramente será alguien del equipo técnico que él lidera en la Fundación Pensar, el think thank del macrismo. En caso de que se concrete su designación, renunciará a su cargo en Tesacom para no ingresar en incompatibilidades. El ofrecimiento a Sánchez Elía tiene que ver con la lógica del macrismo de atraer gente del mundo empresarial para ocupar cargos en la función pública.
Fuente: Diario Perfil