La Legislatura de Río Negro finalmente sancionó el jueves (08/05/14), la expropiación de los equipos de la radio LU19 de Cipolletti y del predio de la planta transmisora, en Fernández Oro.
Ahora, el gobernador Alberto Weretilneck deberá destinar los bienes expropiados a "Radio y Televisión Río Negro Sociedad del Estado", para la puesta en marcha de una nueva señal de radio.
El legislador Jorge Barragán (FpV) defendió el proyecto y dijo que "la acción que permitió que este gobierno tome la licencia para explotarla es una resolución del directorio del AFSCA (Autoridad Federal de Servicios de Comunicación) que fue aprobada por unanimidad".
El legislador oficialista además agregó que "el tiempo nos juzgará si vamos a usar la radio para las carreras políticas o para el beneficio de la comunidad por la que estamos luchando".
Por su parte, el legislador Leonardo Ballester expresó el rechazó de la Alianza Concertación al proyecto. Cuestionó el concepto de utilidad pública utilizado por el Gobierno para justificar la expropiación de la radio. Aseguró que la Legislatura comete un "grave error jurídico" con la aprobación de esta ley, con el que se está fijando un precedente peligroso" que traerá malas consecuencias para la Provincia". Ballester remarcó que con esta medida se está violando la Constitución ya que afecta los derechos de propiedad y de igualdad. Consideró que el proyecto nunca debió haber llegado al Parlamento por estar "flojo de papeles". También cuestionó los costos de la expropiación y la actuación del AFSCA.
Ricardo Ledo (UpRN) también expresó su oposición a la iniciativa del Ejecutivo "ya que la norma carece de sustento" y adujo que el Gobierno, para otros conflictos comparables "ha tomado decisiones alternativas", mientras que en este caso "toma el camino de la expropiación", cuando aún se carece de información "ni se sabe ni quién es el dueño del terreno" o "si es alquilado". También afirmó que esta norma "no garantiza la continuidad laboral de los trabajadores ni sus derechos laborales".
Los radicales Marta Milesi y Alejandro Betelú votaron a favor de la expropiación. La legisladora recordó que la radio (LU19) acompañó a la comunidad en buenos y malos momentos. Valoró que con la expropiación de la emisora, los vecinos podrán seguir informándose. Señaló que con esta medida "defendemos un patrimonio de los cipoleños y de los rionegrinos".
Por su parte la legisladora Ana Piccinini (FpV) manifestó el rechazo al proyecto y señaló su desacuerdo por no entender los motivos y por qué "las cosas se hacen necesariamente mal siendo desprolijos" cuando se hubiera podido "intercambiar ideas políticas que otorguen (al proyecto) un marco legal".
El presidente del bloque de la Alianza Concertación, Bautista Mendioroz, indicó: "Cómo no voy a coincidir con la necesidad de defender las fuentes laborales, el derecho a la información, a la expresión, a la comunicación", pero desestimó la aprobación de "la mayoría de los legisladores de su bloque, por "no compartir el instrumento (la norma) que estamos generando" ya que según su interpretación "no cumple con la Constitución".
El legislador Claudio Lueiro (PPR) también votó en contra de la iniciativa. Consideró que el Estado provincial debería intervenir en la situación laboral y económica del medio sin llegar a una expropiación. Planteó que si bien la situación laboral de los trabajadores es un elemento considerable, resulta insuficiente para justificar la expropiación. "Con esa lógica, nos encontraríamos con una cantidad innumerables de empresas en manos del Estado", indicó.
Finalmente, el presidente del bloque FpV, Pedro Pesatti, cerró el debate con una defensa del proyecto del Ejecutivo. Cuestionó los argumentos que utilizó la oposición para rechazar la iniciativa. En contraposición, destacó la función integradora que tiene el medio de comunicación en la región. Fundamentó que la expropiación de la radio garantizará el mantenimiento de una voz con fuerte identidad y aseguró no tener prejuicios sobre el servicio que representa la radiofonía pública.
Satisfacción de Prensa del Alto Valle por la expropiación definitiva de radio LU19
El Sindicato de Prensa del Alto Valle de Río Negro, adherido a FATPren, manifiesta su satisfacción por la expropiación de la radio cipoleña LU19 La Voz del Comahue y destaca que con esta medida se dará una solución de fondo a los problemas salariales de muchos trabajadores que no cobraban hace meses sus salarios, lo que llenaba de zozobra e inquietud a sus familias.
La estatización de la emisora, resuelta hoy por la Legislatura de Río Negro, constituye el final de una larga lucha de los compañeros por sus derechos. Las dificultades para cobrar sus sueldos datan de octubre del año pasado y, por tal motivo, primero hubo una paralización de actividades en diciembre y luego otra a partir de fines de enero. Esta última fue muy sacrificada y difícil puesto que se extendió por históricos 90 días.
En todos estos meses, los trabajadores, junto con el Sindicato de Prensa y otros gremios hermanos como AATraC, SUTEP y SAL, emprendieron diversas gestiones en busca de una solución. El ex propietario Hugo Benedetti se mostró incapaz de resolver el conflicto, pese a las numerosas instancias de diálogo que se instrumentaron, con participación incluso de la Secretaría de Trabajo de la provincia. La buena voluntad de los trabajadores chocó siempre contra la insolvencia demostrada por el empresario.
La decisión de dar una respuesta institucional desde la Autoridad Federal de Servicios de Medios Audiovisuales (AFSCA) y de la provincia no fue fruto de un día. Fueron numerosas las gestiones y tramitaciones que se efectuaron para que se encuentre una alternativa. No hubo improvisación. Los compañeros requerían una respuesta urgente y terminar con una situación que se volvía día a día insostenible.
AFSCA y el Estado nacional, consciente de la situación, vislumbraron una iniciativa que acabó por materializarse definitivamente hoy. La Legislatura de Río Negro, por mayoría, avaló la expropiación.
Desde el Sindicato de Prensa rechazamos la lamentable campaña impulsada por la línea editorial del diario Río Negro que ha buscado empañar este proceso. La serie de notas editorializadas que ha publicado en los últimos días ha buscado echar un manto de dudas sobre una iniciativa que brinda seguridades laborales y salariales a los compañeros y que seguramente devendrá en el rescate de una emisora que venía hace años cuesta abajo por malos manejos empresarios y por mezquinos intereses políticos.
Además, muchos de quienes ahora se rasgan las vestiduras por la expropiación poco o nada decían en los tiempos en que el Canal 10 provincial se había convertido prácticamente en una sucursal y repetidora de ARTEAR y Canal 13, del grupo Clarín, en una suerte de privatización encubierta que lejos estuvo de reflejar la realidad y los intereses de los rionegrinos.
Asimismo, llama la atención el hecho de que algunos de quienes se opusieron activa y ferozmente a la ley de Medios Audiovisuales, hasta el punto de su desprecio, ninguneo o satanización como encarnadora de todos los males, ahora recurran a su texto en busca de oponerse a la actual participación del Estado, acompañada en forma unánime por el directorio plural de AFSCA.
Para nuestro gremio, es motivo de contento que muchas familias cipoleñas que dependen de la radio tengan a partir de ahora un futuro más seguro y sin la angustia de tiempos en que el único horizonte parecía ser la desaparición de un medio histórico de Cipolletti.
Oscar Cares
Secretario General
Sindicato de Prensa del Alto Valle de Rio Negro
Adherido a FATPren
La estatización de la emisora, resuelta hoy por la Legislatura de Río Negro, constituye el final de una larga lucha de los compañeros por sus derechos. Las dificultades para cobrar sus sueldos datan de octubre del año pasado y, por tal motivo, primero hubo una paralización de actividades en diciembre y luego otra a partir de fines de enero. Esta última fue muy sacrificada y difícil puesto que se extendió por históricos 90 días.
En todos estos meses, los trabajadores, junto con el Sindicato de Prensa y otros gremios hermanos como AATraC, SUTEP y SAL, emprendieron diversas gestiones en busca de una solución. El ex propietario Hugo Benedetti se mostró incapaz de resolver el conflicto, pese a las numerosas instancias de diálogo que se instrumentaron, con participación incluso de la Secretaría de Trabajo de la provincia. La buena voluntad de los trabajadores chocó siempre contra la insolvencia demostrada por el empresario.
La decisión de dar una respuesta institucional desde la Autoridad Federal de Servicios de Medios Audiovisuales (AFSCA) y de la provincia no fue fruto de un día. Fueron numerosas las gestiones y tramitaciones que se efectuaron para que se encuentre una alternativa. No hubo improvisación. Los compañeros requerían una respuesta urgente y terminar con una situación que se volvía día a día insostenible.
AFSCA y el Estado nacional, consciente de la situación, vislumbraron una iniciativa que acabó por materializarse definitivamente hoy. La Legislatura de Río Negro, por mayoría, avaló la expropiación.
Desde el Sindicato de Prensa rechazamos la lamentable campaña impulsada por la línea editorial del diario Río Negro que ha buscado empañar este proceso. La serie de notas editorializadas que ha publicado en los últimos días ha buscado echar un manto de dudas sobre una iniciativa que brinda seguridades laborales y salariales a los compañeros y que seguramente devendrá en el rescate de una emisora que venía hace años cuesta abajo por malos manejos empresarios y por mezquinos intereses políticos.
Además, muchos de quienes ahora se rasgan las vestiduras por la expropiación poco o nada decían en los tiempos en que el Canal 10 provincial se había convertido prácticamente en una sucursal y repetidora de ARTEAR y Canal 13, del grupo Clarín, en una suerte de privatización encubierta que lejos estuvo de reflejar la realidad y los intereses de los rionegrinos.
Asimismo, llama la atención el hecho de que algunos de quienes se opusieron activa y ferozmente a la ley de Medios Audiovisuales, hasta el punto de su desprecio, ninguneo o satanización como encarnadora de todos los males, ahora recurran a su texto en busca de oponerse a la actual participación del Estado, acompañada en forma unánime por el directorio plural de AFSCA.
Para nuestro gremio, es motivo de contento que muchas familias cipoleñas que dependen de la radio tengan a partir de ahora un futuro más seguro y sin la angustia de tiempos en que el único horizonte parecía ser la desaparición de un medio histórico de Cipolletti.
Oscar Cares
Secretario General
Sindicato de Prensa del Alto Valle de Rio Negro
Adherido a FATPren
Fuente: Diario Río Negro, SPAVRN