Este fin de semana ‘El País’ está de fiesta y no sólo por su 38 aniversario. Este domingo Antonio Caño asumirá oficialmente como director del diario en sustitución de Javier Moreno en lo que se anticipa será una verdadera revolución en los contenidos y métodos de trabajo del diario de mayor difusión. Caño no cuenta con el apoyo de su redacción, y muchos temen que sus cambios terminen afectando la calidad y el prestigio del diario español.
El pasado 18 de febrero Antonio Caño era nombrado oficialmente como nuevo director de ‘El País’, pero con la particularidad de que asumiría sus funciones casi tres meses después. Era el tiempo que había pedido para completar su traslado desde Washington donde hasta ese momento era el corresponsal, para preparar su proyecto y para forzar los cambios necesarios para rodearse de un equipo de fieles.
Tres meses que además han sido muy duros porque los nombramientos y las noticias se fueron dando con cuentagotas generando angustia e incertidumbre en una redacción, que no saben que les esperará a contar del próximo lunes. Lo cierto es que Caño y su equipo asumirán este mismo domingo y para ello ya se tiene preparados los textos que se publicarán en 'El País' a propósito de su llegada que coincide con el 38 aniversario del diario.
Pero ¿qué aportará Caño? Las informaciones que llegan hasta prnoticias dan por descontado que tiene un perfil más de derechas y que sin contravenir los principios fundadores de ‘El País’ apostará por contenidos menos politizados y contrarios al Partido Popular. No se trataría de tratar de equipararse a 'ABC' o 'La Razón', pero si estar más cercano a 'El Mundo', que quizás trabaja con una ideología más neutra que le permite escribir y fiscalizar por igual de PSOE o de PP. Desconocemos el impacto que puede tener este giro en los lectores históricos del diario, aunque ya desde la redacción se desconfía de la apuesta.
El segundo objetivo de Caño es convertir al diario en una suerte de periódico de análisis, opinión y reportajes. Se quitará espacio al día a día y se apostará por temas de más largo aliento. Esto incluye un mayor refuerzo por la edición de Internet, que de la mano del nuevo responsable Bernando Marín, intentará dar el salto definitivo hacia el liderazgo que ostenta 'El Mundo'. Una apuesta que sin embargo contradice la anterior etapa en que Prisa intentó fusionar sus redacciones.
¿Y qué le espera a Caño? Una redacción muy dividida entre los más jóvenes que creen que traerá un soplo de aire fresco y los más antiguos que le conocen y creen que sus cambios pueden perjudicar la calidad del diario. La principal crítica es el nombramiento de su equipo con David Alandete y Eva Sáiz como número dos y tres, profesionales jóvenes y sin más experiencia que la corresponsalía de Washington y que en el caso de Saíz ni siquiera estaban contratados por la cabecera.
Les espera un duro trabajo por delante para ganarse a la redacción y para posteriormente elaborar su hoja de ruta. Y es que además les reciben unos datos irregulares que hablan de una recuperación publicitaria, pero un lento declive de ventas de la edición en papel. Los datos de la OJD de marzo indicaron que 'El País' registró 163.000 ejemplares de venta (19.000 menos) un 10% de retroceso en relación a marzo del año pasado. En difusión registraron 284.000 ejemplares, un 5,3% menos. En el caso de la publicidad El País’ ingresó 4,5 millones de euros en marzo, un crecimiento del 7,7% respecto del mismo mes del año anterior. En el acumulado siguen las cifras negativas con un retroceso del 2,7% en el primer trimestre.
Fuente: prnoticias