El grupo controlado por Daniel Vila y José Luis Manzano buscaría darle un nuevo impulso a la polémica causa iniciada contra Cablevisión en la Justicia Federal mendocina, luego del apartamiento de la jueza Olga Pura Arrabal -por sus vínculos con el Grupo UNO- y de la suspensión de los camaristas Otilio Romano y Julio Petra por el Consejo de la Magistratura de la Nación
Según viene informando Los Andes desde hace tres meses, Supercanal pretende reeditar una vieja causa contra Cablevisión, pese a que esta empresa no tiene operaciones en Mendoza.
La estrategia comenzó en el juzgado de Arrabal, pero hasta ahora la maniobra no pudo avanzar. El cable de Clarín denunció "forum shopping" e incompetencia del fuero federal local.
"Esta causa tiene como objetivo la desintegración de Cablevisión, habiéndose forzado la intervención del fuero federal mendocino dado que la empresa no tiene ningún tipo de actividad en Mendoza, no posee domicilio ahí y los supuestos hechos que sustentan el reclamo tampoco se refieren a esta provincia, sino a Salta y Córdoba", afirmaron fuentes de Cablevisión.
Desde Cablevisión sostienen que "se forzaron los hechos y se armó la causa en Mendoza para que intervenga Olga Pura Arrabal, de estrechos vínculos con Supercanal". Precisamente, dicha jueza fue apartada de la causa por la Cámara Federal de Mendoza por sus vínculos con los accionistas controlantes de Grupo Uno, entre ellos la relación personal y laboral de sus hijos con empresas de dicho grupo. Luego de ello, la causa quedó a cargo del juez Walter Bento.
Sin embargo, en los últimos días el Grupo Vila-Manzano estaría intentando reflotar la maniobra judicial a partir otro de sus referentes con fuertes contactos en el fuero federal local, el ex procurador general de la Nación, Nicolás Becerra.
Juez subrogante
Según trascendió, la idea sería intentar forzar la intervención de un nuevo magistrado con antecedentes favorables a los intereses de Supercanal. En los tribunales federales se menciona el nombre de un viejo conocido del Grupo UNO, el juez Alfredo Manuel Rodríguez, que si bien está jubilado podría eventualmente actuar como subrogante.
Rodríguez actuó como magistrado en causas sensibles para Vila-Manzano y el propio Becerra en las que dictó resoluciones favorables, como la llamada "guerra de los casinos", donde fue denunciado por los controlantes del hotel Sheraton; y también en el litigio por los terrenos de la Universidad Nacional de Cuyo.
"Él ya actuó en una causa del Grupo Uno ampliándoles una medida concedida por Arrabal. Aunque insostenible, no sería extraño que pretendieran hacerlo intervenir en este juicio", sostuvieron a este diario en Cablevisión.
Fuente: Diario Los Andes