El fotógrafo Ignacio Petunchi, y el periodista de C5N, Mauro Fulco, con las huellas en sus cuerpos de una jornada violenta |
El SPR, como integrante de la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa, recordó el jueves pasado que justamente la represión que tiene a Bullrich como la responsable de dar las órdenes a las fuerzas de seguridad que reprimen la protesta social en cada momento -ayer también lo fue el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta-, tiene además la pretensión de ofrecer Seguridad a lxs periodistas. Esa pretensión es vía el Protocolo General de Actuación para la Protección de la Actividad Periodística, presentado en Tucumán en septiembre de 2016.
El Protocolo para la Protección le dice a lxs trabajadores de prensa que recurran al ministerio de Seguridad ante las situaciones de riesgo que serán evaluadas por una comisión especial (Comisión de Riesgos) integrada por el Foro de Periodismo Argentino (FoPeA) y la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (AdEPA), socios del Ministerio de Seguridad en la propuesta. Ante tantxs trabajadorxs víctimas de la violencia de las fuerzas de seguridad es imprescindible recordar que ese Protocolo está vigente y que no es posible confiar en los mismos que reprimen.
El listado de víctimas que fue suministrado por el Sindicato de Prensa de Buenos Aires es la siguiente:
Antes que comenzara la represión en la plaza de los dos Congresos una trabajadora de prensa de la Agencia TelAm, Suyai Serrano, que era parte de la columna del SiPreBA fue atropellada por una moto policial y debió ser retirada en camilla.
Las balas de goma disparadas por las fuerzas represivas en todo el microcentro tuvieron como víctimas a: Juan Pablo Barrientos, fotógrafo de la revista Cítrica, que recibió más de veinte balazos de goma. Agustín Gulman, periodista del portal Big Bang News, recibió cinco balazos a quemarropa. Cuatro reporteros gráficos de Página/12 terminaron heridos: Adrián Pérez recibió tres balazos de goma, Gonzalo Martínez con balazos en un brazo y un tobillo, Bernardino Ávila recibió un golpe en la cabeza por el que debieron suturarlo con cinco puntos y Leandro Teysseire, que ya había sido baleado el jueves pasado, terminó con un profundo corte en la cara.
A Silvina Rouvier, camarógrafa del portal La García, la policía le voló un diente de un perdigonazo. También fueron heridos por balas de goma de policías y gendarmes la fotógrafa Bárbara Leiva, del portal Notas; Ignacio Petunchi, fotógrafo del diario Ámbito Financiero; Matías Castelli, cronista de Telefé; Mariano Rinaldi, de Radio Latina; Julio Rodríguez, de Radio 10, y Nacho Levy, de La Garganta Poderosa. Lucas Molinari, integrante de Radio Gráfica, recibió un balazo de goma sobre un ojo. Sebastián Hacher, editor de Cosecha Roja, fue herido en la cabeza. También resultaron heridas Ayelén Rodríguez, fotoperiodista colaboradora de Marcha Noticias y Stephanie Malen Zambrano, fotoperiodista del colectivo de fotógrafos Fuenteovejuna recibió 6 balazos de goma.
Otros trabajadores de prensa fueron víctimas de cobardes agresiones de grupos marginales. Julio Bazán, del canal TN, fue perseguido y sufrió una patada por la espalda cuando intentaba refugiarse en una estación de subte. También sufrieron ataques los periodistas de TN/Canal 13 Martín González, Sebastián Domenech y Cecilia Insigna. Recibieron golpes el camarógrafo Matías Carrizo, de Crónica TV, los periodistas José Parejo, Romina Mohr y Diego Reyes, de Canal 9, y Mauro Fulco, de C5N. Por otro lado, sufrieron roturas y ataques los móviles de TN/Canal 13 y de la TV Pública.
La represión se complementó con persecuciones y detenciones generalizadas, que no discriminaron a los trabajadores de medios de comunicación. Se trata de los compañeros Diego Murrone, Francisco Scarzella, Damián Cejas, Juan Pedro Ovalle, Lorena Sfeir y Luna Lillo, todos de FM La Patriada; de Gustavo Figueredo, trabajador gráfico del Diario Popular, y un compañero de la Cooperativa Gráfica del Pueblo.