Uno de los proyectiles arrojados a la vivienda |
Según informa Mediamza.com, la primera vez, Coria había hablado en la radio de “amnesia policial”, dado que muy frecuentemente los testigos ex policías, “no recuerdan” nada de lo que se les pregunta. Un hombre se acercó en dos oportunidades a la casa de la mujer y habló con su hijo de 12 años, indagándolo por el paradero de la periodista y los horarios que tiene. También le pidió el número de celular pero el muchacho no accedió a dárselo. Le dijo que se llamaba Marcos, que el ese fin de semana había salido a bailar a Malargüe con su madre, cosa que su hijo sabía que era falso.
Al manifestarle que estaba trabajando, el hombre decidió esperarla en un auto cerca de una hora, aunque cuando llegó Coria, ya se había ido. Era un hombre de unos 50 años, bajo, de cabello corto canoso, de ojos claros.
Ayer cerca de las 19, Patricia estaba en la radio trabajando cuando la llamó su hijo para contarle que sintió un ruido muy grande en la casa y cuando fue al baño encontró el suelo repleto de vidrios rotos de una ventana que fue fuertemente golpeada por una piedra. “Afortunadamente en el baño no había nadie, porque de haber habido alguien se hubiera lastimado”, manifiesta la periodista.
El patio de la casa de esta periodista donde da la ventana del baño que fue rota, se divide por un tapial no muy alto de otra propiedad y es muy factible que el objeto contundente haya partido desde ese lugar. Lo curioso es que esa propiedad es del fallecido médico de policía Cristóbal Ruiz Pozo, quien estuviera imputado en la causa por delitos de lesa humanidad en San Rafael. “Yo creo que esto tiene que ver con la cobertura del juicio”, dijo Coria.
Fuente: Mediamza.com