Para nuestr@s pibes, en el día de los niños y las niñas
Les escribimos esta cartita por dos razones: la primera, porque ustedes son lo más importante para todos los grandes que los rodeamos, y la segunda, porque creemos que han aguantado un montonazo de cosas que son muuuuuuy aburridas.
¿Les recordamos qué cosas aburridas? Actos donde habla mucha gente y ustedes no entienden todo lo que decimos, reuniones donde los grandes no paramos de tomar mate y de reírnos sin chistes, pegatinas, idas a la plaza a entregar unos papelitos a todo el mundo, días enteros de las mamás, las abuelas, los papás, los tíos y tías, etc. fuera de la casa haciendo vaya a saber qué cosa, y muchas otras cosas aburridas que seguro nos olvidamos.
Pero les escribimos esta carta, en primer lugar, porque son ustedes lo más importante para todas y todos nosotros, los grandes (los plomos), y no les mentimos ni un poquito. Todo lo que hacemos, aunque a veces es muuuuy aburrido para ustedes, es para cambiar las cosas… y no para cambiar las cosas de lugar como una mesa, una silla, sino para cambiar el lugar donde vivimos. Porque todas y todos los grandes que los rodeamos queremos que las chicas y los chicos tengan siempre que comer, tengan siempre un cuaderno y un lápiz para estudiar, tengan muchas ganas de jugar y de reírse, para que todas y todos los grandes tengamos trabajo y también andemos contentos por la vida.
¿Vieron que nosotros, los grandes, andamos todo el día preparando copas de leche, comedores, salitas de salud, apoyo escolar y todo eso? Es para que las chicas y los chicos sigan siendo fuertes y hermosos como son ahora, para que no quede ninguna nena ni ningún nene sin tomar la leche y les crezcan fuertes los músculos.
Y para que todo sea mejor y cada vez seamos más felices tenemos que ser cada vez más y por eso le andamos contando a todo el barrio qué es lo que trabajamos y queremos que todo el mundo lo conozca y por eso hacemos, además, esas cosas aburridas que les decíamos.
Cuando vamos a un acto donde muchos hablan, es para que toda la gente sepa qué pensamos y qué hacemos. Lo mismo cuando entregamos los papeles en las plazas o cuando pegamos un afiche, o cuando nos reímos y tomamos mate.
Pero les escribimos esta carta en segundo lugar, porque se aguantaron todas esas cosas aburridas y por eso tenemos que felicitar a todas las chicas y a todos los chicos porque mientras hablábamos los grandes, ustedes jugaban y cantaban y hacían lo que les gusta. Porque en las plazas entregaban los papelitos y le sonreían a la gente que pasaba, con esa sonrisa grande que ustedes tienen. Porque hicieron todas las travesuras que pudieron mientras nosotros, los grandes, tomábamos mate y charlábamos.
La verdad, les decimos que sentimos un orgullo enorme de que ustedes sean las chicas y los chicos del barrio y no sólo por cómo aguantan el aburrimiento y nuestros días largos de trabajo, sino porque ustedes construyen junto a nosotros, porque a todo preguntan por qué y porque son buenas personas. Sentimos un orgullo enorme de lo hermosos que son (por dentro y por fuera).
Ese orgullo lo sentimos todos los grandes del barrio y eso es lo que nos hace andar el día entero pensando cómo mejorar la vida, cómo hacer que sea tan hermosa como todos y todas ustedes.
Sus caras hermosas son iguales al futuro que soñamos. Por eso vamos a seguir siempre trabajando, aunque muchas veces se aburran, junto a todos los chicos y las chicas del barrio, que seguirán creciendo como hombres y mujeres dignos. Los queremos mucho.
Programa de Fortalecimiento de Derechos y Participación de las Mujeres “Juana Azurduy”
Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales - Presidencia de la Nación