
Horacio Verbitsky nació en la Argentina en 1942 y ejerce el periodismo desde 1960. Desde 1987 escribe su columna política semanal para el diario PáginaI12 de Buenos Aires. Ha publicado los libros "Prensa y poder en el Perú", "La última batalla de la Tercera Guerra Mundial", "Ezeiza", "Rodolfo Walsh y la prensa clandestina", "La posguerra sucia", "Civiles y militares, memoria secreta de la transición", "Medio siglo de proclamas militares", "La educación presidencial", "Robo para la Corona", "Hacer la Corte", "El Vuelo", "Un mundo sin Periodistas" y en el último lustro se dedicó a escribir sobre la historia política de la Iglesia Católica, de la cual publicó cuatro volúmenes numerados.
La Latin American Studies Association (LASA), que reúne a los más destacados académicos del mundo especializados en la región, le otorgó su premio 1995/96 a los medios de comunicación, en reconocimiento "a la mejor cobertura periodística de largo plazo en América Latina", por "su comportamiento durante el régimen militar de 1976 a 1983, cuando jugó un rol absolutamente esencial en la investigación de las violaciones a los derechos humanos por fuerzas militares y paramilitares y en el subsecuente juzgamiento de los responsables" y por "sus investigaciones acerca de la corrupción en el Estado argentino y el copamiento de la Corte Suprema de Justicia por el gobierno del presidente Menem".
Verbitsky es actualmente presidente del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y fue maestro de la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano que dirige Gabriel García Márquez. Integra la Junta Directiva de Human Rights Watch/Americas. Ha publicado colaboraciones en los diarios "El País" de España, "The New York Times" y "The Wall Street Journal" de los Estados Unidos. En 1997, una encuesta de la Fundación Konrad Adenauer de Alemania y el Centro de Estudios Unión para una Nueva Mayoría lo señaló como el periodista ideal para sus colegas.
Fuente: Sindicato de Prensa Rosario