Publicó Pablo Sirven el La Nación:
El miércoles último a la noche, al mismo tiempo que en 6, 7,8 el periodista Enrique Vázquez execraba a Chiche Gelblung, en Twitter circulaba intensamente una foto donde se veía a aquél estrechando la mano del dictador Augusto Pinochet, entrevista que hizo para la revista Somos.
El dato no es menor porque esa publicación era vecina, pared de por medio, de Gente , la revista que dirigía Gelblung. Los que entonces éramos principiantes en el periodismo nos acostumbramos bien pronto a las repetidas bromas pesadas que solían gastarse amistosamente, y entre carcajadas, ambos jefes.
Las imágenes que venían del pasado -la foto con Pinochet, los recuerdos de quienes estuvimos allí y los vimos con nuestros propios ojos- sirvieron para completar el mensaje con flagrantes omisiones de Vázquez. Podría, incluso, haber sido el doble de grave al juzgar a Gelblung, si lo creía sinceramente, pero al menos en el contexto de su propia e imprescindible autocrítica por haber sido jerárquico de una publicación que proclamaba a la dictadura como una panacea. Hoy ya es imposible tapar el cielo con las manos. Por más que Vázquez se aludió difusamente a sí mismo como trabajando en aquella época en "medios comerciales", faltó lo que en las redes sociales se decía a gritos: en Somos.
Le respondió Samuel "Chiche" Gelblung en su sitio Diario Veloz:
"Enrique Vázquez sos una basura y un miserable"
El director de DiarioVeloz.com y Cienalpoder.com, Samuel "Chiche" Gelblung se refirió a la participación de Enrique Vázquez en "678"
Sobre tu relativa y limitada calidad periodística no abro juicio porque no corresponde en esta ocasión. Leyendo hoy la columna de Pablo Sirven en "La Nación espectáculos" me enteré que sumaste tu voz al infame programa "678" y te atreviste a hablar de mí en ese foro decadente cínico y repugnante.
Lamento que en ese largo divagar sobre mí no hayas contado que fui yo quien te sacó de la miseria cuando te conseguí trabajo en Canal 13, que por ese entonces estaba al mando de la Armada, y a quien solo recurrí a pedir trabajo para vos que estabas desesperado al borde del suicidio. Jamás les pedí a los militares nada para mí y conseguiste trabajo, por suerte, y hasta la plata te alcanzaba para regalarme una lapicera Dupont, que si no hubiera sido por el asalto que sufrí en mi casa, todavía la tendría como gratitud por mi gesto hacia vos.
También protegí tu salud, basura, porque en víspera de la Nochebuena hubieras ingerido comida en mal estado porque no tenías heladera y yo te regale una. Conmovida por tu situación, mi mujer te extendió una invitación para que pasaras la noche de navidad con nosotros y por ese entonces, no hiciste ningún comentario sobre el supuesto compromiso que yo tenía con la dictadura.
Tampoco quiero olvidar que en algún momento tuve que defenderte ante el directorio de la editorial Atlántida porque tus jefes te querían echar por haber fraguado una nota en Cuba de la que hoy todavía muchos tienen dudas, pero te defendí más por lo humano que por lo profesional, no me gusta que la gente se quede en bolas, sin laburo.
Ya demostraste tu bajeza moral, cuando después de haberme tenido que irme de la Argentina por una bomba que pusieron en mi casa y que podía haber matado a toda mi familia y a la custodia que tenía en ese entonces, escribiste en "Humor" una columna que decía que yo me había ido de este país para no enfrentar la llegada de un gobierno democrático. Tu propio jefe Andrés Cascioli, que en paz descanse, me llamó a Europa para pedirme disculpas por haber publicado esa basura sabiendo que fui el único periodista durante un gobierno militar, se animo a repudiar la clausura de la revista "Humor" en donde vos volcabas tu resentimiento.
Tu imbecilidad y tu torpeza periodística quedaron demostrados cuando "te comiste" un "reportaje telefónico" al dictador de Uganda, Idi Amin Dada, cuya voz hice yo desde un teléfono a dos metros de donde vos estabas hablando. Le comunicaste tu éxito a tu jefe Aníbal Vigil y hasta le dijiste que te había invitado a Uganda con todo pago. El mismo Aníbal Vigil, que según vos fue portavoz de la dictadura a través de las publicaciones de la editorial Atlántida.
Tengo más, pero no vale la pena. Fuiste un pobre tipo, sos un pobre tipo y por lo visto querés persistir en seguir así por el resto de tu vida. Que tengas mucha suerte. Para mi vas a seguir siendo siempre una total basura.
Samuel "Chiche" Gelblung, Director de DiarioVeloz.com
Una yapa: Bayer sobre Vázquéz