En Señales, hace unos años comenzamos a contar esta historia, tenía que ver con algo que inicialmente lo publicó el colega José Maggi en el diario RosarioI12, donde daba cuenta de que una niña de 13 años había sido mamá y su bebé había sido dado en adopción de manera irregular. La Corte Interamericana de Derechos Humanos -en su 153 periodo de sesiones-, debatió la responsabilidad del Estado argentino en el caso María, como se lo denomina, y se investigó el proceso administrativo y judicial de guarda y adopción del niño identificado como Mariano, que fue entregado en contra de la voluntad de su madre, que en ese momento tenía 13 años.
En los principales puntos, la Corte sentenció: "Se han violado los derechos de María, cuando era niña. Se violaron las garantías judiciales en perjuicio de María y Mariano (su hijo). También la Corte pide investigar las responsabilidades de los funcionarios intervinientes: tanto del personal de maternidad como en el ámbito judicial, se encaminaron hacia un proceso de adoptabilidad, a pesar de que tal proceso no podía iniciarse sin el consentimiento claro e informado de los padres posterior al nacimiento del niño. Los funcionarios a cargo de la adopción y guarda de niños y niñas deberán hacer cursos para evitar nuevos casos como el que hoy se juzga. En razón de las violaciones declaradas en la Sentencia, la Corte ordenó que las autoridades competentes en el ámbito judicial interno determinen la guarda y la situación jurídica de Mariano en un plazo máximo de un año y que se mantenga el proceso de vinculación entre María y Mariano; así como otras medidas de reparación.
En las Señales dialogamos con la doctora Carmen Maidagán, que está a cargo de este caso desde el año 2015.
¿Qué conclusión sacan ustedes sobre este fallo?
Bueno, en realidad estamos contentas porque al fin se reconoció todas las violaciones de los derechos de María y de Mariano a estar juntos, a crearse juntos. El derecho de María como niña, que nunca fue respetado, se estableció las violaciones que ella sufrió desde el mismo momento que fue atendida en la maternidad Martín, de cómo se la forzó a firmar ese papel sin tener en cuenta su verdadera voluntad, como nunca se la escuchó. Entonces, entendemos que en eso, cuando la Corte dice que la sentencia en sí misma es reparadora, eso es cierto porque pensar que fueron años donde nunca obtuvimos una respuesta de reconocimiento en los tribunales internos donde nadie analiza, como ahora sí analiza la Corte Interamericana, la inexistencia de consentimiento válido, que la legislación no autoriza de ninguna manera la adopción de niños por nacer. Lo que nos parece importante, no solo para el caso de María, sino para tantas chicas que pueden ser obligadas o forzadas en una situación de vulnerabilidad a suscribir un consentimiento que la Corte claramente determina que no tiene validez legal. La importancia de que la gente, para tomar decisiones de este tipo, esté debidamente asesorada. La garantía de que las personas puedan tener un espacio de asesoramiento antes de firmar esto, establecido por una psicóloga o por cualquier persona, cuando no llega a medir las consecuencias de ello. En ese sentido, entendemos que es reparador el reconocimiento, si bien esperábamos que fuera más clara, a diferencia de lo que había pasado en Fornerón, con el tema de la restitución. Pero bueno, ahora se abre un proceso que principalmente va a implicar que de una vez por todas Mariano sepa quién es María, cosa que hoy no sabe.
Usted nos había dicho el año pasado que la vinculación de Mariano con su madre era muy dificultosa, que esporádicamente lo dejaban ver ¿eso continúa?
Sí, eso continúa, porque además ahora el expediente está en la Corte Suprema de la Nación, pero sí, el último esquema, después de la pandemia, es que ella va una hora a la casa de esta gente. Y si bien ella intenta invitarlo a ir a la plaza o demás, siempre hay una actitud de decir no, de parte de la cuidadora. En este sentido, María siempre es muy cuidadosa de no hacer ni decir nada que pueda incomodar o poner al niño en una situación dolorosa. Entonces, a lo mejor no discute estas cuestiones por ahora, ahí en el ámbito de la casa, pero bueno, son las cuestiones que ahora tendremos que ir trabajando, porque también lo que ordena la Corte es que esa vinculación tiene que reforzarse, para que además este niño conozca su identidad, y entonces después de ahí se verá cómo se termina resolviendo. Pero lo importante es que este niño pueda tener una mejor vinculación con su madre y pueda conocer a toda su familia de origen, porque acá, de las cosas más espantosas que han hecho los tribunales de la provincia, es no permitir avanzar en la vinculación de este niño con su familia de origen. Sólo conoce a su mamá, sin saber que es su mamá.
Ahora también la Corte pide investigar las responsabilidades de los funcionarios intervinientes. Ahí entra también a jugar el personal de la Maternidad Martín y otros...
El personal de la Maternidad Martín, el R.U.A.G.A (Registro Unico de Aspirantes con Fines Adoptivos), la Defensora de Niños, Niñas y Adolescentes, que es quien armó todo esto, los jueces. Hay una orden de investigar penalmente a todos los intervinientes. La denuncia penal en principio ya está interpuesta, la interpuso la Ministra de Gobierno, Celia Arena, el año pasado. Se la presentó en su momento directamente al Fiscal General. Así que ahora esperamos también que el actual Fiscal General motorice y acelere esa investigación. Y nosotros trataremos de reunirnos para seguir reclamando lo que deberían hacer por sí solos. Pero bueno, si es necesario, ahí estaremos.
¿Esto lo va a investigar la justicia de la provincia?
Sí, es lo que corresponde.
¿Y tiene un año como plazo máximo para resolver la guarda y la situación jurídica de Mariano?
Exactamente, le fijo un plazo máximo de un año. Bueno. Reconociendo que el niño está en una situación de total inestabilidad jurídica. O sea, vive con quien no tiene ningún vínculo jurídico y no se le permite a la madre tomar las decisiones sobre el niño. Todas estas cuestiones tendrán que reverse y después ir analizando. Que en ese sentido hay que dejar clara una cuestión, si hay algo que Maria no quiere es que el niño sufra. Pero sí quiere que sepa que es la madre. Quiere que sepa todo lo que peleó por él. Sí quiere que pueda tener vínculo con toda su familia. Además, lo que el niño tiene derecho.
Lo que pide también la Corte es que tengan personal de asistencia en lo psicológico, para que puedan acompañar a ambos en este proceso de reencuentro
Así es. Y esas cuestiones son importantes. Porque desgraciadamente, a nivel general, uno lo que ve es que todas esas cuestiones que surgen de la legislación, de hecho en la audiencia en la Corte, cuando se le planteó al Estado qué herramientas existían desde lo legal y demás y el Estado Nacional, habló de un montón de programas. Nosotros lo que planteamos es que el problema no era tanto de la legislación, sino de la implementación. Porque en general vemos eso. O sea, la Dirección de Niñez puede ordenar o aconsejar que alguien haga terapia. Pero después va al centro de salud y no hay psicólogos. O ya se atiende la hermana y no hay dos psicólogos. Entonces no puede atender al otro. Con lo cual, los derechos se desvirtúan. Porque para poder ejercerlos, tienen que estar las herramientas para hacerlo. Entonces, me parece que ese es un punto importante de decir, quién va a trabajar y de qué manera. No se puede trabajar estas situaciones diciendo hoy por tal motivo el centro de salud está cerrado. Así que no vas a tener atención psicológica. Porque todos los que hemos hecho algún momento terapia, sabemos que no se puede discontinuar de esa manera. Entonces, todo eso tiene que estar garantizado en debida forma.