Mientras condenan a Lanata por el “uso” de las comunidades indígenas, ni 678, ni la TV Pública, ni Radio Nacional, ni TelAm, ni ninguno de los multimedios privados financiados con fondos públicos, permiten una sola visión crítica del drama de los pueblos indígenas.
Tenemos impedido el uso de esos “medios públicos”, pero además con la pretensión de que debemos fidelidad a la causa “nacional y popular” que instalo en nuestros territorios a Chevron, la megamineria y Monsanto en condiciones indignas para quien pretenda defender principios como “soberanía nacional”.
Los wichi han tenido las últimas dos semanas más minutos en TV que en toda la década “ganada”. Sin embargo Lanata habla de los “indios” y sus “tierras de mierda” como se hablaba de la enfermos terminales décadas atrás.
Insfran, una rata inhumana protegido y promocionado por la Presidenta, empuja a propios Wichi a que enfrenten a propios hermanos para limpiar su imagen, a esta altura, ya indefendible.
Al igual que valiosos dirigentes indígenas que se ocultan en el silencio, mientras mueren dirigentes luchadores en las rutas, (particularmente del NEA). Ocultos tras un triste cargo público o un subsidio temporal. O siendo parte de estructuras financiada por el gobierno a cambio de subordinación o firmando posiciones de doctrinas ajenas a sus pueblos y cosmovisiones.
Confederación Mapuche de Neuquén