En una portada a cinco columnas en su edición impresa, el diario público ecuatoriano El Telégrafo denunció este lunes la persecución y amenaza por parte de dos grupos económicos: los hermanos Isaías (ex propietarios del Filanbanco) y de los representantes del banco Pichincha
En dialogó con la agencia Andes, Orlando Pérez, director de El Telégrafo, habló de “una persecución clara y hostil” contra el medio.
Las amenazas de juicios se han presentado por medio de varias cartas, pedidos de información, mensajes de texto y de voz en los celulares, en las redes sociales con “trolls”, solicitudes para que se revele quién escribe y organiza el trabajo informativo, “cartas al director” desde seudónimos y anónimos, etc.
Según el medio público, las amenazas no han parado desde que, “a diferencia de otros medios que silencian el pasado”, El Telégrafo ha publicado reportajes e investigaciones sobre los casos en los que están involucrados personeros, dueños o accionistas de bancos.
El diario denuncia que la semana pasada fueron los hermanos Isaías, a través de su buró de abogados y hace un mes, quienes representan al Banco Pichincha. “Ahora ellos se acogen a la Ley de Comunicación y se declaran víctimas de linchamiento mediático. ¿Con el silencio quieren ocultar los problemas, juicios, conflictos y hasta disputas que afectan solo a sus clientes?”, se cuestiona en el editorial publicado en la portada del medio.
Orlando Pérez dijo a Andes que ante las amenazas “todo el diario El Telégrafo va a responder por eso, nadie en particular”.
Pérez indicó que las amenazas empezaron desde que El Telégrafo publicó los juicios que tiene el banco Pichincha (propiedad de Fidel Egas), por la simulación de la venta del canal Teleamazonas, después cuando el presidente Rafael Correa explicó cómo adquirió Fidel Egas el canal –antigua propiedad de Eduardo Granda Garcés-.
“Parece que eso les molesta, parece que es preferible mantener el silencio. Algunos banqueros piensan que es mejor lo que hacen sus medios aliados: no hablar de aquellos temas en los que ellos como banqueros, sus negocios, sus instituciones, sus accionistas tienen algún tipo de conflicto con otra personas u otra institución”, mencionó Orlando Pérez.
En el caso de los Isaías, el director de diario El Telégrafo dijo que después de haber dado espacio al abogado de los ex banqueros (prófugos de la justicia ecuatoriana, actualmente radicados en Miami Ndlr) este demanda que el medio informe quiénes están detrás, qué institución o autoridad de Gobierno ordenó hacer esa investigación.
Pérez dice que esto “es insultante porque si fuese así estaríamos hablando de otro tipo de periodismo que es el que se hace en otros medios”.
Orlando Pérez reafirmó que El Telégrafo hace periodismo público, no se debe a ningún poder político ni económico, no reciben auspicios ni publicidad para sostenerse lo que no los convierte en siervos ni esclavos de las políticas de la empresa privada.
“Somos un periodismo profesional, trabajamos en función del interés público y –una cosa fundamental- nosotros sí vamos a revelar aquellas irregularidades que se han sepultado en el pasado gracias a medios de comunicación privados y comerciales que tratan que no recuperemos la memoria de lo que ocurrió con la crisis financiera, del costo político, social, económico y cultural que significó esa crisis para los ecuatorianos. Jamás haremos venia a ningún banquero ni tampoco a ningún poderoso”, concluyó.
Fuente: Diario El Telégrafo