Nosotras, Periodistas Argentinas, exigimos que las empresas de comunicación cumplan con el marco legal vigente que tipifica y sanciona el maltrato laboral y pedimos que el Poder Ejecutivo reglamente en forma urgente la Ley de Equidad en Medios, que es la herramienta que garantiza la erradicación de estas conductas.
En estos días se han conocido testimonios de colegas que dan cuenta de lo que venimos denunciando desde hace varios años, a través de las encuestas que realizamos entre nuestras más de 200 integrantes. Insultos, humillaciones, acosos, negación y ninguneo de la palabra, degradación o pérdida de puestos de trabajo al regresar de la licencia por maternidad constituyen, entre otras conductas inadmisibles, prácticas que forman parte del paradigma de producción de noticieros y programas de tevé, diarios, radios, portales web a lo largo y ancho de nuestro país, tanto en medios públicos como privados.
Considerar que estas conductas, explícitamente sancionadas por la ley vigente, buscan la "exigencia profesional" en pos de una excelencia informativa es la peor injusticia que estamos denunciando: sin dignidad no hay calidad. Desde julio de 2021 rige en nuestro país la ley que consagra "el derecho de toda persona o un ambiente de trabajo libre de violencia y acoso, incluidos la violencia y el acoso por razón de género". Determina, además, que tales comportamientos "pueden constituir uno violación o un abuso de los derechos humanos".
Ese mismo mes se sancionó la Ley de Equidad en Medios para garantizar el cumplimiento del marco legal vigente para eliminar la violencia laboral del ámbito de la producción de comunicación. El Poder Ejecutivo adeuda su reglamentación.
Todo este nuevo marco legal habla claramente de la urgencia, la necesidad y la legitimidad de nuestros reclamos. En el proceso de aprobación de estas leyes han escuchado testimonios, analizado los datos que aportamos y valorado la situación legisladores y legisladoras de todo el arco político: la sanción de la Ley de Equidad en el Senado fue unánime, por ejemplo.
Cuando los denuncias desbordan los redes sociales y por pantallas y micrófonos se maquillan situaciones insostenibles, lo que estamos presenciando es la consecuencia de la conducto de los responsables de los medios que desoyen e ignoran lo nueva realidad: llegó la hora de terminar con la violencia laboral YA!
Las denuncias
Cada vez son más las voces que se pronuncian en contra de Antonio Laje, quien a raíz de la abrupta salida de María Belén Ludueña de los programas Buenos días América y Buenos días América Extra, los cuales se emiten por las pantallas de América TV y A24, comenzó a ser denunciado de manera pública por "maltrato laboral" y hasta por "acoso sexual" por algunos de sus ex compañeros.
De hecho, este lunes el histórico periodista realizó un descargo en vivo en medio de estas acusaciones violencia laboral y reveló que tiene "el alma destruida, el corazón recontra partido y destruido" a causa de estas denuncias. "Yo no creo en los maltratos, la verdad que no. Creo en exigencias de mi carrera, donde fui avanzando y tuve la suerte, porque es un privilegio, de poder crear medios de cero, de poder formar equipo", explicó.
Lo cierto es que muchos protagonistas se hicieron eco de estos comentarios y fueron muy duros con el periodista. "¡No te cree nadie, psicópata!", lanzó Alexis Puig, uno de sus ex panelistas. Por otra parte, Romina Manguel marcó la diferencia entre exigir calidad profesional y hostigar al equipo de trabajo. "No es un tema privativo con las mujeres. Antonio entiende que la exigencia y el levantar la voz puede ser maltrato, cuando la exigencia es otra cosa", diferenció.
Y agregó: "Si vos tenés cuatro compañeros que van en pandemia, que preparan sus cosas, que son profesionales y no les das aire porque querés que la cámara te ponche y porque creés que lo único que importa es tu opinión y que los otros son unos pelotudos, eso es maltrato. Sólo vale tu trabajo y el mío no. En general habla solo el que está de acuerdo con vos. Poner que las mujeres somos vulnerables y que no nos bancamos la presión, no".
El descargo de Laje
Dicho párrafo pareció una respuesta grupal al descargo que Laje realizó esta mañana desde el ciclo que comanda donde entre lágrimas y sollozos, atribuyó las denuncias en su contra al "nivel de exigencia" que él requiere para el programa.
"No tengo ningún problema en pedir disculpas si alguien se sintió maltratado. De corazón le pido disculpas cara a cara donde sea", aseguró.
Pero Laje también atribuyó la divulgación pública de sus actitudes profesionales y personales a que "están tratando de liquidarme, de bajarme, de sacarme del aire".
Desde fines de la semana pasada, Laje fue denunciado por la nutricionista Fiorella Viteli, Mai Pistiner y Eugenia Morea, aunque a la nómina puede ampliarse a María Belén Ludueña, quien abandonó el ciclo en medio de lágrimas, aunque tras ser interrumpida al aire por el periodista, evitó pronunciarse sobre un posible maltrato.
También el Sindicato de Prensa de Buenos Aires indicó esta mañana desde su cuenta de Twitter que “ante las denuncias públicas contra Antonio Laje por el acoso laboral ejercido sobre distintas trabajadoras de prensa, junto a la Comisión Interna de A24 y América TV, las acompañamos y refrendamos nuestro compromiso con la construcción de medios de comunicación sin violencias”. A partir de la renuncia de María Belén Ludueña, Laje fue denunciado por la nutricionista Fiorella Viteli, Mai Pistiner y Eugenia Morea. Ésta última reveló que recibió propuestas indecentes de parte del periodista. "Si no te acostás con él, te echa", remarcó.
Ante las denuncias públicas contra Antonio Laje por el acoso laboral ejercido sobre distintas trabajadoras de prensa, junto a la Comisión Interna de @A24Americatv ,las acompañamos y refrendamos nuestro compromiso con la construcción de medios de comunicación sin violencias.
— Sindicato Prensa BA (@sipreba) December 5, 2021