El año pasado fui candidato a gobernador de Mendoza, por un acuerdo entre el Partido Demócrata, Pro y el PJ Federal, obteniendo más de 140.000 votos (15% del padrón electoral). Desde ese momento continué militando, yendo y viniendo de mi provincia, mientras mantenía mi profesión de periodista en Buenos Aires.
En 1989 fui elegido diputado y después de haber cumplido funciones como secretario de Turismo de la provincia estudié en los EE.UU. y continué trabajando fuera del país. Volví hace un tiempo para dedicarme al periodismo y el año pasado me convocaron para aquel desafío electoral.
En mi trabajo trato de no mezclar y efectuar mis análisis de temas internacionales de la forma más objetiva posible, sin hacer partidismo. Por supuesto que tengo mis puntos de vista y no los oculto. Flaco favor se le hace a la TV pública con ese verdadero sistema de caza de brujas que han implementado desde 6,7,8, una especie de "gran hermano" que todo lo quiere ver y todo lo quiere censurar.
Mucho nos costó recuperar el sistema democrático y la república, que tienen en la libertad de expresión uno de sus pilares fundamentales. Aportar puntos de vista diferentes al relato único parece molestar a aquellos que quieren perpetuarse en el poder y no toleran disidencia alguna.
Luis Rosales
lrosal@hotmail.com