El domingo un informe del diario La Nación reveló que José Ignacio Soba Rojo, quien figura como dueño de LV2, es también presidente de la firma Delome, una sociedad anónima que, según el juez Norberto Oyarbide, "pertenecería a Jaime o a su entorno y es usada como pantalla para ocultar la verdadera propiedad de sus bienes".
Las versiones sobre la compra de medios por parte de Jaime comenzaron a circular hace un año y apuntaban a la Radio AM más antigua del interior del país, LV2 de Córdoba. Pero faltaba encontrar el vínculo con el ex funcionario. Según pudo conocer La Nación, el director titular de Radiodifusora Mediterránea, propietaria de LV2, es Ignacio Julián Soba Rojo, que también aparece como presidente de Delome, una sociedad anónima que, según Oyarbide, "pertenecería a Jaime o a su entorno y es usada como pantalla para ocultar la verdadera propiedad de sus bienes".
De hecho, Delome es la empresa a la que la mujer de Jaime le vendió el departamento de la calle Ambrosio Olmos 878 1° D, de esta ciudad, pero autorizando a disponer del departamento a su hija Agostina Jayo. La joven todavía figura como titular en la escritura con la que esa propiedad fue alquilada a dos estudiantes universitarios. Delome, además, tiene como director suplente a Mariano Vázquez, hijo de Manuel, el asesor de Jaime que se encargaba del avión Lear Jet que el ex funcionario usaba como si fuera propio.
LV2 está tomada desde hace 50 días por sus empleados, que reclaman sueldos impagos desde diciembre. Soba Rojo figura en los expedientes del juicio concursal en el que se encuentra el medio y también en la citación que le envió el secretario de Trabajo provincial, Omar Sereno, a su dirección de Santa Fe 1443, 8° piso, en Buenos Aires. Pero no había nadie allí para recibir el oficio judicial. Antes de ser vendida a Delome, LV2 pertenecía al Grupo Uno, de Daniel Vila y José Luis Manzano. Por eso, sus empleados aún esperan el apoyo que los medios oficiales, políticos y sindicalistas les dieron a los periodistas despedidos por el mismo grupo en Rosario.
El delegado Alejandro Castro Fox recordó la carta que el Grupo Uno envió a la Radio en febrero pasado, en la que indicaba que había vendido a Delome el 100% de las acciones en mayo de 2009. Faltaba un mes para las elecciones. También recordó que las autoridades periodísticas de LV2 habían ordenado "no tocar" a Jaime. La vinculación entre LV2 y Jaime fue incorporada recientemente a la investigación de Oyarbide a través de un anónimo, por lo que es probable que el juez incorpore a este medio entre las supuestas propiedades del ex funcionario.
Fuente: LV2 en lucha y Prensared