Lo dijo el obispo Romanín en una emisora de Río Gallegos respecto a lo manifestado por los obispos tras una reunión anual desarrollada en Mendoza, donde se abordaron problemáticas migratorias. También habló de abuso y violencia familiar.
Juan Carlos Romanín, obispo de Santa Cruz y Tierra del Fuego, se refirió a la redacción de una carta en la provincia de Mendoza donde reflexionó sobre el Tráfico y la Trata de Personas, con motivo de desarrollarse una reunión anual de delegados de todas las Diócesis del país.
"Este año el tema fue el del Tráfico y la Trata de Personas y también le dimos un espacio a todo lo que está pasando en Europa con toda la gente nuestra que está allí y la quieren mandar de vuelta", puntualizó monseñor para comenzar.
La trata "es una realidad muy candente y que está haciendo mucho daño, sobre todo a las mujeres y a los niños. Pensar que detrás de todo esto está la explotación sexual, la explotación laboral, el tráfico de órganos. Es una realidad muy dolorosa", dijo en diálogo con los conductores de un programa radial de la Capital de Santa Cruz.
Por otra parte, Romanín sostuvo sentirse muy contento con estos reflejos solidarios de la gente que se agrupa en organizaciones no gubernamentales que luchan contra el abuso de menores y la violencia contra la mujer, como los que han surgido en Río Gallegos en los últimos meses.
"Este tema que tratamos se dice que es la esclavitud del siglo XXI, junto a la droga y la venta de armamento se mueven fortunas de dinero y en el caso de la violencia familiar es algo en los que todos tenemos que colaborar, asistir, acompañar, proteger", remarcó el Obispo.
Respecto a qué tipo de tareas se propone llevar adelante la iglesia Romanín destacó tres niveles: La asistencia de la víctima, la protección de la misma, y la reparación del daño sufrido.
A esto, indicó que hay lugares donde la explotación de menores está "lamentablemente muy desarrollado", y remarcó que escuchó sobre muchas experiencias en la triple frontera o en los límites de Chile, Bolivia y Argentina.
Por gracia de Dios la iglesia está muy comprometida en el tema. Vos decías antes de empezar (por el periodista) que es un tema tapado y es verdad, es un tema que estaba muy tapado y ahora es providencial que salga a la luz porque todos tenemos algo para decir o algo para hacer", expresó entre otras cosas. Santa Cruz y la trata
Cabe recordar que tiempo atrás se dio a conocer un informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que reveló que los proxenetas "más importantes que operan en las redes de trata", tienen a Santa Cruz como uno de los principales destinos de mujeres para ser explotadas sexualmente.
La investigación constató que este fenómeno "compromete todo el territorio argentino" y que hay personas y organizaciones que "específicamente" se dedican a la venta de mujeres. Por una mujer se paga entre 100 y 5.000 pesos, dependiendo de la zona, de la edad y las características de la persona. La práctica más común de captación es el engaño, pero también está extendido el secuestro, particularmente en el noroeste. Misiones fue identificada como el área principal de reclutamiento. Las provincias de destino son Buenos Aires, Córdoba, La Pampa, Entre Ríos, Santa Cruz, Chubut y Tierra del Fuego.
De Santa Fe, Mendoza y Entre Ríos provienen los proxenetas más importantes que operan en las redes de trata, algunos de los cuales regentean hasta 30 mujeres que alquilan a distintas whiskerías del país y las van rotando. La pesquisa determinó que puede pasar mucho tiempo hasta que una mujer puede liberarse del proxeneta que la explota y "hay casos en que nunca lo logra".
Fuente: Infoglaciar