martes, 15 de diciembre de 2009

“Chicha” Mariani sospecha que la hija de la dueña de Clarín es su nieta: pide un ADN

La fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, María Isabel Chorobick "Chicha" Mariani, solicitó formalmente a la justicia Federal que la hija de Ernestina Herrera de Noble, directora del diario Clarín, sea sometida a estudios de ADN para descartar que sea su nieta.
Se trata de Clara Anahí Mariani, quien fue apropiada luego del bombardeo a la casa Mariani Teruggi, en La Plata, en noviembre de 1976.
La presentación fue realizada ante el juez Federal platense Arnaldo Corazza, quien envió el oficio a su par de San Isidro Conrado Bergesio, magistrado que tiene a cargo la causa dónde se investiga la presunta apropiación de Marcela y Felipe Noble por parte del matrimonio fundador del matutino porteño.
En su presentación, "Chicha" solicitó que el análisis de ADN a Marcela Noble sea cruzado con los de las familias Mariani y Teruggi que están almacenados en el Banco Nacional de Datos Genéticos.
La mujer dijo a este medio que, hace 31 años almacena información en un expediente personal detrás de esta hipótesis. "Atando cabos llegué a esta posibilidad", dijo en una entrevista a Diagonales (Ver "Quiero descartar...").
La resolución está en manos de la justicia federal que debe dictaminar si hace lugar o rechaza la solicitud.
En caso de atender el requisito, la información genética deberá ser analizada en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) que funciona en el Hospital Durand, que fue creado por impulso de las Abuelas de Plaza de Mayo en 1984 y reglamentado por ley en 1987. En 22 años de existencia cumplió un rol fundamental en la determinación de la filiación de desaparecidos.
El BNDG llevó a cabo innumerables exámenes de ADN que contribuyeron a determinar inclusiones o exclusiones de paternidad y consecuente filiación, e identificaciones y coincidencias de patrones genéticos.

Apropiación.
"Las bombas se escucharon en toda La Plata", narraron decenas de testigos en el Juicio por la Verdad. El ataque a la casa de Diana Teruggi y Daniel Mariani ocurrió el 24 de noviembre de 1976, cuando un operativo de fuerzas conjuntas del Ejército y la Policía Bonaerense, conducido por Ramón Camps y Miguel Osvaldo Etchecolatz, atacó la casa con ametralladoras, fuego de mortero y bombas de fósforo.
Testigos dijeron ante la justicia que aquel día el policía y ladero de Etchecolatz Juan Fiorillo fue quien sacó de la casa a Clara Anahí Mariani. Se sospecha que es el mismo policía que aparece mencionado como uno de los entregadores de Felipe y Marcela al matrimonio Noble – Herrera.
Diana y los militantes de Montoneros Roberto César Porfidio, Juan Carlos Peiris y Daniel Mendiburu Elizalde murieron en el ataque.
Daniel Mariani, padre de la beba, fue asesinado el 1 de agosto de 1976 en la ciudad de La Plata por las mismas fuerzas.
Los crímenes cometidos ese día fueron parte de las acusaciones que permitieron condenar a Etchecolatz a reclusión perpetua por delitos de lesa humanidad "cometidos en el marco de un genocidio", según señala el fallo.
Tras el ataque, la casa de 30 Nº 1134 entre 55 y 56 permaneció con custodia policial cerca de un año. Fue invadida y saqueada en varias oportunidades. También se instalaron allí distintas agrupaciones políticas. Recién en 1998 la Asociación Anahí logró que devolvieran el inmueble. Del hecho persisten los balazos de todos los calibres, lo que la marca un elocuente testimonio del accionar del Terrorismo de Estado.
Desde entonces, las familias Mariani y Teruggi intentaron mantenerla tal como quedó luego del ataque. A partir de ese momento, la casa, la única que se conserva en el país en esas condiciones, se encuentra abierta para ser visitada como mueso de la memoria.

“Quiero descartar que sea mi nieta, lo tienen que demostrar”
Desde 1978 a la fecha esta incansable abuela busca a su nieta. Los militares ni algunos representantes de la Iglesia pudieron hacerla claudicar. Tiene el corazón firme en su titánica batalla contra el tiempo y la impunidad.
"Chicha" Mariani dice que le queda "poco tiempo". Su máximo sueño es poder abrazar y besar nuevamente a su nieta como cuando era una beba.
En una entrevista con Diagonales reveló que hace más de 30 años está tras la pista Clarín. "Atando cabos pasé de las sospechas a las casi certezas, por eso pido el ADN", aclaró con esperanza y sin rencores.

¿Cuándo empezó a investigar la posibilidad que la hija de Ernestina Herrera de Noble, dueña del multimedios Clarín, sea su nieta?

La primera sospecha la tuve en 1978, hace 31 años que guardo información en un archivo personal con datos de testigos, fotos y recortes periodísticos. Quiero descartar que Marcela (Noble) sea mi nieta, (el Estado y la ciencia) lo tienen que demostrar.

¿Cómo pasó de la sospecha a este estado de semicerteza?

Cuando (Raúl) Alfonsín asumió la presidencia en 1983 la señora de Noble internó a sus hijos en una escuela de Suiza. Años más tarde realizó una gira visitando a presidentes y reyes de Europa que fueron retratadas en el diario Clarín y yo guardé esas fotos donde veo en Marcela muchos rasgos de las familias.

¿Como cuáles?

La forma de sus piernas son muy de la familia Chorobick, que somos de origen polaco y su cuerpo tiene un parecido asombroso con los de la mamá de Diana (Teruggi).

¿Qué más la hace sospechar?

Un día, Guillermo Patricio Kelly me citó en su casa y me dijo que buscara a Clara Anahí dentro de la familia de los dueños de Clarín y siempre recuerdo que dos Monseñores que estuvieron en la Arquidiócesis de La Plata me decía "Clara Anahí es imposible de recuperar porque están con gente de mucho poder". Además está demostrado que el expediente de adopción de Marcela fue falsificado.

¿Qué le diría a Marcela si la tuviera frente a frente?
Los chicos, tanto Felipe como Marcela, necesitan saber su verdad. La señora de Noble puede acceder a ellos y pedirles que se hagan los estudios genéticos. Sería un gesto magnífico de su parte acceder a este pedido.

Sorpresa y apoyo en organismos de Derechos Humanos
Jorge Jaunarena, secretario de Derechos Humanos de la facultad de Periodismo y Comunicación Social de la UNLP se refirió a las sospechas de Mariani.
Por: Nahuel Curone
Luego de la entrevista con Diagonales, la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, María Isabel Chorobick "Chicha" Mariani, solicitó formalmente a la justicia Federal que la hija de Ernestina Herrera de Noble, directora del diario Clarín, sea sometida a estudios de ADN para descartar que sea su nieta.
Al respecto, Jorge Jaunarena, de reconocida trayectoria en materia de Derechos Humanos, amigo de Miguel Bru (el joven estudiante de periodismo desaparecido en La Plata en 1993 luego de ser detenido por la policía), Co-fundador de la Asociación Miguel Bru, Guionista y Director del documental “¿Dónde está Miguel?”, y actual secretario de DDHH de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata, se refirió a los dichos por Mariani.
Jaunarena afirmó haberse enterado de la entrevista y que la misma le causó cierta sorpresa, y comentó que para él deben realizarse las pruebas correspondientes para comprobar finalmente la veracidad del asunto. Además, destacó que no hace falta la extracción de sangre, “puede usarse pelo o hasta un cepillo de dientes”, explicó.
Asimismo, infirió que debe efectuarse la investigación. “Yo creo que la mejor manera de despejar las dudas es realizando la prueba, lisa y llanamente”, dijo el entrevistado.
En este sentido, hizo mención a la ley que permite a la justicia a solicitar y efectuar este tipo de pruebas, aunque mencionó que no sabe a ciencia cierta si ya está reglamentada o no.
El Pro Secretario de Prensa de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Plata, Lucas Miguel, también fue consultado por Diagonales, y manifestó encontrarse sorprendido por las declaraciones de la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, por lo que prefirió no emitir opinión sobre el tema hasta estar más informado.

Fuente:
Diario Diagonales

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