En Crónica y BAE
El exitoso retiro de firmas y aplauso en Clarín en reclamo de libertad sindical y por el cumplimiento de las paritarias de prensa contó con el apoyo de todos los medios periodísticos donde los trabajadores están organizados. Asambleas, aplausos y retiros de firmas se dieron en todas las redacciones en una muestra más de la solidaridad existente entre los trabajadores de prensa.
La novedad es que la patronal K de Crónica y BAE tomó represalias retirando de manera forzosa la firma de los diarios al día siguiente del retiro de firmas solidario adoptado por sus trabajadores.
El quite de firmas en manos de los trabajadores es una medida acción colectiva que los unifica a todos detrás de un reclamo. Borrar las firmas como castigo es exactamente lo contrario. Busca amedrentar la lucha de los trabajadores.
Mientras los trabajadores se solidarizan entre sí en defensa de sus derechos, los Olmos se solidarizan, represalia mediante, con Ernestina Noble y Magnetto.
Ésta no es cualquier patronal oficialista. Los Olmos son un grupo empresario vinculado a la UOM. Su capital, además de la pauta oficial, surge del gerenciamiento de Forjar Salud, la gerenciadora de la obra social del sindicato metalúrgico. Es decir que estamos ante un ataque lanzado desde las huestes de Caló, el futuro Secretario General de la CGT Balcarce y para colmo, este ataque se hace en sintonía con la patronal de Clarín.
Por un lado, en Crónica la patronal se niega a pagar las paritarias de prensa a un sector del personal y se ausentó de la última audiencia en el Ministerio de Trabajo. El desconocimiento de la paritaria en este punto los emparenta con la Corpo que también se niega a reconocerla.
En BAE envían un telegrama de despido a un colaborador permanente, un periodista reconocido con una antigüedad de 5 años. Se ve que el ajuste no se resume a las políticas de Fontevecchia en Perfil, viene también de la mano de estos empresarios K beneficiados con la abultada pauta oficial.
Esta persecución a las medidas de lucha de los trabajadores de prensa demuestra que el 7D es el momento en el cual algunos patrones se preparan para reemplazar a otros, pero con los mismos métodos de ataque a las libertades sindicales.
Los trabajadores tenemos que repudiar estos manejos autoritarios de las patronales sin distinción de colores. Las patronales de la “corpo” y los de la otra “korpo” son enemigos de la acción independiente de los trabajadores. Como dice el canto de lucha: Unidad de los trabajadores y al que no le gusta, se jode.
Fuente: La Naranja de Prensa