En ese marco, consideró en declaraciones a Radio Provincia, que “fue muy importante la convocatoria de la Universidad de Buenos Aires para discutir el proyecto del gobierno”, ya que “lo peor que puede pasar es que siga vigente la ley de la dictadura”.
“Que haya una propuesta de la democracia, que respete dictámenes de derechos humanos y proponga la libertad de expresión y el derecho a la información es prioritario para la construcción de una sociedad justa, equitativa y plural”, significó Mariotto.
Según indicó, “hay intereses que, frente a la actitud de la Presidenta de instalar el tema en la agenda, también intentan quitarle la posibilidad a la ciudadanía de discutirlo y volver a guardarlo en un cajón”, pero advirtió que ésta vez “el Congreso no puede esquivarle el bulto a este debate”.
Tras cuestionar los dichos de Elisa Carrió, en el sentido de que estaría dispuesta a defender los intereses de los grupos económicos con tal de garantizar la libertad de expresión, Mariotto señaló: “creo que aún la gente de la oposición que estuvo en esa conferencia de prensa y que se pusieron a disposición del grupo multimedio para tener algún beneficio, tienen una gran vocación democrática y más allá de la coyuntura van a poder hacer un aporte, lo que no podemos hacer es cajonear esa ley”.
“El desafío es que se puedan superar las presiones de las grandes empresas y ver cómo podemos comunicar cómo cambiaría la vida de las personas vivir en democracia comunicacional”, afirmó el titular del Comité Federal de Radiodifusión.
En ese marco, advirtió sobre “las sospechas que se montaron sobre las interferencias (de TN)”, en el sentido de que las mismas tenían que ver con el proyecto de ley del Ejecutivo. Explicó al respecto que primero “se generó una victimización” del grupo Clarín y que “cuando el Estado y el ComFeR van a la Justicia y se pone en contacto con la empresa de servicios satelitales y se encuentran las causas de las interferencias, los medios no lo dieron a conocer”.
“Los 21 puntos se conformaron cuando la democracia cumplió 21 años y es la columna vertebral del contenido de este proyecto de ley, hasta ahora siempre las presiones pudieron más que la decisión democrática. La democracia necesita democracia comunicacional para tener una sociedad acorde a los tiempos que vivimos”, cerró el funcionario.
Fuente: Impulso Baires
