Esta ha sido la última polémica de un encuentro que el viernes estuvo marcado por el "ruido de las papeleras", después de que creciera la tensión entre Uruguay y Argentina debido a la entrada en funcionamiento de una planta papelera en la zona fronteriza.
Por esta razón representantes de los gobiernos de Montevideo y Buenos Aires intercambiaron palabras exaltadas y se originó un intenso debate, cuya prolongación llevó a cancelar compromisos de agenda y varias reuniones bilaterales.
Visiblemente irritado
El incidente con Juan Carlos de España tuvo lugar cuando Zapatero estaba interviniendo para pedirle a Chávez que respetase al ex presidente del Gobierno español, José María Aznar, a quien el mandatario venezolano llamó "fascista" en repetidas ocasiones.
Tras el incidente, el rey de España abandonó temporalmente el plenario. "Se puede estar en las antípodas de una posición ideológica y no seré yo quien esté cerca de las ideas de Aznar, pero fue elegido por los españoles y exijo ese respeto", le dijo el presidente español a Chávez.
El gobernante venezolano no paró de hablar intentando interrumpir mientras defendía su derecho a expresar su opinión. Entonces, el rey de España, el único jefe de Estado que ha participado en todas las cumbres, visiblemente irritado, instó a Chávez a dejar hablar a Zapatero diciéndole: "¿Por qué no te callas?".
Sin precedentes
Tras el incidente, tomó la palabra el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, quien, al igual que hizo Chávez este viernes, criticó a empresas españolas. Chávez llamó fascista al ex presidente del gobierno español, José María Aznar. En ese momento, y en un gesto sin precedentes, el rey de España abandonó el plenario de la cumbre.
Al cabo de unos minutos, y a petición de la anfitriona, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, Juan Carlos de España regresó a la sala. Luego, el vicepresidente cubano, Carlos Lage, durante su intervención en el plenario opinó que Chávez, tiene derecho a "defenderse" y dijo que Aznar también ha "atacado a la dignidad de Venezuela".
Pero el presidente de Perú, Alan García, quien regresó a su país tras participar en la cumbre, llamó por teléfono al Rey Juan Carlos I para expresarle su solidaridad. Duras críticas A salida de la cumbre Zapatero dijo que espera que sea "la última vez" que alguien actúa como lo ha hecho Chávez en un foro como la Cumbre Iberoamericana.
El presidente venezolano aprovechó la última sesión del encuentro para atacar duramente a Aznar.
Chávez reveló detalles de una conversación mantenida con Aznar durante una visita oficial a Caracas que el ex presidente del gobierno español hizo en julio de 1999 para "invitarle" a incorporarse al "club del primer mundo". Ortega criticó a las empresas españolas, al igual que Chávez. El mandatario venezolano también acusó a Aznar de apoyar el golpe de Estado que intentó derrocarle en 2002.
"Sabía del golpe y lo apoyó", dijo Chávez.
"Una serpiente es más humana que un fascista o un racista; un tigre es más humano que un fascista o un racista", manifestó Chávez refiriéndose a Aznar.
Papeleras
En cuanto al otro tema de fricciones en la cumbre, Rodríguez Zapatero confirmó que Madrid seguirá mediando para que Argentina y Uruguay mantengan el diálogo sobre el conflicto de la papelera Botnia.
El inicio de operaciones de la papelera desató el malestar de Argentina, que se opone a la fábrica por considerar que contaminará las aguas del río Uruguay.
Montevideo insiste en que el efecto ambiental será controlado y que Botnia representa una inversión vital para el país.
Fuente: BBC Mundo