Fue mediante una resolución firmada por la jueza María Hilda Galdos. La contadora Gabriela Weisburd ocupará el cargo de síndico, de vasta trayectoria en la materia.
Este martes se conoció una resolución que decretó el estado de quiebra del diario centenario El Popular de Olavarria, que atravesó durante los últimos años un proceso de vaciamiento y despidos de sus trabajadores con juicios laborales que superarían los 100 millones de pesos.
La misma fue dictaminada por la titular del Juzgado Civil y Comercial N°2, María Hilda Galdos, que hizo lugar a un pedido de un acreedor laboral el pasado 8 de mayo, según el texto al que pudo acceder Central de Noticias.
Según la resolución de 14 artículos, se solicitaba el nombramiento de una Síndico que lleve adelante el proceso, algo que se confirmó días después con la designación de la contadora Gabriela Weisburd. Cabe señalar que la profesional cuenta con una vasta trayectoria en la materia, e incluso fue síndico de causas como la de la Cooperativa Agraria y el predio "La Colmena".
Además, se decretó la inhibición general de bienes de El Popular, dando cuenta de que esta medida "no caducará" con el transcurso del tiempo. Un detalle a tener en cuenta es que su nuevo titular, Lucas Torres, denunció un vaciamiento "de mucho tiempo" de los anteriores titulares y a quienes le compró el medio, las familias Botta, Casado y Pagano.
En medio de esta situación de quiebra, el multimedios dejó de funcionar en su histórico edificio de Vicente López 2626 y fue trasladado a oficinas de otro edificio céntrico, lo que será un tema a tener en cuenta por la situación de los bienes de la empresa que ahora se encuentran inhibidos.
Si bien se conocen oficialmente una docena de juicios laborales luego de la falta de pago por parte del nuevo titular del medio y con fuertes denuncias de "destrato" por la labor periodística que no era remunerada, se conoció que la cifra de estos juicios superarían los 100 millones de pesos.
Preocupación por el destino del archivo documental de El Popular
"Se trata de uno de los más importantes de Olavarría y es fundamental su preservación", señaló María Luz Endere, vicedecana de la Facultad de Ciencias Sociales
La situación actual de la colección de ejemplares que forman parte del archivo del Diario "El Popular" encendió las alarmas en todos aquellos que se preocupan por la preservación del patrimonio histórico de la ciudad de Olavarría. Hubo una mención a ese punto en la solicitud de la quiebra de la empresa, y será un aspecto a resolver por la nueva administración. Hasta el momento, lo único que trascendió es que está depositado -sin los cuidados del caso- en un local comercial.
María Luz Endere, docente e investigadora principal del CONICET, dirige el Programa Patrimonia del Instituto INCUAPA, también vicedecana de la Facultad de Ciencias Sociales (UNICEN), no duda en catalogar al archivo del Diario "El Popular" como uno de los más importantes de Olavarría.
En diálogo con Verte, señaló que "las instituciones de Olavarría se tienen que organizar para preservarlo, que no se pierda nada en los traslados y que quede individualizado como Archivo de El Popular".
A propósito, en el marco de una investigación que realizó junto a Daniela Iarritu, relevaron el patrimonio documental en las ciudades de Azul, Olavarría y Tandil. La investigadoras explican que "El patrimonio documental constituye la memoria registrada de los pueblos y una parte sustancial del patrimonio cultural tangible, ya que los documentos -cualquiera sea su soporte- nos informan sobre los aspectos más diversos de nuestro pasado".
Advierten que en algunas ocasiones, "los archivos se pierden por desconocimiento o descuido de sus tenedores, así como por catástrofes, robos o por deficientes condiciones de preservación".
Específicamente sobre el archivo del Diario "El Popular", indican que se trataba de un archivo privado creado en la década de 1980, y que contenía diarios, noticias y fotografías publicadas por el medio. El soporte era papel, negativos y digital, y contenía publicaciones realizadas desde 1899. Cuando estaba en el edificio que albergaba el diario y los otros medios de la empresa, tenía condiciones de acceso libre, con una atmósfera controlada para la conservación del papel y era consultado por particulares, escolares y autoridades judiciales. Se podía copiar el material en CD, mediante escaneo o diskettes.
A la hora de plantear recomendaciones para la preservación óptima de estos archivos, las investigadoras explican que hay que tener en cuenta los espacios en los que se dispone el material, para evitar el daño producido por la humedad, la luz o la temperatura u otros factores. También hay que considerar la organización del material y la contratación del personal especializado para agilizar la búsqueda y consulta.
En su investigación, ponderan el archivo de El Popular: "En los tres partidos se observa la inexistencia de recaudos específicos para la conservación del material, particularmente el papel, salvo en casos puntuales como en la Hemeroteca Isaza de Tandil o en el archivo del diario El Popular". Destacaban también que ese material estuviera digitalizado y actualizado.
Finalmente, pensando en un adecuado manejo de este archivo en un plazo inmediato, se debería considerar un aspecto planteado por las investigadoras: "la preservación de las colecciones documentales de Azul, Tandil y Olavarría no depende exclusivamente de la mayor asignación de recursos. Es imprescindible difundir su existencia y sensibilizar a la población respecto de su importancia como instrumentos clave para develar y preservar una parte irremplazable de nuestra memoria". En este sentido, indican, "sería importante que los archivos cuenten con una ordenanza municipal que los declare de interés cultural, de modo de asegurar su preservación a largo plazo".
Fuentes: Central de Noticias, Verte TV