El abogado y periodista Daniel Stragá es reconocido fundamentalmente por su activa participación en la defensa irrestricta de los derechos humanos y por haber encabezado varias causas judiciales contra integrantes del “Gatillo Fácil”. Resonantes casos, entre otros, como los de Walter Bulacio, Sergio Durán y las víctimas de las jornadas de los días 19 y 20 de diciembre de 2001, lo tuvieron como protagonista, junto con los integrantes de la CorRePi, de la que formó parte hasta hace poco tiempo. Pero también tiene una larga trayectoria como docente de la materia Derecho a la Información en la Universidad Nacional de Buenos Aires, y ser abogado querellante en varias causas sobre difamación e injurias en los medios de comunicación. Por tal motivo, Daniel Stragá visitó los estudios de ArInfo Radio y conversó con los conductores de “Radioterapia” sobre el enfrentamiento del Poder Ejecutivo Nacional con el Grupo Clarín y los beneficios que traerá la flamante Ley de Comunicación Audiovisual que ya está en vigencia desde hace algunas semanas
Por: Nancy Azpilcueta y Daniel Raddi
Recurriendo a las comparaciones -que en el derecho son necesarias- nosotros vemos que Argentina goza de una libertad de expresión como nunca. ¿Coincidís?
Sí, sobre todo, y lo traigo a colación después de meses atrás donde una buena cantidad de personas que trabajan como voceros de prensa que tienen muchísimos años en esto y que, en su momento no sólo fueron voceros de empresa, sino que fueron voceros directamente de personajes de la dictadura militar, me estoy refiriendo a Joaquín Morales Solá, que se presentó en la Cámara de Diputados en una amañadísima Comisión de Libertad de expresión manejada por unos radicales de derecha que no recuerdan que Laferriere fue parte de su propio partido y que fue borrado literalmente de la política argentina gracias a las empresas de la comunicación.
El primer senador –por Entre Ríos- que se le ocurrió reglamentar el Artículo 13 de la Declaración Americana de Derechos Humanos –el Pacto de San José de Costa Rica- para reglamentar el derecho de rectificación o de réplica, el tipo fue borrado de un plumazo de la política argentina porque tuvo el tupé de solicitar que, un derecho humano como es el de solicitar la rectificación fuera reglamentado y puesto en la práctica; entonces encontramos a un tipo como Morales Solá que dijo que iba a haber muertos… Digo, muertos hay en Honduras, en México donde efectivamente, los niveles de coerción sobre la palabra escrita y oral son realmente notorios y manifiestos que sí, como bien decís, hay una puja entre el gobierno y un grupo que bueno, está encabezado por Clarín, y lo digo así porque el grupo Clarín ya dejó de ser exclusivamente una empresa periodística.
Yo recuerdo el año pasado cuando a Chávez se le ocurrió nacionalizar una empresa ligada a Techint –Sidor- la campaña del grupo Clarín contra –bueno, ahora es una suerte de enemigo público de Clarín- pero quizá ese origen empezó en esa nacionalización. Uno veía que Clarín le pegaba y le pegaba, que Radio Mitre le pegaba y uno tal vez no entendía por qué tanta historia, parecía que haber nacionalizado esta empresa era una especie de afrenta nacional que, mínimamente y que Argentina tenía que declararle la guerra al estilo de lo que ha hecho varias veces Estados Unidos, que cuando se le tocó alguna empresa Estados Unidos ha invadido; bueno, parecía que Clarín quería que la cancillería rompiera relaciones con Venezuela o cosas por el estilo hasta que, rascando uno un poquito la cáscara, encontró que el 4 por ciento de Sidor pertenece al grupo Clarín y ¿qué estaban haciendo?
Llegaba a un extremo la puja, de exigir indemnización, porque no era que llegaban, la nacionalizaban y la confiscaba, sino que la expropiaba, con lo cual había una indemnización y entonces, qué es lo que buscaban, que la situación se pusiera cada vez más tensa entre la Argentina y Venezuela para que necesariamente subiera el precio de la indemnización, entonces, Clarín hoy por hoy no es una empresa periodística, Clarín hoy es una empresa que tiene una enorme cantidad de intereses en un montón de más empresas que, efectivamente, tal vez el CEO -¿qué es el CEO? La verdad que nunca entendí qué es… Es el gerente de Clarín y un montón de otras empresas que a lo mejor no tienen nada que ver con el periodismo.
¿Hasta dónde va a llegar esta especie de chantaje mutuo entre gobierno nacional y grupo Clarín, donde en medio estamos todos?
Sí, la verdad que no soy brujo… pero coincido con la óptica de Daniel en el sentido de que en definitiva Kirchner fue aliado de Clarín, o Clarín aliado de Kirchner por lo menos en los primeros momentos de la gestión de Néstor Kirchner, lo cual a uno lo pone en una situación de… bueno, la Ley de Radiodifusión, la suscribo, me gusta, sacando algunas cosas pero uno está de acuerdo con que se elimine el monopolio en Papel Prensa pero ¡la verdad que ya aburren!... Ya aburren porque uno toma conciencia que esto es una puja de poder y no tiene el sustento no digo de la inocencia pero digo que no importa, no se tiene en cuenta la Libertad de prensa sino lo que importa es la libertad de empresa de estos comerciantes.
Entonces, en la puja de poder quién va a ganar, y es una pulseada muy fuerte, en la que uno tiende a estar… bueno, cuando a uno le dicen ¿Monopolio? Bueno, yo siempre me pongo del lado de enfrente del monopolio, tampoco creo como Lanata que el más débil sea el grupo Clarín, digo, a veces los egos… No creo que sea lo más débil en la política argentina, lo que pasa es que del otro lado tampoco te podés poner, porque te das cuenta que esto no es –reitero- inocente, que tiene otro trasfondo, que tiene otra búsqueda y claro, uno está en contra del monopolio Clarín pero, no me gustaría otro monopolio al estilo inevitable ¿me entendés?
Tampoco uno quiere ver al Estado manejando todo…
Pero es que además no sirve, porque las versiones del pensamiento, la libertad de pensamiento y de expresión y de prensa no tienen una sola vertiente, no jodamos, no es todo Granma.
Pero daría la impresión de que el gobierno nacional se empieza a encaminar justamente a eso, y como ejemplo podemos ver lo de Fibertel e inmediatamente el anuncio de que habrá Internet inalámbrico y gratuito para todos; o involucrarse en la grilla de los canales de cable de una empresa privada podría interpretarse también como tal ¿no sería peligroso?
Yo… ni tanto ni tan poco. A ver, lo de Fibertel es una empresa que… la verdad desconozco su trato contractual pero que tenía rato que tenía la licencia vencida. Hasta “Mauricito” Macri que es un libremercadista no le había otorgado no sé que negocio en la Ciudad de Buenos Aires porque tenía la licencia vencida.
De hecho yo soy usuario de Fibertel y no salí a la calle a manifestarme por la libertad de elegir, el día de mañana elegiré otra y otra cosa. Esto de que me encasillen como usuario, como defensor de una empresa la verdad que a mí no me gusta en lo más mínimo, partamos de esa base…
No sé si pasa por defender a una empresa, pasa por defender otra cosa, a ver, la caducidad operó supuestamente en 2009, ¿por qué me lo venís a decir en agosto de 2010?
Porque forma parte de la problemática de la puja…
Y eso es parte de lo que cuestionamos ya en ocasiones anteriores, si la empresa tenía la licencia vencida ¿por qué siguieron aceptando, por ejemplo, el pago de los impuestos respectivos?
Estamos de acuerdo… Por eso decía, ni tanto, ni tan poco. El tema de la grilla, la realidad es que la mayoría de las cosas internacionales donde más o menos hay un orden de factores a la hora de determinar qué tipo de programación hay, quiero decir que, en cualquier lugar del mundo uno va al hotel, enciende el televisor y sabe que los canales de noticias están entre, no sé… el 5 y el 10 , los canales infantiles entre el 30 y el 40, la verdad es que eso no es lo que a mí me preocupa, lo que me preocupa es que haya otra visión de la realidad, me preocupa que esa diferente forma de visión de la realidad no se convierta en otro monopolio. No quiero reemplazar a Clarín por 6,7,8… En esta puja a veces a uno le resulta gracioso y le dan ganas de ver noticieros de TN y después te vas a la Televisión Pública y es gracioso, pero la verdad es que, no quiero considerarme esclarecido ni mucho menos pero, ciertamente no somos muchos los que tenemos espíritu crítico, no todos tenemos la capacidad de leer entre líneas que a lo mejor eso no te lo ha dado la Universidad, te lo ha dado un poco la calle y uno dice ‘no me mientan, déjense de joder’ y es que a uno le han vendido muchos buzones en la vida…
Qué es lo que pasa por ejemplo en la Legislatura, con el caso de la Comisión investigadora por las escuchas ilegales de Macri; el PRO le saca a Aníbal Ibarra su relación –no personal, pero sí de su gobierno- con Ciro James, al que le dieron un locutorio en Parque Ciudad, al que le habilitaron una agencia de seguridad y vos decís, a ver Aníbal, si le estás pegando a Macri por Ciro James, lo menos que tenés que salir a decir es ‘ojo, que este tipo ya estuvo y ya era gente de la Policía Federal cuando estuve, a mí también me pasó por arriba’ pero, si lo tapás, lo primero que despertás son suspicacias…
Definitivamente, quiero decirte para redondear, que acá hay dos monstruos que se arrancan la cabeza, la mayoría de la población está en el medio y no tenemos por qué tomar partido. Te repito y parto de esta base: yo me paro de manos, pero no me gusta ni el monopolio estatal ni el privado. Francamente, el otro día me causó gracia: leo en Clarín críticas de determinados sectores hacia Francisco de Narváez por su falta de política, que desde que ganó las elecciones el año pasado ha bajado mucho en las encuestas, realmente no tiene la misma imagen y participación política, apareció esto un lunes, y el miércoles De Narváez apareció en todos los programas de América TV… ¡una payasada! Y di este ejemplo porque bueno no apareciste, te la pasaste rascándote, por así decirlo y ahora apareciste porque te criticaron, ah y apareció también José Scioli que también es hombre de De Narváez y vos decís ¡qué payasada! …
Pero en toda esta puja, en este escenario que nos planteas, yo sé que tienes escozor con cierto tipo de periodistas pero ¿dónde quedan los trabajadores de los medios que sí tienen compromiso, pero que cuidan su fuente de trabajo?
Y… a veces es muy difícil pero la realidad es que en la vida siempre hay que tomar elecciones, digamos, yo puedo tener una adhesión ideológica a la propaganda oficial y es legítimo, puedo tener adhesión al monopolio Clarín y es legítimo, lo que me jode desde el punto de vista humano, si se quiere es que yo tengo que agachar la cabeza y hago propaganda en un lado o hago publicidad en el otro, simplemente por una necesidad. La verdad, la necesidad tiene cara de hereje, pero ¿hasta qué punto? ¿Hasta dónde te puedes convertir en un payaso de tus patrones?
Al hombre de derecho le pregunto, esta Ley de medios, brillante, con sus más y con sus menos porque le da su lugar a los medios alternativos y a los medios administrados por cooperativas u organizaciones sin fines de lucro, en el caso del artículo 161 que aborda los plazos para desprenderse de medios ¿no es un plazo demasiado exiguo? Lo pregunto desde el punto de vista del derecho porque está el tema del derecho adquirido, pero tampoco podés hacer abuso de este derecho…
¿Sabés lo que pasa? Está hecha la Ley y está hecha la trampa. Convengamos lo siguiente, cuando se votó la Ley de Radiodifusión hace un año, recién se está poniendo en práctica. El otro día me reía con un anti K virulento que tengo de amigo que hablaba de lo de Fibertel, que a mí no me importa pero que veo que va a venir una cantidad de recursos de amparo que van a pedalear esto por años. Esto del plazo también. Es como una especie de tiempo muerto, como en el básquetbol esto va a ser así, y la verdad es que Clarín va a tener tiempo de descapitalizarse o desinvertir, ese es el término…La realidad es que esto forma parte también de esta puja…
Pero ¿Hasta qué punto también existe la posibilidad de que el grupo utilice prestanombres o testaferros para aparentar la descapitalización o desprendimiento de los medios en cuestión y seguir en las mismas?
En el caso de Fibertel tengo entendido, no me consta, que están tomando gente para eso y, en vez de llamarse Fibertel, se va a llamar Telfiber o algo así. Vamos por partes, tiene que haber –la ley lo prevé- un consejo de vigilancia, de contralor, en realidad es que no estaría mal que la oposición ocupara los cargos, porque… Silvana Giudici o Elisa Carrió que la verdad es que ya ni siquiera es la “abogada” de Clarín, es la procuradora, la que lleva los papeles a Clarín, pues bien, si quisieran tener una oposición en serio porque muchas veces este grupo no es oposición, es una payasada… impresentable pero quiero decir, si realmente quisieran tener una oposición ¿por qué no nombrás a los dos miembros de la oposición en este consejo como contralores? Digo, el día de mañana pueden cambiar el gobierno y también pueden cambiar los gerentes.
A mí me asusta –por aquello del abogado penalista frustrado que todos llevamos dentro- el tema de la seguridad jurídica y me preocupa porque ninguna nación, ni de izquierda ni de derecha puede crecer sanamente sino es con seguridad jurídica, ahora ¿la seguridad jurídica sobre la base de qué?
Claro, porque el respeto a los derechos humanos es una seguridad jurídica que desgraciadamente es la menos segura de todas.
Pero lo que preocupa, sin que frotes la bola de cristal ¿qué garantías tengo de que en el 2011 pierde el kirchnerismo, tenemos un nuevo gobierno y entonces nos vuelvan a cambiar la Ley?
Es que es muy probable porque ciertamente, con esto parecería que uno está defendiendo la seguridad jurídica de que “gane Kirchner” pero la verdad es que es muy probable que si esto llegara a pasar… a ver, la Ley de medios no es una “Ley de medios K”, es una ley para el país, una ley que tuviera horizontes para por lo menos regular la libertad de prensa o de expresión para por lo menos una buena cantidad de años por delante, no para un gobierno por delante, lo cual repito: en esta puja también los sectores de esta oposición berreta también se han sumado a los negocios de Clarín, esto también hay que decirlo. A mí me provoca mucho escozor pensar que una Ley que tiene muchos objetivos que son de mucha valía, se caiga a pedazos por el peso de los números, lo que significaría una enorme frustración porque significaría volver a la ley de la dictadura militar.
¿Qué tan urgente, en todo este contexto puede resultar la regulación y reglamentación de la publicidad oficial?
Lo que pasa es que la publicidad oficial es un medio de coerción brutal, creo que Ustedes conocen algo de eso ¿no? (sonrisas)… Lo que digo es que forma parte de toda esta evolución hacia una radiodifusión mucho más legítima, mucho más seria, más de verdad. Lo que pasa es que estamos hablando de miembros de… a ver, del lado de Kirchner son todos peronistas y con eso quiero decir que es muy difícil que una maquinaria de poder, te vaya a regalar algo.
Sé que estás muy enojado con la deficiente formación periodística y eso te hizo salir de la docencia en la Universidad de Buenos Aires, a pesar de esa formación ¿cómo calificarías al periodismo argentino en líneas generales?
Lo califico como de baja calidad. Quiero decirte, creo con Rodolfo Walsh, que el periodismo argentino es de un océano de conocimiento de un centímetro de profundidad. Desde mi punto de vista le faltan enormes conocimientos, es de una falta de cultura general abismal. Vos no podés equivocarte al decir Movimiento social de los trabajadores cuando se habla de un Partido que se llama Movimiento Socialista de los Trabajadores…
Bueno, es el gran problema de los movileros ¿no?
No, no te creas, también hay algunas señoras y me refiero a Magdalena Ruiz Guiñazú que se confundía con los muertos, entre Kosteki y Santillán con los muertos de la Plaza.
Fuente: ArInfo Radio