Un conglomerado de cooperativas eléctricas y empresas
de servicios de comunicación lanzaron el nuevo servicio de telefonía “Nuestro”, que competirá en la Ciudad con las multinacionales actuales y para el cual prometen una atención diferencial al cliente.Pero el anuncio que provocó más repercusión fue el que el presidente de Fecosur, Antonio Roncoroni, le hizo al auditorio presente en el tercer piso de Coopelectric a través de una frase dirigida al intendente José Eseverri: “así como hace seis años le prometí a su padre (Helios Eseverri) que iba a volver a Olavarría trayendo la telefonía celular hoy vine a anunciarla, y al mismo tiempo le prometo que dentro de un tiempo voy a volver para anuciar la telefonía IP (Internet)”.
Ambos anuncios se hicieron ante un auditorio donde tendrán alta repercusión. No sólo estaban Eseverri y Roncoroni, sino también el secretario de Comunicaciones de la Nación, Lisandro Salas, el presidente de Infracom, Pablo Bressano, y el presidente de Coopelectric, Carlos Díaz.
Para los locales el lanzamiento, ante todos los medios de comunicación, fue un logro, y se les notaba en los rostros. “Nuestro” está en 150 localidades de todo el país y acaba de ganarles a las multinacionales el derecho a usar esa marca, que había sido recurrido en el Registro de Marcas y Patentes del INPI.
El servicio usará las mismas torres que las instaladas por Movistar y Personal, y de allí en más “tratará de extender las prestaciones a las localidades que hoy no tienen telefonía celular y no la van a tener”, según indicó Roncoroni.
Además, la prestación será similar a la de las otras empresas en cuanto a equipos, pero el servicio de “Nuestro”, según se anunció, apuntará a “mejorar con la atención al cliente, que en nuestro caso será directa y personalizada y no a través de un 0-800 como el resto de las competidoras”.
El anuncio de la televisión no fue tan detallado como el de la nueva compañía de celulares, pero sin dudas encierra tanto o
más volumen que la telefonía celular en el campo de las telecomunicación en la Ciudad.Sobre todo porque implica la primera repercusión fuerte en Olavarría de la aplicación de la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que la presidencia de Cristina Kirchner logró aprobar para romper el oligopolio de las comunicaciones informativas.
La televisión IP (ADSL) es uno de los formatos por los cuales se puede llegar con contenidos a los hogares, compartiendo el espectro de las señales por satélite (en Olavarría la utiliza Direct TV) y el cable (en la Ciudad opera la fusión CableVisión-Multicanal del Grupo Clarín, que ahora queda en cuestión por la nueva ley de medios).
Roncoroni indicó que para proveer el servicio de televisión domiciliaria hacen falta velocidades de alrededor de 7 a 8 megas, cuando las actuales son de entre 2 a 3 megas en los servicios más habituales.
¿Cuál es la diferencia? “Plata, inversión, sencillamente”, respondió Roncoroni cuando infoeme.com le preguntó por lo que hacía falta en tiempo de desarrollo para que Infracom/Coopelectric o una empresa asociada esté en condiciones de dar televisión: “es cuestión de dinero: con invertir en banda ancha lo suficiente las redes de transmisión están en condiciones emitir imágenes y en las 7 a 8 megas se puede enviar televisión de calidad en vivo (broadcasting)”, dijo el directivo de FeCoSur (Federación de Cooperativas del Sur).
Fuente: Infoeme
