Ricardo Gamba es el nuevo presidente del directorio de Editorial Río Negro SA, la empresa que edita el diario “Río Negro” en las provincias de Río Negro y Neuquén. El cambio se produjo con ciertas particularidades, que podrían incrementar más que aliviar las divisiones en la firma.
Quien conducía la empresa hasta ayer, Norberto “Tilo” Rajneri, había retirado la renuncia que, con carácter irrevocable, había presentado una semana atrás, luego del escándalo suscitado por el grave “apriete” producido por el gobernador Alberto Weretilneck. Cuando todo parecía encaminarse hacia una continuidad en su gestión hasta la Asamblea de Accionistas de fines de abril, ayer, jueves, el Directorio rechazó el retiro de la renuncia y, en cambio, votó por aceptarla.
Según pudo conocer Confluencia Digital, la decisión de aceptar la renuncia que había sido retirada fue aprobada luego de que el cuerpo de nueve integrantes rechazara la moción de pedir un dictamen jurídico, merced a cuatro votos más el voto doble del propio Ricardo Gamba quien, por la ausencia en la reunión de Norberto “Tilo” Rajneri, ejercía en la ocasión la la presidencia.
“Tilo” Rajneri había retirado su renuncia argumentando su intención de no provocar dificultades operativas en la empresa, en momentos en que se elabora la Memoria y Balance que deberá tratar la Asamblea de Accionistas. También su deseo de “no provocar una mácula innecesaria” en la tarea del Directorio en su conjunto, algo que aludió -aun sin mención explícita- a la interpretación que dentro y fuera de la firma se le dio al polémico decreto de Weretilneck reduciendo a la mitad -en un día domingo- el Presupuesto asignado apenas dos meses atrás al Instituto Universitario Patagónico de Artes, IUPA. El aspecto institucional, referido al manejo discrecional del dinero público como intempestivo castigo, todavía queda en un cono de sombras.
La crisis de conducción de Editorial “Río Negro” comenzó hace dos años, cuando un grupo de sobrinos de Julio Rajneri –quien condujo el diario y la empresa durante cuarenta años- tomó el control del directorio y lo desplazó. El director periodístico designado por la nueva conducción fue despedido por el directorio, desconforme con la gestión. Y, el 12 de este mes, la intempestiva reacción del gobernador Alberto Weretilneck luego de la publicación de notas críticas del medio a su gestión y allegados, desencadenó una sacudida, esta vez en su nivel directivo, que quedó momentáneamente zanjada ayer. Aun así, el rumbo de la empresa podría definirse recién en la Asamblea de fines de abril.
El diario “Río Negro” es la empresa periodística más importante del sur de la Argentina y tiene una amplia trayectoria en investigación periodística de casos de corrupción y abuso del poder estatal o privado, que lo han ubicado como medio de referencia de la región. También ha participado con revelaciones propias en el análisis e indagación de hechos nacionales.
La información es un bien social, indispensable para la vida en democracia. Y para que ésta fluya con libertad y diversidad se convierte en un imperativo preservar los medios periodísticos que han crecido con márgenes importantes de autonomía ciudadana. No son muchos y, en ocasiones, sobreviven con gran esfuerzo a presiones y recortes. Mientras, desde los gobiernos se alimentan voces que no implican diversidad ni muestran espíritu crítico de control de los poderes públicos y privados.
Fuente: confluenciadigital.com.ar
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