El Festival de Cine Nueva Mirada para la Infancia y la Juventud celebra su 13 edición para formar "espectadores críticos", promover la diversidad cultural, defender el derecho a la libertad de expresión y estimular la producción audiovisual local dedicada a los niños
"El conocimiento y la comprensión de la diversidad cultural es la base de una cultura de paz", explicó a EFE Susana Velleggia, creadora y directora del festival, que concluye hoy en Buenos Aires.Velleggia apuntó a la homogeneización de los productos audiovisuales infantiles y propuso películas de cine para defender los derechos "a la diversidad cultural" y a la "identidad cultural propia" de los niños argentinos.
"Nuestros niños no tienen" estos derechos, se "cercenan continuamente", expresó sin resignación.En este sentido, remarcó que existe una "necesidad de promover la formación de los niños y jóvenes en materia de recepción critica de los medios audiovisuales".
"El 99 por ciento de las obras audiovisuales que los niños ven en Argentina proviene de un solo país, Estados Unidos", dijo la directora de cine e investigadora, quien puntualizó que, "entre las diez películas más taquilleras que se estrenan cada año, seis o siete son los grandes tanques de Hollywood dirigidos a los niños".
Velleggia, también socióloga, celebró la promulgación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual en 2009, conocida como Ley de Medios, que establece que "los canales tienen que programar al menos tres horas de programación infantil" cada día; y de lo emitido "el 40 por ciento tiene que ser producción nacional e independiente".
También destacó el papel que está realizando el canal público infantil Paka-Paka, aunque aseguró que "golondrina no hace verano", al contraponer su situación con las otras "nueve señales de cable infantil, todas con sede en Miami".
El trabajo apasionado que realiza organizando desde hace trece años el festival es para que "en Argentina se produzca un cine y una programación de televisión de calidad para los chicos" y "exista un equilibrio en materia de diversidad cultural" en los productos audiovisuales.En este sentido, demandó una "regulación de las importaciones por país de origen" con el objetivo de "velar" por la "diversidad en lo que se proyecta en argentina".
"El festival pasa películas maravillosas que luego no pueden verse por televisión", dijo la impulsora de la muestra, quien citó como ejemplo la obra del director de cine de animación francés Micel Ocelot, quien este año inauguró la programación del festival y al que se dedicó una retrospectiva de homenaje.
"Su obra es magnifica. En Europa ha causado furor y acá los chicos no lo han visto", dijo contrariada Susana Velleggia.El largometraje "Kirikou y los hombres y las mujeres", del director francés, estrenado en 2012, llegó a Argentina el pasado viernes en la apertura del festival.
Este encuentro es único en su temática en Argentina y se celebra en varias sedes en Buenos Aires desde el 28 de agosto hasta hoy, que cerrará su programación con la entrega de premios y la proyección del filme ganador del concurso de este año.
Más de 20.000 inscritos pudieron disfrutar durante estos días de la proyección de películas de gran calidad realizadas por reconocidos profesionales que los circuitos comerciales de cine y televisión del país no suelen difundir.
El encuentro está organizado por la Asociación Nueva Mirada, miembro de la Alianza global para la diversidad cultural de la Unesco y esta edición contó con la participación de películas de Alemania, Brasil, China, Corea, España, Francia, Holanda, Irán, Japón, Latvia y México, entre otros.
Fuente: Agencia EFE