La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) remarcó su honda preocupación por un ante proyecto legislativo en el Congreso argentino que de convertirse en ley implicaría una directa injerencia del gobierno nacional en la producción de papel para periódicos, en franca violación de principios internacionales y constitucionales sobre libertad de prensa
El 19 de octubre varias comisiones de la Cámara de Diputados dieron dictamen favorable a un ante proyecto de ley que regula la producción, comercialización y distribución de papel para diarios, coincidente con otro proyecto del oficialismo de considerar al papel de “interés público”, que se originó tras la tensa relación que el Gobierno argentino mantiene con los diarios Clarín y La Nación, de los que es socio en la empresa Papel Prensa.
De aprobarse la ley, que podría empezar a tratarse dentro de dos semanas en el pleno de la Cámara de Diputados, se establece una comisión gubernamental de control de la venta de papel, un registro oficial de la circulación de los periódicos, así como que ningún socio podrá tener más del 10% de la propiedad, obligando a los accionistas actuales a desprenderse de las acciones en el término de tres años.
Alejandro Aguirre, presidente de la SIP, expresó que “estamos frente a una nueva y clara injerencia gubernamental que lamentablemente tiene vieja data”, en referencia a que en el pasado se ha utilizado el papel para diarios como método de presión indirecta para acallar a las voces críticas e independientes a lo largo de la historia.
“No podemos salir de nuestro asombro cómo el Congreso argentino podrá legislar en contra de tratados internacionales o de la propia Constitución de ese país, en cuyo artículo 32 se especifica que no se podrá legislar nada que afecte la libertad de prensa y el libre desarrollo de los medios de comunicación”, agregó Aguirre, subdirector del Diario Las Américas, con sede en Miami.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Libertad e información de la SIP, Robert Rivard, director editorial del diario San Antonio Express-News, de Texas, en coincidencia con la postura de entidades de prensa en Argentina, manifestó que “la mejor y única injerencia que debería permitirse el Estado para apoyar la libertad de prensa, sería que jamás se puedan imponer cupos de distribución del papel ni que se apliquen restricciones, licencias, aranceles o gravámenes a las importaciones del papel”.
Fuente: SIP