Hoy a las 17.35 se apagó la vida de don Sixto Palavecino, que durante los últimos tiempo dio pelea a problemas cardiológicos y pulmonares. El embajador del quichua cerró sus ojos a las 94 años y su partida dejó un manto de tristeza en el ambiente cultural de Santiago y el país que se mantuvo pendiente del estado de su salud.
En el que fue el último parte médico de la salud de Don Sixto, el Dr. Luis Orellana había explicado el demejoramiento progresivo que la salud del quichuista evidenció en las últimas 24 horas. A pesar de la asistencia respiratoria, los órganos del artista dejaron de funcionar y habían tornado irreversible el estado de salud.