Comienza hoy la pulseada judicial por la ley de medios
El presidente de la UCR denunciará a la senadora dora Sánchez por haber alterado su voto a cambio de fondos para Corrientes. La legisladora que habilitó la sanción de la norma confirmó que hace dos semanas llamó “mamarracho” al proyecto oficial. Su partido pedirá a la Justicia que investigue si la conducta de Sánchez no se encuadra en el delito de cohecho.
Por: Eduardo Tagliaferro
Sánchez. Primero dijo que el proyecto oficial de ley de medios era un “mamarracho”. Pero su gobernador se reunió con Kirchner y le pidió que apoyara la norma. Lo hizo.
En la mañana de hoy, el radical Gerardo Morales llevará el caso de la senadora correntina Dora Sánchez ante la Justicia. El jujeño se presentará ante los tribunales federales de Comodoro Py para pedirle al juez de turno que investigue si el voto de la cobista a favor de la ley de medios no se encuadra en el delito de cohecho contemplado en el artículo 256 del Código Penal. El titular de la UCR también le reclamó al jefe de los fiscales, el procurador Esteban Righi, que analice el comportamiento de la correntina dentro de lo definido por la Convención Interamericana contra la Corrupción. En ese sentido, le pidió por nota al secretario parlamentario, Juan Estrada, que gire a Righi la votación de la ley de medios y la versión taquigráfica en la que dejó sentada una cuestión de privilegio contra la legisladora.
El viernes, en el plenario del Senado, luego de recordar declaraciones de Sánchez de hace dos semanas atrás, en las que había dicho que el proyecto en debate era “un mamarracho que amenazaba a la prensa independiente” y que los Kirchner “manejan a los gobernadores con la billetera”, Morales destacó que la senadora cambió el sentido de su voto diciendo que lo hacía para “ayudar a su provincia”. En el recinto, el jujeño también subrayó que “el artículo 4, punto 1, inciso a, de la Convención Interamericana, que es ley de la Nación, dice: ‘El requerimiento o la aceptación directa o indirecta, por un funcionario público o una persona que ejerza funciones públicas, de cualquier objeto de valor pecuniario u otros beneficios como dádivas, favores, promesas o ventajas para sí mismo, o para otra persona o entidad a cambio de la realización u omisión de cualquier acto en el ejercicio de sus funciones públicas, está considera un delito, un hecho de corrupción’”.
Después de esta cita, el radical explicó que al no tratarse de una afiliada a su partido no tenía autoridad para una sanción. Mirando fijo a Julio Cobos, que en ese momento presidía la sesión, afirmó con todo su énfasis posible que “el transfuguismo se tiene que terminar porque ya parece un chiste. Y lo peor que hay es una sociedad es que nos acostumbremos a lo irremediable, a que todo se puede, a que no hay límite”.
Incluso preguntó si la senadora, que habitualmente se sienta detrás suyo, estaba presente para que hablara sobre este punto. La legisladora que había ayudado al kirchnerismo a conseguir el quórum reglamentario y que, cambiando su costumbre, ingresó por la puerta que suele utilizar el oficialismo deteniéndose a saludar a los integrantes de la bancada mayoritaria no se encontraba. Lo único que dijo durante toda la sesión fue que se abstendría en la votación particular del artículo 161.
Ayer se la escuchó en Radio Mitre: lo primero que le comentó al periodista Ernesto Tenembaum fue que en ningún momento había dicho que fuera a votar en contra de la ley de medios. Mencionó que haría una presentación judicial contra el medio de su provincia que le armó un “interview con su voz en off” ya que “no son mis palabras”. Después de eso, Tenembaum le hizo escuchar el audio de la entrevista que la senadora desconocía. Después de decirle que si se trataba de un “doble” merecería ser tenido en cuenta por las radios ya que se trataría de un buen imitador, Tenembaum le preguntó si ésa era su voz.
-¿Es usted? –requirió el periodista.
-Sí, exactamente –fue la respuesta de la senadora.
Luego de destacar que el Estado Nacional le debe a Corrientes “mil millones que se están reclamando en la Corte Suprema” y que “pretendemos una transición ordenada” para entregarle el gobierno al triunfante Ricardo Colombi, la senadora volvió reconocer que con su voto pretendía mejorar la situación de su provincia. “Tenemos que recomponer la relación con el gobierno central, que se había perdido después de mi voto contra la resolución 125”, aceptó Sánchez.
La cobista no pudo confirmar si Arturo Colombi, su actual referente político, fue a la Rosada o a la Quinta de Olivos, pero destacó que estuvo en su despacho y que su voto a favor de la ley de medios fue una estrategia decidida con él. Al tiempo que admitió que sigue pensando que “hay mucha gente que vota presionada” y que el gobierno nacional disciplina a los gobernadores “con la plata”. Cuando le pidieron un ejemplo, dio el de los senadores del ARI de Tierra del Fuego que “han apoyado una serie de leyes que no sabemos si fue porque estaban convencidos” o por necesidad. Sánchez reconoció muchas cosas como para que la Justicia siga distraída.
La oposición, a la carga en Diputados
A casi un mes de aprobada la ley de medios en Diputados, se reunirá hoy, a partir de las 10.15, la Comisión de Asuntos Constitucionales para analizar las “cuestiones de privilegio” que se plantearon al comienzo de aquella tensa y conflictiva sesión del 16 de septiembre pasado. Las dos primeras horas de esa jornada fueron ocupadas por 22 reclamos hechos por la oposición, vinculados al tratamiento veloz que se le dio al proyecto y a supuestas irregularidades del oficialismo en la firma del dictamen de mayoría la noche anterior. “Para dar un tratamiento sensato, que vuelva el proyecto a comisiones”, solicitó en esa sesión el jefe de bloque de la Coalición Cívica, Adrián Pérez. Además, hay cuestiones de privilegio realizadas por otros diputados, como la macrista Paula Bertol y la radical Silvana Giúdici. Finalmente, la oposición potenció sus denuncias y terminó levantándose del recinto cuando se dio media sanción a la norma de radiodifusión.
Hoy, el análisis de estas quejas se hará al mismo tiempo en que fue convocada la sesión especial para tratar el presupuesto 2010 y otras leyes económicas pedidas por el Gobierno. Desde la oposición, se mostraron sorprendidos por la superposición horaria, pero confirmaron su asistencia.
La industria opina que la ley de medios es “incoherente”
El cable al borde de un ataque de nervios. Se quejan porque los obligará a cambiar sus programaciones y a pagar más impuestos. Ante los reclamos, el ComFeR accedería a corregir artículos a través de la próxima reglamentación de la norma aprobada el sábado pasado.
Por: Julieta Tarrés
Directivos de señales televisivas extranjeras y nacionales se reunieron ayer para debatir -en forma privada- sobre las “incoherencias” de la nueva ley de medios. Algunos de los consultados admitieron que cuando se implemente la nueva ley se modificarán las grillas de la mayoría de los canales. Otros, en cambio, pronosticaron el encarecimiento del servicio de televisión paga. Antes de aprobar el reglamento del nuevo servicio de comunicación audiovisual, el Gobierno recibió reclamos de propietarios de compañías extranjeras con sede local. Según pudo averiguar Crítica de la Argentina, se quejaron ante Gabriel Mariotto por las “contradicciones y desigualdades” del flamante reglamento audiovisual. Para tranquilizarlos, el interventor del ComFeR les prometió dejar de lado los artículos que perjudiquen sus negocios durante el proceso de reglamentación. La promesa terminó con las demandas de los empresarios mediáticos, pero no logró extinguir las críticas que gran parte de la industria le endilga a la nueva ley por sus incongruencias.
En el artículo 4º, la ley redefine lo que se entiende por señal local o del exterior. Un canal es extranjero si difunde menos del 60% de contenido producido en el país, y nacional, cuando más del 60% de su programación fue hecha en la Argentina. Lo insólito es que ahora Europa-Europa –propiedad de Pramer, la productora nacional que lo creó– se convertiría en un canal extranjero porque emite películas del Viejo Continente. La señal Encuentro, del Ministerio de Educación, podría haber corrido la misma suerte si el Gobierno no hubiera reducido de 60% a 40% la importación de documentales de la BBC de Londres.
Cuando se reglamente la ley, señales como Sony, Warner Channel, Cosmopolitan, I-Sat y MTV deberán modificar su programación para respetar el artículo 4º que exige la emisión de al menos un 40% de contenido local. “¿Qué vamos a hacer? Me imagino que tendremos que combinar series estadounidenses con novelas argentina. Una pavada, porque la gente que mira esas señales quiere ver algo diferente a lo que se emite en los canales locales. Pero lo que más nos preocupa es cómo implementarlo. La programación de Sony, Warner o Cosmopolitan, por ejemplo, se diseña para toda la región. Hacer un esquema único para la Argentina es casi imposible, además de caro”, opinó el director regional de una de las productoras extranjeras que tiene oficinas en Buenos Aires.
A los empresarios de señales deportivas, como América Sports, ESPN, Fox Sports y TyC les preocupa la cesión de derechos que el Consejo de Comunicación Audiovisual les exigirá cuando considere que un evento deportivo es “de interés relevante” para la sociedad. En el artículo 77º, la ley aclara que los derechos de transmisión de competencias en los que participe un deportista o equipo argentino deberán pasar a manos de señales locales (pública o privadas). “Si Lionel Messi juega para el Barça en España y Fox o ESPN tienen los derechos, el Comité podría exigir que ese partido lo emita Canal 9. Un despropósito”, opinó el director de marketing de un canal extranjero.
El nuevo impuesto que deberán pagar los canales sobre facturación bruta encarece aún más los costos. Las señales locales deberán adicionar un 3% a lo que ya pagan de ingresos brutos (3,5% promedio). Y las extranjeras, un 5%, y no podrán desgravar la publicidad de Ganancias. Eso podría perjudicar los ingresos de esas señales, ya que en los canales nacionales no se admitirá pauta publicitaria producida fuera del territorio argentino.
En la industria circulan versiones sobre la argentinización de CNN, que deberá incluir en su programación diaria un 40% de contenido local. Y la desaparición de una importante distribuidora de televisión por cable. Por ahora, sólo rumores.
Las “contradicciones” que se vienen
Para algunos propietarios de las señales nacionales es “ridículo” que les cueste más caro emitir programas realizados en suelo extranjero. “Un programa de cocina argentino, con conductor, producción y técnicos nacionales, que se va de viaje a Japón para hacer un especial de comida nipona será considerado contenido extranjero, porque no se grabó en territorio nacional, como dice el artículo 4º de la ley”, se quejó el director de una productora local que hace contenidos para Canal 13 y América 2. Tampoco Telefe podrá transmitir los enlatados que habitualmente produce en el extranjero y Canal 9 tendrá que dejar de lado los informes sobre las vidas privadas de celebridades de Hollywood.
Fuente: Crítica de la Argentina