ArSat recibirá la mayor parte de ese monto definido por el Gobierno para impulsar la TV digital oficial; Internet de banda ancha y la telefonía celular estatal
Por: Andrés Sanguinetti
El Gobierno destinará el año que viene más de $ 6.300 millones para apuntalar su presencia en el mundo de las telecomunicaciones y pasar a controlar las reglas de juego de este sector.
La cifra exacta son $ 6.379,8 millones, y representa un 46,2% más que los $ 4.363,5 millones que terminará usando este año para financiar el combo de proyectos englobados bajo el nombre de Plan Nacional de Telecomunicaciones Argentina Conectada.
Los datos figuran en el Presupuesto 2013. Dentro del rubro Comunicaciones se estipulan los fondos para sostener el desarrollo la TV digital oficial; el servicio de Internet de banda ancha en todo el país; y un sistema satelital de telecomunicaciones. Durante 2013 se continuará con la implementación del Plan Nacional de Telecomunicaciones Argentina Conectada, que tiene entre sus ejes estratégicos la inclusión digital, la optimización del uso de espectro radioeléctrico; el desarrollo del servicio universal; la producción nacional y generación de empleo en el sector de las telecomunicaciones; la infraestructura y la conectividad, se sostiene en el Presupuesto 2013. También se aclara que las mayores asignaciones están vinculadas con transferencias a ArSat, a Radio y Televisión Argentina y a TelAm, además de créditos para la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC); la Comisión Nacional de Energía Atómica y a la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA).
En concreto, la cifra acompaña la estrategia del Gobierno de crear su propio multimedios de manera simultánea a su embestida contra el Grupo Clarín para obligarlo, a través de la Ley de Medios, a desinvertir y poner en venta gran parte de sus activos como algunas de sus señales de TV paga, radios y una parte de Cablevisión. También se vincula con la pelea contra Fibertel, propiedad de Clarín, a la cual desde el Gobierno califican como un operador que no existe más, tal la afirmación hecha la semana pasada por Ceferino Namuncurá, interventor de la CNC, al diario PáginaI12.
En este contexto, ArSat se convirtió en la nave insignia de la avanzada K hacia el mundo de las telecomunicaciones. Es a partir de la cual se plantea todo el proyecto. Ya controla el sistema de TV digital de alta definición que ya posee 60 plantas transmisoras que cubren el 75% del país y ofrece 28 señales a las cuales pueden acceder a más de cuatro millones de usuarios a través de decodificadores entregados por el Estado. Y está pendiente una segunda etapa para construir otras 100 estaciones de transmisión adicionales.
En cuanto a la red federal de fibra óptica, será de de 53.000 kilómetros y costará $ 2.500 millones. El objetivo es llevar Internet de banda ancha gratis a todo el país, además de servir de plataforma a los programas del Plan Argentina Conectada; el Conectar Igualdad.com.ar, y el desarrollo de la agenda digital.
Además, ArSat también controla el desembarco del kirchnerismo en la telefonía celular, donde se prepara para competir con Movistar, Personal y Claro con el objetivo de ser un referente y regular los precios del mercado. Lo hará operando tres bandas de telefonía que Movistar debió devolver para lograr aval a la compra de Movicom en 2004 y fusionarla con Unifón, y cuya licitación fue anulada el mes pasado. Las frecuencias fueron entregadas a ArSat por parte del Ministerio de Planificación Federal que dirige Julio De Vido. Cuando inicie sus operaciones, ArSat controlará un 25% del mercado celular, aunque todavía no se sabe de qué manera comenzará a ofrecer sus servicios.
Habrá también partidas adicionales para fortalecer las tareas de la Secretaría de Comunicaciones (SeCom); de la CNC y del AFSCA. Todo este plan engloba un monto final de casi $13.500 millones, en tres años, de los cuales, entre este año y el que viene, se habrán utilizado más de $ 13.000 millones.
Fuente: El Cronista